The Book of Shadows ••Kookv••

Vigésimo octavo

"Nuestra historia"

Los besos que se daban el par de chicos iban cargados de deseo y ternura, porque a pesar de lo excitados que estaban, también se habían extrañado tanto que simplemente el amor era el sentimiento dominante ahora mismo.

Jungkook separó a su amado un poco y preguntó "¿Estás seguro de querer hacerlo aquí?" Miró a su alrededor, no era un lugar nada bonito.

"¿Qué importa?" Respondió el menor levantando sus hombros y mirando alrededor también, todo estaba oscuro y probablemente habrían animales grandes a esta hora "Piénsalo así" Sonrió "Haremos el amor en el lugar donde nos conocimos, ¿No te parece lindo?"

"Si lo dices así, es más que lindo" Hizo un puchero.

El menor al darse cuenta del gesto tierno, se acercó y lo besó felizmente, en serio que estaba muy feliz.

El pelinegro cargó al pequeño castaño para poder ponerlo debajo de él, volvió a besarlo un poco más mientras se deshacía de su ropa lentamente; se acercó tímidamente a una de las orejas contrarias y la lamió con nerviosismo, haciendo que su lengua temblara en la oreja de su chico.

Este, al notarlo, sólo pudo reír con ternura "Kookie" Llamó poniendo sus manos en sus mejillas "No pienses tanto en que todo debe salir perfecto" Sonrió "Sólo haz lo que quieras hacer sin avergonzarte o pensar demasiado en esto" Miró su nariz antes de dejar un pequeño beso en esta "Sé que la primera vez es algo importante, pero está bien porque nosotros nos amamos, ¿Sí?"

Jungkook sólo pudo asentir haciendo un ruidito de confirmación, respiró profundamente para poder calmarse y alejó las manos del menor, las suyas acariciaron el lóbulo de la oreja izquierda del chico, mientras se acercaba a la otra y la lamía lentamente, sacándole unos cuantos gemidos al menor, sonido que le encantaba. Besó su mejilla y luego fue dejando un camino de besos por su cuello hasta llegar a su pecho, donde empezó a jugar con sus pezones, con su boca lamía, mordía y besaba uno de ellos, mientras con una de sus manos lo pellizcaba y acariciaba algo fuerte; era cierto que quería hacer esto con amor, pero también era cierto que la lujuria lo acabaría cegando por completo.

De un momento a otro escuchó un quejido del menor, pero no parecía de placer, así que decidió preguntar "¿Te duele?" Dejó sus manos quietas.

"V-Vaya" Llevó una de sus manos a su rostro para poder cubrir el sonrojo que tenía "¿Dónde quedó el chico tímido?" Soltó una pequeña risa entrecortada ya que estaba algo exhausto por el placer.

El pelinegro lo miró con ojos de cachorrito regañado "L-Lo siento" Bajó su mirada "Si estoy siendo muy brusco, dímelo"

Negó "No te preocupes, me gusta" Sonrió "Puedes hacer lo que quieras conmigo, hyung" Susurró algo desesperado, quería que su amado volviera a tocarlo.

"Como digas" Sonrió y apartó la mano del mayor para dejar un beso en sus labios.

Jungkook volvió a lo suyo con los pezones del castaño, mientras que este enredaba sus dedos en su cabello, jalándolo y acariciando a veces. El pelinegro dejó un beso en su clavícula antes de chupar en ese lugar, lo hizo hasta que una marca roja apareció en el lugar y le encantó como se veía que no pudo resistirse a hacer muchas más, parecía que a Tae no le importaba, así que sólo continuó con su trabajo; después de un rato, el menor tenía muchas marcas de chupones en su abdomen, su pecho y su cuello.

Soltó a una risa delicada y tierna al ver a Jungkook admirando el resultado "Te tomaste tu tiempo, Kookie" Pasó su mano lentamente por algunas de las marcas e hizo una expresión de dolor, ya que pues, Jungkook había hecho eso muy fuerte.

"Lo siento, intentaré ser más gentil" Sonrió al momento de volver a admirar su trabajo "Se ve muy hermoso, ¿No?" El contrario asintió "Te haré más en las piernas" Relamió sus labios al ver la expresión de sorpresa del menor.