Déjame Ir - ◐кσσкмιη◑

✧･ﾟ: *Uno✧･ﾟ:*

No podemos estar juntos

En serio me gustaría decir que luego de separarnos, quedamos en buenos términos. Desearía que diariamente no tuviese que poner mi celular en silencio gracias a tus miles de mensajes y llamadas. Me encantaría decir que firmaste los papeles del divorcio y que al fin podía estar tranquilo. Pero no era así.

Me encontraba en una reunión, el plan de trabajó que habían propuesto nuestros nuevos socios era maravilloso. Agrandar la empresa que con tanto esfuerzo mi mejor amigo y yo fundamos, era lo mejor que nos podía pasar en años. 

—Bueno, muchas gracias por su tiempo —me puse en pie y estreché la mano con ambos hombres. 

—Es un placer hacer negocio con ustedes —dijo el pálido, y sonrió coquetamente en dirección a mi mejor amigo. 

—Que tengan un bonito día —habló el otro, con una hermosa sonrisa que iluminaba el lugar. 

Taehyung tímido estrechó sus manos de igual forma y ambos se fueron. 

—¿Me parece a mí o los dos te estuvieron coqueteando? —mencioné cuando ví que ya estaban lo suficientemente lejos para no escucharnos— ¿No eran pareja? Ya me perdí.

—No lo sé —rasco su nuca con nerviosismo— Pero eso es lo de menos ¡Hicimos un gran negocio! 

Reí ante su entusiasmo y asentí repetidas veces. 

—Vamos a comer algo, para celebrar —sonreí al ver la felicidad de mi amigo al escuchar esas simples palabras. 

—¡Sí! —empezó a repartir besos por todo mi rostro— Eres el mejor. 

—Jimin —escuché esa grave e irristible voz, de la cual había estado huyendo.

—¿Qué haces aquí? —rodé los ojos y Taehyung se separó inmediatamente de mí.

—Te recuerdo soy accionista, puedo venir de vez en cuando —dijo mientras fulminaba con la mirada al peli rojo— Además, merezco saber lo que pasa con la empresa también. 

—Pues, acabamos de cerrar un buen trato —sonreí sin ganas— ¿Contento? 

—Sí... —antes de que pudiera decir algo más, lo interrumpí. 

—Bueno, sí eso era todo —agarré el brazo de mi mejor amigo dispuesto a salir de ahí— Nos vemos luego, Jeon. 

Era muy irónico llamarlo de esa forma, también era mi apellido. 

Sin darle mucha importancia empecé a caminar, pero un agarre en mi brazo derecho hizo que detuviera mi paso. 

—No vine solo a eso—me miró directamente a los ojos y sonrió. Él sabía bien que si hacía eso, me tenía a sus pies y se aprovechaba de mi debilidad— ¿Podemos hablar? En un lugar más privado...

—¿Intentas decir que sobró? —se quejó Taehyung— Lo que tengas que decir lo puedes hacer frente a mí, porque... 

—Tae —le interrumpí en voz bajá— Ya te alcanzó ¿Sí? 

—Pero, Minnie —hizo una mueca y nego repetidas veces con la cabeza.

—Ve pidiendo nuestra comida —acaricié su hombro con delicadeza y pude escuchar un gruñido de mi aún esposo, el cual obviamente ignoré— Sabes que nuestro platillo favorito se demora en estar. 

—Bien —rodó los ojos— Pero si no llegas en media hora, vendré por tí. 

Asentí y este dejó un beso en mi mejilla. Antes de irse obviamente chocó contra el hombro del peli morado y lo fulminó con la mirada, cosa que también hizo el contrario. 

-—Vamos a mi oficina —solté sin más y me dirigí al lugar, escuchando sus pasos tras de mí. 

Al llegar, me senté en mi cómoda silla de cuero marrón. Él se sentó frente a mí, agradecía que el escritorio nos mantuviese a una distancia prudente. 

—Y bien —alce una ceja y lo mire de mala gana, este solo se dedicaba a observarme detenidamente. 

—J-Jimin yo… —dio una pausa y jugueteo con sus dedos— Mmm ¿sabes qué día es hoy? 

Fruncí el ceño y miré la fecha en mi computadora: 08 de noviembre. Abrí mis ojos y sentí una leve presión en el pecho. Hoy era nuestro aniversario número tres. 

—No me había dado cuenta —dije con un hilo de voz y bajé la mirada. Decir que no me afectaba sería la mentira más grande que habría dicho en mi vida, pero no iba a demostrarlo del todo. 

—Bebé —su voz era tan suave que me hizo estremecer— Las cosas no tienen que ser así. Por favor... 

—Basta —lo interrumpí— Sabes muy bien que ya no podemos estar juntos. 

—¿Por qué? —su voz estaba entrecortada, subí mi mirada y lágrimas silenciosas caían sin cesar por sus mejillas— Todavía no nos hemos divorciado, tenemos la oportunidad de resolverlo y seguir con nuestro matrimonio. 

—¡No hay solución! —grité dando un fuerte golpe en el escritorio— Ya está hecho... No hay vuelta atrás. 

Me puse en pie, caminé a la salida y paré frente a la puerta. 

—No compliques más las cosas y solo firma ese maldito papel —solté y salí, cerrando de un portazo. 

A pasos rápidos me dirigí al restaurante, al llegar busqué a mi mejor amigo con la mirada. Cuándo logré verlo corrí y me tiré a sus brazos. 

—Minnie —acarició mi cabello— ¿Estás bien? 

Intentó tomar mis mejillas para que subiera la mirada, pero me negué y escondí mi rostro en su cuello. 

—No —sollocé— Esto es muy difícil, Tae. Hoy es nuestro aniversario. 

—No pasa nada —bajó su mano hasta mi espalda y empezó a acariciar haciendo círculos, mi sabía que eso me relajaba— Solo suéltalo todo. 

Lloré amargamente en sus brazos, cómo siempre solía hacer. Al pasar unos cuántos minutos ya me encontraba mejor, me separé del peli rojo y me senté a su lado. Justo en ese momento llegó la mesera con nuestra comida. 

—Come —dijo al ver que aún no probaba nada de mi plato— Te subirá el ánimo, estoy seguro. 

Asentí sin ganas y probé un bocado, inconscientemente sonreí y seguí comiendo con entusiasmo. 

Escuché a Taehyung reír y luego tomó su copa de vino y la levantó. 

—Por nuevos comienzos. 

Sonreí e hice lo mismo.

—Por nuevos comienzos —chocamos las copas y luego enredamos nuestros brazos para beber el contenido al mismo tiempo. 

"Esperó que las cosas puedan mejorar en algún momento, porque definitivamente esto duele mucho"

Hola, mis corazones de melones. Esperó estén muy bien. :3

Aquí les traigo este nuevo minific, creo que ya tengo una pequeña obsesión con hacerlos. En fin, espero les guste. xD

Sin más que agregar, nos leemos luego. 💜