Llega un momento en el que ya no puedes soportar más lo que gritan tus silencios, no puedes soportar todo aquello que te escuece, que te desbarajusta, y decides desahogarte, pero no hay con quién. No hay nadie digno de ello. Así que escribes todo, t...
Perdono tus infidelidades, tus engaños, tus rechazos y todo lo que detonó que este amor se fuera por la borda. Yo era mucho para ti, no supiste qué hacer con todo lo que te ofrecí y te creíste grande, y ese fue tu error. Y ¿sabes que? Hoy te digo que lo entiendo perfectamente, las personas como tú, solo merecen eso mismo que tu sabes ofrecer.
Y te perdono porque con anticipación, lo hice conmigo, y aunque tarde lo aprendí, aprendí que solo eres un cobarde más en el mundo, que se atreve a soltar aquella mujer que podía amarte si quiera veinte mil vidas más, aunque nunca lo merecieras...
Te perdono, cariño, pero ni te creas que volvería al lugar de los hechos...
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