Mi mejor caso (COMPLETA)

Capítulo 76: Personas importantes

Viernes 11 de noviembre

POV Dani

Estas minivacaciones habían sido perfectas, tanto que me da rabia tener que volver a casa, me desperté temprano con el sonido de la alarma, eran las 5 y media de la mañana, Poché aún dormía, su resfriado se curó en un par de días. Anoche fue... uff lo pienso y se me eriza la piel, había pasado mucho tiempo desde que no teníamos una vida sexual tan activa. Me levanté a ducharme, nos teníamos que ir temprano, Poché tenía que pasar las pruebas y por la tarde iríamos a la clínica con el doctor, el miércoles habíamos llamado para anular la cita del jueves y pasarla a hoy. Quizás hoy supiéramos por fin que serían los bichitos estos, los cuales estuvieron presentes en todas las vacaciones, era increíble lo que se movían. Cuando estaba aclarándome el pelo noté como la ducha se abrió.

Poché: Buenos días – se acercó a mi desnuda y me abrazó por la espalda –

Dani: Buenos días amor, ya estoy terminando.

Poché: Nooo – hace puchero - llegué tarde.

Dani: Ven ponte delante y te ayudo a ducharte

Poché: No mi amor, sal y sécate no quiero que tomen frío.

Dani: Está bien, pediré desayuno.

Poché: No, vamos a un lugar, tu vístete. Dejé tu ropa en la cama y ya preparé las maletas.

Dani: ¿Llevas mucho despierta?

Poché: Desde que te fuiste de mi lado – me giró y me dio un beso suave –

Dani: ¿Por qué no me seguiste?

Poché: Pensé que tardaría menos en recoger la ropa y preparar las cosas, también bajé a hacer el check-out.

Dani: ¿Pagaste?

Poché: Si amor

Dani: Pero – me silenció con otro beso –

Poché: Pero shh, sigues siendo mi consentida, invítame a cenar y todo arreglado.

Dani: Te amo, te invito a donde quieras.

Vi como Poché estaba por bajar a darle un besito a la barriga y la detuve.

Dani: Por favor no los despiertes, el baño los relajó, si los besas no pararán en todo el viaje y es largo.

Poché: Está bien, me conformo con besar un rato más a su mamá.

Nos besamos durante unos minutos más, después salí, me sequé y me vestí. Poco después salió Poché ya vestida, bajamos las cosas al coche, y estaba yendo al asiento del conductor cuando Poché me sujetó de las manos.

Poché: Amor espera

Dani: Dime bebé

Poché: Mmmm ¿Me dejas conducir a mí?

Dani: eh no sé amor, es un viaje largo, recién está amaneciendo, pero sigue oscuro...

Poché: El coche de Johan es automático, no utilizaré mucho la pierna, además en el camino puedo activar la velocidad crucero y ya no tengo más que hacer.

Dani: ¿Qué es eso?

Poché: Marcas la velocidad a la que deseas ir y el coche automáticamente va acelerando por ti.

Dani: ¿Si te cansas me lo dirás?

Poché: Sí – le di un beso – Gracias por confiar.