Capítulo 10: Llegó el bebé

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POV Poché

Miércoles 7 de abril

Hoy Dylan venía a pasar un par de días con nosotras. Estos días mantuvimos la misma rutina de siempre, pero esta vez Dani me sacaba por las tardes, el lunes fuimos al cine con Vale y el martes, dimos un pequeño paseo por un parque. De verdad necesitaba salir, y ella lo entendía, no me dejaba moverme mucho, pero por lo menos me sacaba de la casa. Abi y Juli tenían el vuelo a las 4 asique pasarían a dejarnos a Dylan a la 1. Estaba emocionada por pasar un par de días con mi ahijado. Ya habíamos desayunado la mañana estaba siendo bastante tranquila. Dani salió un momento a comprar cosas al super, por más que le supliqué que me llevara no lo quiso.

Estos días aproveché para colarme en las cámaras de seguridad del edificio, ahora podía tener control de todas las cámaras desde mi teléfono. Además, aproveche para ponerle un localizador en el teléfono de Dani y en su coche. También aproveche para poder tener control total del portátil de Daniela. Si bien me desarrollaba muy bien en lo físico, la informática era mi punto más fuerte en mi trabajo, y he de admitir que por ello ascendí tan rápido. No me sentía bien con espiar a Dani, pero ya había hablado con Juancho y con Germán y ambos habían estado de acuerdo.

Ayer nos habían venido a visitar la Juli la hermana de Dani y Pau, y aproveché para hacer lo mismo con sus teléfonos después de convencerlas de jugar a un juego del móvil muy estúpido, pero a través de esa aplicación, que cree mientras ellas tomaban algo y yo fingía dormir, pude poner un localizador en sus teléfonos, cuando Johan volviera le pondría un localizador al coche de Pau. Ese día vinieron en el de Juli, pero no pude bajar al garaje, entonces eso todavía me quedaba pendiente.

Eran casi las una y Dani no aparecía, Juli me avisó de que ya estaban viniendo con Dylan. Miré el localizador de Dani y se encontraba relativamente cerca, a un par de calles. No sé qué pudo hacerla parar ahí, pero justo en ese momento me llegó un mensaje de ella diciendo que estaba volviendo ya del super. Obviamente no era cierto, pero por lo menos sabía que estaba bien, tampoco podía controlar su vida. Abi y Juli llegaron con un Dylan muy revoltoso, parecía que sabía que sus mamás se iban a ir y estaba bastante sensible. Lo tomé en brazos mientras Juli y Abi acomodaban todas las cosas en la habitación. Habían traído una cunita portátil para que Dylan durmiera ahí.

Abi: Poché ¿Tú donde duermes?

Poché: Aquí

Abi: Ahh ¿y Daniela?

Poché: Aquí también – en ese momento veo como las dos se sonríen –

Poché: No es lo que parece par de mal pensadas, ella iba a dormir en el sofá, pero yo no la dejé, sólo somos amigas estúpidas.

Juli: Nosotras no dijimos nada bebé.

Poché: Vamos Dylan tus mamás son unas inmaduras...

Me senté con Dylan en el sofá mientras Abi nos apuntaba en un papel las dosis de los biberones de Dylan y Juli conectaba el calentador de biberones y un aparato que los desinfectaba. Además de poner todas los biberones y leche en la encimera.

Abi: Bueno eso es todo, pórtate bien con la tía mi vida.

Juli: Te amo con todo mi corazón

Poché: Yo también

Juli: A ti no era estúpida, era a mi príncipe

Abi: Nos mandaras fotos, ¿No? – con los ojos llorosos -

Poché: A cada rato mi vida.

Me levanté del sofá y los cuatro nos fundimos en un abrazo. Juli se llevó abrazada a Abi que empezó a llorar y yo me quedé con un Dylan que también estaba llorando. Cuando conseguí calmarlo le encendí la tele y le puse dibujitos, ¿Dónde estaría Dani? Ya la extrañaba. Media hora después escuché que abrían la puerta.

Mi mejor caso (COMPLETA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora