Dónde Natalia, junto a su primo Chiqui, se ve envuelta en quilombos que suceden luego de conocer a Ricardo y su superamigos.
Inicio: Noviembre del 2021.
Okupas×Female
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Natalia y Ricardo bajaron del colectivo encontrándose frente a varios edificios bastantes viejos y poco atractivos para el promedio. Ella pudo reconocer uno de ellos debido a que era por dónde, de vez en cuando, su primo de adentraba para comprar droga.
Caminaron a paso tranquilo pero precavido, o por lo menos ella. Ricardo era el guía ya que según él conocía donde Pollo solía parar en el Docke. Entraron a una de las torres, subieron por el oscuro ascensor y descendieron en uno de los últimos pisos. El pasillo estaba poco iluminado y no se veía o escuchaba a nadie alrededor, casi como si fuera un piso abandonado.
── Déjame hablar a mí, yo sé como tratar con este tipo de gente. ── Aseguró Ricardo generando que Natalia soltara una risa. ── Quédate detrás mío. ── Le ordenó actuando "caballerosamente" e ignorando la burla de ella.
Tocaron la puerta de chapa tres veces, escucharon voces dentro y luego la puerta se abrió. Un joven de aspecto malicioso los atendió. Era de la misma altura que Ricardo y un poco más alto que Natalia. Su cuerpo era flaco pero de lejos se notaba que de debil no tenía nada. Sus ojos negros se clavaron en ambos jóvenes que no tardaron en notar la postura amenanzadora del joven que era conocido como "Mulo".
── Hola, ¿qué tal? Somos amigos del Pollo. ── El Mulo se quedó en silencio, analizando de pies a cabeza a ambos. ── ¿Está? ── Insistió Ricardo
── A ver, esperá. ── Cerró la puerta pero no del todo dejando fácil la escucha de la conversación. ── Che, Pablo. Hay unos chabones que dicen que son amigos del Pollo. ──
── No le habrás a nadie, no vaya a ser que es la gorra. ── Respondió "El negro Pablo", mirando desde lejos la puertam
── No pero no pasa nada. Son unos pibes. ──
── ¿Seguro? ¿Vos sabés cuantos pendejos caen disfrazados así y son altos cobani? ── La voz se fué acercando hasta ellos.
La puerta se abrió de nuevo con el Mulo y alguien más. "El negro Pablo", como lo apodaron los de las torres, era mucho más bajito que el Mulo pero igual o más intimidante que él. Llevaba una camiseta a rayas amarillas y azules de un equipo de fútbol que ni Natalia ni Ricardo lograron reconocer.
── Hola. ── Volvió a saludar Ricardo.
── ¿Ustedes son amigos del Pollo, loco? ── Pablo miró a ambos con desconfianza, midiendolos
── Eh... Sí, sí, queríamos ver si él estaba por acá. ──
── Recién se fué. ── Informó Mulo, serio.
── ¡No te puedo creer, loco! ── Exclamó Ricardo tocando su cabello.
── Sí pero fué a la casa de un muchacho. Va y viene, 5 minutos. Va y viene. ── Pablo hizo un ademán con sus manos.
