haruchiyo sanzu 1

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¡No contiene spoilers!
¡Historia independiente a la trama!

Bonten! Sanzu x fem!! reader

Warnings: mención de drogas y delincuencia.

Editado.

Sanzu se acercó al sofá de la sala donde estaba su novia

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Sanzu se acercó al sofá de la sala donde estaba su novia. Caminaba arrastrando los pies, con aspecto cansado, mientras ella esperaba.

No lo había visto hace días.
Él no había respondido sus mensajes ni llamadas.

En cuanto entró por la puerta se levantó sobresaltada.

— ¿Dónde estabas? ¿Has estado bien?

— Mikey.– Dijo sin más.– Negocios, solo déjalo.– Suspiró evitándola.

— Ya lo sé. No puedes dar información de tus negocios y eso pero ¿no puedes ni decirme que estás bien?

— ¡Te dije que no puedo!– Había comenzado a gritar, lo solía hacer  después de desaparecer por días.

— ¿En serio? Te vas cada semana, te veo durante una sola noche y lo único que pido es que me escribas una vez. ¿No puedes hacerlo? Llevamos meses así.

— ¡Estás loca!

— ¿Sabe ese Mikey qué tienes novia? No, no puede. ¿Puedes hablarme sobre lo que hacer fuera? Tampoco. ¿Qué significa decirme que quieres salir conmigo si no podemos estar juntos.

— No les cuento mi vida privada. Y el único momento que tenemos para estar juntos lo arruinas, ¿esto es lo que buscabas?– Resopló mientras sacaba un cigarro.

— Y ahora te pones a fumar. ¿Es una broma? ¿Crees que soy una admiradora tuya para andar siempre buscándote?

— ¡Me estás volviendo loco! ¡Cállate!

— Todos los putos días es lo mismo. Si me quedo aquí, si sigo contigo, ¿algo va  a cambiar?

— No pero tu aceptaste al estar conmigo, ¿no? ¡Vete si quieres! No voy a notar la diferencia.

— Lo sabía, claro que lo sabía. Tu solo buscas seguir a esos estúpidos delincuentes y tener a una puta en casa para descargarte en alguien.– Se lo dijo en la cara, sin gritar pero aguantando las lágrimas.

— Da igual lo mucho que te quejes de mi, siempre vuelves. Dices que me odias, que ya vendrás a por tus cosas, y cuando vuelves a casa ya no sales de aquí.

— ¡Porque yo si te quiero! ¡A mí si que me importas! Por muchas veces que desaparezcas yo espero a que llegues.

Ninguno de los dos habló durante lo que parecía una eternidad.

Ella sollozaba sentada en el sofá y él se quedó quieto, de pie, mirándola.

— Me voy. Y de verdad volveré a por  mis cosas. Ten buena suerte en lo que sea que hagas. – Se levantó de su lugar y se acercó a la puerta tomando una chaqueta en el camino.

 – Se levantó de su lugar y se acercó a la puerta tomando una chaqueta en el camino

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- one shots | hc. tokyorev.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora