Febrero no sólo es el mes del amor y la amistad, sino también el mes con mayor número de rechazos y suicidios al año.
En esta dinámica realizada por "Es de Fanfics" se abordarán 15 días con temáticas no aptas para todos.
Advertencias:
Aparición de O...
Yuriko le pertenece a sharlottesoubirous97 pero la trama es mía, para que no le digan nada.
Heba, ese si es mío 👀
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Estaba soñando con gatitos, gatitos con armaduras pequeñas y espaditas siendo agarradas con sus dientes, decenas de gatitos enfilados y siendo dirigidos por un gato gris de ojos marrones que tenía un casco negro con plumas verdes como el bosque mismo.
Les veía caminar como si fueran pequeños soldaditos y, de repente, todo se volvió oscuro por unos instantes.
Entonces vio a una persona que se acercaba lentamente hacia ella, este le sonrió a la par que le tomaba de las mejillas.
- Yuriko, despierta mi pequeño lirio - Su voz era gruesa pero, a la vez, tan suave y llena de amor.
Abrió los ojos de golpe y se sentó en su cama, busco con la mirada al dueño de aquella voz, sólo para ver qué no había nadie en su habitación.
Estaba sola.
Suspiro limpiándose las lágrimas, siempre que soñaba con esa persona empezaba a llorar sin saber la razón y, cuando despertaba, un dolor profundo le atacaba.
Cómo si hubiera perdido algo demasiado importante para ella.
- Yuriko - Oyó del otro lado de la puerta, siquiera necesito ver el reloj de su mesita de noche para saber que ya eran las seis de la mañana con quince minutos - El desayuno está listo, alistate y baja a desayunar, hice huevos con tocino.
- Si, en un momento bajo - Respondió.
Escuchó los pasos alejarse así que decidió levantarse de una buena vez.
Una vez que su habitación quedó lista y ella vestida con el uniforme de la preparatoria, tomo su mochila y bajo a la cocina donde su hermano y abuelo se hallaban desayunando.
- Buenos días - Saludó a ambos que le saludaron antes de sentarse y empezar a desayunar, una sonrisa salió de sus labios al sentir el sabor jugoso del tocino.
"Yuriko, limpiate la boca, tienes algo de yema en tu mejilla derecha"
Abrió los ojos al escuchar aquella voz, por inercia buscó al dueño pero nada.
Sólo estaban ellos tres.
Se limpió la mejilla derecha notando que, en efecto, tenía un poco de la yema en esta.
¿Cómo es que...?
- Abuelo, no olvides tomar tus medicinas y estar atento en la tienda, hoy vendrán los paquetes de cartas que pediste - Le recordó su hermano a su abuelo Solomón - Mamá bajará más tarde, llegó cansada del restaurante, le dices que su desayuno está en el refrigerador para que coma.
