Cortos Kim Dokja/Yoo Jonghyuk

Acurrucarse después de la ducha

Kim Dokja acaba de salir de la ducha. Había una toalla tirada sobre su cabeza mientras caminaba hacia la cama con su teléfono en la mano.

"Seca tu cabello."

Una voz interrumpió su desplazamiento. Kim Dokja levantó la vista y fue recibido por su encantador esposo frunciéndole el ceño desde la cama.

Kim Dokja sonrió al verlo. Yoo Joonghyeok se había duchado antes que él, por lo que ya estaba en pijama. Tenía un par de anteojos de montura delgada apoyados en el puente de la nariz y una computadora portátil frente a él. Probablemente estaba estableciendo un horario para la próxima semana en el trabajo, algo que solía hacer los jueves por la noche.

Kim Dokja abrió el calendario en su teléfono. Quién lo hubiera pensado, hoy era jueves.

"¿Estás trabajando?" Preguntó a pesar de que sabía que lo era.

"Mmm."

"¿Ya casi terminas?" Kim Dokja caminó hacia el lado de la cama de Yoo Joonghyeok y se sentó en el suelo.

"¿Por qué?" Yoo Joonghyeok miró a su esposo, quien tenía una sonrisa estúpida en su rostro.

"Para que puedas secar mi cabello por mí".

Yoo Joonghyeok suspiró. Por mucho que actuara como si odiara hacer este tipo de cosas por Kim Dokja, secretamente disfrutaba que le pidieran que hiciera cosas tan simples por él.

"Dame cinco minutos más".

Kim Dokja asintió con la cabeza y solo observó a Yoo Joonghyeok mientras escribía. Yoo Joonghyeok se había graduado de jugador y ahora era el director de una popular empresa internacional de juegos. Kim Dokja insistió en conseguir un trabajo como alguien que ayudaría a idear nuevas tramas de juegos debido a su gran imaginación, pero Yoo Joonghyeok se negó. Dijo que era suficiente para mantenerlos a los dos, por lo que Kim Dokja pudo quedarse en casa y descansar.

Sin embargo, Kim Dokja nunca llegó a descansar. Pasó dos de los cinco días de la semana con Yoo Joonghyeok en su trabajo y los otros tres días los pasó cuidando a sus cuatro hijos: Lee Gilyoung, Shin Yoosung, Biyoo y Lee Jihye. Los fines de semana eran para que él y Yoo Joonghyeok se relajaran juntos, a veces en compañía.

Yoo Joonghyeok cerró su computadora portátil y se quitó las gafas, luego las colocó en la mesita de noche al lado de su cama.

"Aw", suspiró Kim Dokja, molesta. "Te ves guapo con tus lentes puestos."

Esto hizo que Yoo Joonghyeok también suspirara pero, además de eso, ignoró el comentario de Kim Dokja. Se dio la vuelta para que sus piernas quedaran colgando de la cama y acercó a Kim Dokja a él. Kim Dokja sonrió y apoyó su espalda en las piernas de Yoo Joonghyeok mientras comenzaba a frotar la toalla por todo su cabello.

"¿Estás ocupado mañana?" Kim Dokja preguntó desde debajo de él.

"¿Por qué? ¿Hay algo que quieras hacer?

Kim Dokja negó con la cabeza. "Solo quiero pasar el día contigo".

Kim Dokja pasó casi todos los días con Yoo Joonghyeok, pero nunca se sintió suficiente. Quería pasar un día tomándolo de la mano, un día abrazándolo, un día plantándole besos por toda la cara, un día alimentándolo, un día jugando con su cabello, un día admirando lo guapo que era, un día contándole historias que probablemente se lo había dicho cientos de veces antes, y un día agradeció a los seres superiores por bendecirlo con un esposo tan perfecto.