Parte Once.

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Sakura había recibido la llamada de Hinata, ella había invitado a cenar con Naruto y Himawari, ya que el equipo 7 estaba en una misión, ella se sintió incapaz de negarse a la anterior Hyuga a pesar que se ahora se sentía incómoda con el Kage

[...]

En la tarde se paró en la puerta de los Uzumaki con un pay, para su mala suerte se emparejó con Naruto en la puerta

Ambos se sentían nerviosos y antes de que él dijera la primera palabra, ella se la ganó

—¿No vas a abrir? Después de todo es tu casa— reclamó

—Sí— desanimado respondió y abrió la casa

—Bienvenidos— dijeron ambas mujeres en la casa

Naruto soltó una sonrisa amarga y suspiro —Gracias—

Sakura notó esa actitud y olvidando su enojó con él se preocupó

Se propusieron a comer, era demasiado calmado, nunca había notado que el ambiente era insípido

La niña le sonrió dulcemente, ella se limitó a sonreírle también, tenía un ligero parecido con su padre

El rubio la veía, estaba al pendiente de su comportamiento y actitud, por un momento vió a su esposa y decidió se concentró mejor en su comida

Se acabó la hora de comer y la oji-jade estaba por agradecerle a Hinata pero el rubio le dijo algo al oído a su hija que rápidamente abordó a la mujer

—Papá me dijo que usted sabe de la historia de cuando él tuvo una mascota, ¿Me la cuenta?— cuestionó

La peli-rosa sabía que Naruto lo había hecho con intención, prácticamente estaba usando a su hija pero ella no quería negarse a la niña

Todos se sentaron y escucharon la anécdota contada por Sakura con comentarios de Naruto

Himawari estaba encantada de  como ambos hablaban con tanto entusiasmo y se peleaban por decir la verdad, y se sonreían

—¿Dónde estabas tú, mamá?— preguntó haciendo que todos callaron

Todos excepto la niña se sintieron incómodos

Sakura tosió para desviar la atención de la oji-azul —Estaba con su equipo. Tu papá y yo tenemos muchas historias porque éramos del mismo equipo—

—Pero esa vez no era una misión— soltó

—Himawari— llamó la de ojos color lavanda —¿Porqué no le hablas de nuestro picnic?—

—Bueno...hicimos un picnic...— habló la de cabello azúl marino extremadamente corto —Comimos e vimos una fotos...— divagó —¡Yo junte flores!— dijo tratando de hacerlo más interesante —Mamá tengo sueño—

—Te llevaré a dormir— le dijo la mujer para levantarse y tomar la mano de la niña

—Adiós Sakura-san— se despidió —Buenas noches papá—

—Adiós Sakura-san— también dijo la Hyuga

—Adiós— la oji-jade también se despidió con la mano

Cuando ambas féminas de cabello oscuro subieron las escaleras, Naruto paró la ida de su antigua compañera

—Lo siento— se disculpó con auténtico arrepentimiento —Me has disculpado mucho pero está vez te lo prometo, si digo algo que no te guste me puedes golpear si así quieres—

Sakura ya no estaba tan enojada con él —Ya he tenido suficiente de disculpas y agradecimientos, Naruto, te agradecería si dejas de hacerlo tú—

—Pee...— titubeó pero paró —¿Ya no estás enojada conmigo?—

—Para nada— dijo con una sonrisa —Te veo luego— sabía de antemano que él le había perdonado cosas más graves a ella

Ambos se pusieron en la puerta, él le dió una sonrisa de felicidad y cerró sus ojos, eso lo pudo ver Hinata que estaba al filo de las escaleras

—¡Da lo mejor de ti Sakura-chan! Yo estaré para lo que sea, pídeme lo que tú quieras—

La oji-jade sonrió —Es realmente apreciable para mí— dijo antes de irse

La mujer que los veía desde adentro entró a su cuarto, creía que era bueno que ambos tuvieran tan buena amistad

Naruto no espero ni dos minutos a que ella se fuera para invitarla a tomar una copa

Sakura no le contestó el mensaje, lo pensaría después. Por fin había tenido otro momento ameno cuando estaba platicando con ellos aunque la mujer de Naruto no hubiera participado

Él se fue a dormir, con todos sus pensamientos amargos que podía apagar cuando estaba con ella

—Soy un idiota— dijo y se golpeó con la almohada

La Haruno se sentó para mirar las estrellas, recordó su viaje en el aire libre con Sasuke pero al mover sus cabezas prefirió pensar en otra cosa, entonces pensó en su juventud, pensando insistente en él, sufriendo

Sakura invariablemente termino pensando en su hija, su única fuente de felicidad duradera y concisa... decepcionada de ella por el cambió y por decidir dejar de fingir que estaba bien con los terminos de la relación de ella y su padre

Ella tenía que encontrar la forma de hacer entender a su hija, aunque sabía que sería difícil como se le hizo a ella

Pensó en Naruto, amaba a Naruto como un padre, sabía que hasta lo acosaba y le gustaba mucho hablar de él, era como su ídolo, tal vez él podía ayudarla con eso

Ahora todo iba ser más difícil para el Hokage, ella no sabía que eso sería para él jugar en los bandos

Ella se fue a su casa con una sonrisa de satisfacción pues creía que con eso todo se arreglaría, al llegar miró la foto del equipo 7 y esa fue la primera vez que no se sintió mal al verla y tomó la foto de su hija y ella, sonrió

Sentía que todo estaría bien a partir de ese momento

O bueno eso es lo que ella pensaba

Ella aceptaría la invitación de Naruto entonces

N/a: Se me cae la cara de vergüenza con esta historia, pero este último año me ha faltado mucha inspiración. Es corto porque el que viene será dramático...

El último recurso [NaruSaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora