Aún con la autoestima por los suelos, Levi Ackerman confiesa sus sentimientos a su amor platónico, pero lo peor no es ser rechazado, sino lo que viene tras ello. Han pasado los años y aquel azabache no es la misma persona tímida y retraída que fue a...
¿El final se aproxima?🤔🤔 Sinceramente no lo sé😇😇. Pero el drama aumenta y eso es algo innegable😉😉😉. Espero que disfruten el capítulo.😝😝😝
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Hasta el momento no se percató siquiera de su presencia, pero es cierto que aquella mirada azul no pasó desapercibida para la mujer, y al pronunciar aquel nombre todo tuvo sentido para ella.
Aquel hombre de gesto malhumorado y osado era aquel enclenque de instituto que se opuso a ella y a su férrea voluntad de tener para sí a Eren, e hizo lo que ninguna persona fue capaz de hacer, confesar sus sentimientos al castaño e influir un ápice en aquella sensibilidad apenas perceptible para nadie. Ahora después de tantos años aparecía de nuevo, y su presencia no presagiaba nada bueno.
- Y qué importa quién seas enano enclenque... Sabes las repercusiones que esto puede traer ¿no es así? - se dirigió de nuevo a Eren, quien, ante la mención de ello, se interpuso entre ambos intentando apaciguar la situación. Ella estaba en lo cierto, toda esta situación podría tener repercusiones, sobre todo para la niña, pero después de tener tan cerca el objeto de sus pesadillas, Levi no podía olvidarlo todo tan fácilmente. Era su oportunidad, y no pensaba desaprovecharla - Será mejor que te marches... Nunca fuiste nada... Y lo seguirás siendo... No te interpongas en mi familia... - Eren no pudo hacer más que cerrar sus puños y aceptarlo con resignación, puesto que no podía hacer nada ya que no era él quien estaba en juego.
- ¿Familia? Me causa gracia como alguien que no se cansa de decir lo enamorada que está y del cariño que le tiene a su supuesta hija, lo rápido que es capaz de cambiarlo con tal de conseguir sus objetivos... - fue en esta ocasión cuando la mujer se dirigió a él, y furiosa ante su atrevimiento, intentó darle una bofetada, pero el ojiazul la detuvo - No pienso dejar que lo hagas... Estás loca... Y no pienso permitir que te aproveches de la debilidad y sufrimiento de las personas... Esta vez lo vas a pagar caro... - la mujer intentó recurrir de nuevo al castaño, pero vio cómo Eren se situaba a su costado, y pese a su temor, se sentía fuerte a su lado, al igual que la pequeña, quien lo tomó de la mano para así obtener un poco de su fuerza.
Sin capacidad de argumentar nada más se marchó, aunque no sin antes prometer que esto no había acabado ahí.
- Aún no entiendo que es lo que ocurre, pero gracias... - pronunció Eren en apenas un suspiro desahogado, pero fue en ese momento cuando recibió un bofetón de Levi ante su quietud frente a la mujer - No podía hacer nada Levi... Si se lo propone me arrebatará a Gabi y yo... Yo no sé qué hacer...
- Pues piensa con esa cabeza tuya joder... Esa estúpida te ha tratado a ti y a Gabi cómo si no fuerais más que meros muebles... - sabía que estaba alterando su tono y perdiendo los estribos, motivo por el que se vio en la obligación de respirar y calmarse - No es culpa tuya, pero es cierto que lo has permitido... Pero no creas que voy a dejar que gane la partida... Ya lo he permitido demasiado tiempo. Hay ocasiones que no siempre gana la reina en las partidas... Lo siento, pero tengo mucho en que pensar, será mejor que me vaya... - y aunque quiso detenerlo, Eren sabía que no podía, o más bien, no se sentía capaz de ello. Pero antes de que cruzara el umbral de la puerta sintió como alguien tiraba de su ropa, y no era otra más que Gabi. - Sabía que no deseabas ir con ella... Eres como tú padre, se te nota con una sola mirada... Esto no hará que ya no la veas, pero al menos lo retrasará...
