🌊Capítulo 14🌊

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♡Maratón de 1/?♡

Despertar y ya no tener fiebre era una de las mejores sensaciones que alguien puede sentir, o poder respirar bien después de un resfriado también era algo en cierto modo satisfactorio. De esa misma manera se sintió Peyton cuando despertó de su siesta.

Aún no había disminuido la fiebre completamente, pero en comparación a la mañana se sentía mucho mejor. Quizás fue porque al despertar estaba Shiro a su lado, esperando a que ella abriese los ojos para poder llevarle una sopa que había hecho el mismo.

El tiempo al estar juntos, para ambos, pasaba en un abrir y cerrar de ojos. Shiro llevaba allí desde la mañana y ya eran las tres y media de la tarde.

¿En qué segundo paso todo ese tiempo?

Justo cuando Shiro se fue a los segundos llego Aidan, pero Peyton no podía estar menos interesada en su hermano. El tiempo en el que conversaba con él, recordaba todo lo que habían hablado con Shiro, de la infancia de cada uno, como se llevaban con su familia, aunque el mayor no quiso dar detalles de esta, todo tipo de temas.

En la conversación con Shiro, el único detalle que el dio y que marco su niñez fue una amiga que ella tenía. Ella era fan de las sirenas, duendes y demás, hizo que a él le gustaran también ese tipo de cosas. El sueño de ambos era ser un escritor de ciencia ficción, fantasía y cosas así. Pero lamentablemente ese sueño no fue posible para ella, ya que murió de un cáncer en el corazón.

También le explico las reglas que había entre quienes eran protegidos y los guardianes. Primero, siempre el guardián debe proteger al príncipe o princesa. Segundo, al cumplir la mayoría de edad ambos debían casarse. Tercero, al casarse el guardián ya no tenía la necesidad obligatoria de proteger al príncipe.

Esas eran reglas básicas, eso era al menos en el reino de Víctor, el padre de Peyton y Aidan.

Así es, los guardianes y príncipes o princesas debían casarse.

Normalmente era por obligación en la mayoría de los reinos, y este no era la excepción, pero había algunos que podían quitarla si lo deseaba el rey.

Aun después de verse en cara a cara, hablaban por mensajes como si no se hubieran visto en una semana entera. Solo les faltaba decirse <<Te extraño>>, <<Quiero verte>>, etc. Parecían más pareja que amigos la verdad.

En cada mensaje que le llegaba era una sonrisa más en los labios de Peyton, ¿Quién diría que alguien que habías conocido hace un poco más de una semana te podía hacer sonreír tanto?

¿Era posible? ¿Podía ser que sol se estuviera gustando Shiro?

No había duda alguna de ello, solo faltaba que alguno se declarara al otro. Pero era un poco imposible, ambos eran bastante tímidos a la hora de mostrar los sentimientos. Eran los típicos adolescentes que eran capaces de decir todo por mensajes, pero a la hora de decirlo a la cara era difícil.

- Ya es la séptima vez que ves tu celular y sonríes, ¿Qué te hace estar tan feliz? – Se acercó a ver la pantalla del celular pero ella fue más rápida bloqueo el celular en cuanto pudo. – ¿Qué quieres ocultarme?

- Nada – Sujeto su celular más fuerte esperando que fuese suficiente como para que su hermano no lograse quitárselo de una. –

- Déjame ver – Tomo el celular en sus manos e intento ver la razón de las sonrisas de su hermana. – ¿Cuál es la clave?

- Como si te la fuese a decir, dame mi celular.

- Primero dime con quien hablabas.

- Con T/n, ya dame mi celular – Dijo intentando saltar, cuando Michael subió el celular más alto de lo que solo podía alcanzar – Basta.

- Dime la verdad – Después de unos segundos de pensarlo, Peyton suspiro y se rindió. –

- Con Shiro.

- Es una broma, ¿No?

- No, no lo es.

- Ahora dámelo.

- Toma – Se lo devolvió. –

- Gracias, aunque creí que te enojarías mas.

- No, después de todo algún día te casaras con él.

- ¿Le has dicho a Luna algunas de las reglas?

- Trato, pero simplemente las palabras no salen de mi boca.

- Bueno si lo piensas bien, no tendrá más opciones. Lo hará aun si es obligada.

- Lo sé, pero quiero conocerla. – Peyton se giró inmediatamente al oír eso. –

- ¿Te gusta T/n?

- No lo sé.

- ¿Cómo que no lo sabes?

- Es que es tan fría conmigo a veces.

- Sí, pero puedes hacer que salga su lado tierno.

- ¿Cómo hago eso?

- Solamente debes averiguar más cosas de ella.

- ¿Y cómo?

- Preguntándole cosas, sus gustos, hablar, podrías empezar por pedirle el número.

- ¿Conocerla más?

- Si.

- Está bien, lo intentare.

El resto del día fue así, Aidan preguntaba Peyton daba el consejo. Llego la noche, comieron y fueron a dormir. A la mañana siguiente Shiro estaba esperando a Peyton en la salida de la escuela, haciendo que una sonrisa se escapara de sus labios.

Sin duda, la relación que ellos podrían llegar a tener tendría un buen futuro.

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🌊Y con este capitulo empezamos con la maratón por los 1k de vistas, muchas gracias por todo el apoyo que le están dando a esta historia, enserio muchas gracias, espero les guste mucho la maratón y disfruten mucho el capítulo y le den mucho apoyo, disculpen si hay alguna falta de ortografía y comenten mucho por favor me encanta leer sus comentarios, y nada cuídense mucho y sin mas hasta el próximo capitulo🌊

𝑆𝑖𝑟𝑒𝑛𝑎𝑠 - 𝐴.𝐺. {𝑨𝒅𝒂𝒑𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora