Temo confesarte que, me enamoré de ti.
Me enamoré de la forma en la que me tratabas,
De tus caricias,
De los momentos en que nos quedabamos en silencio porque no había nada por decir.
Me enamoré de lo que eras en el fondo,
De cómo me hablabas,
De como pronunciabas mi nombre,
De tu tono de voz,
De tus imperfecciones,
De tus mañas,
Del aroma que siempre llevabas consigo,
De tus ronquidos en aquellas noches largas...Me enamoré de todo aquello que ni te imaginas, me pinté un mundo en el que solo vivíamos tú y yo, y nadie más...
Ese mundo que desdibujaste sin pudor, sin importarte absolutamente nada de lo que vivimos.
Me hiciste creer que eras esa persona por la que tenía que jugármela siempre. Me engañaste haciéndome creer que sí querías estar conmigo, endulzándome el oído con falsas promesas.
Yo solo era un juego de un mes, en el que una vez te cansaste de mí, entonces, rápidamente me echaste como basura.
Dijiste que, moverías cielo y tierra para tenerme contigo siempre, ¡y qué gran mentira armaste!, porque me la creí a la perfección.
Así que me imaginé una vida contigo...
Y eso solo causó que me destruyera a mí misma, porque cuando te fuiste sin previo aviso, sin excusas válidas, sin razones lógicas, entonces sentí que mi vida sin ti: estaba totalmente incompleta.
ESTÁS LEYENDO
Lo que nunca me atreví a decir ©
PoesíaLlega un momento en el que ya no puedes soportar más lo que gritan tus silencios, no puedes soportar todo aquello que te escuece, que te desbarajusta, y decides desahogarte, pero no hay con quién. No hay nadie digno de ello. Así que escribes todo, t...