UN AMOR EN PEDAZOS. [COMPLETA]

CAPÍTULO 30.

Domingo 2 de Agosto del 2015.

Me remuevo al sentir demasiado calor, volteo mi rostro aun con los ojos cerrados y algo suave me produce cosquillas en el mentón.

¿Por que mi cama se siente diferente?

Abro los ojos esperando encontrarme con el color blanco de mis paredes pero lo que veo es un lindo estante lleno de CDS de películas, alcanzo a ver tres libros que devolví hace unos días y los cuales alguien tiro a la basura.

Esta no es mi habitación.

Mira, el amargadito no se deshizo de los libros después de todo.

- Mierda - maldigo bajando la mirada hasta la causa de mi calor.

Jack tiene la mitad de su cara contra mis pechos descubiertos, su brazo esta alrededor de mi cintura y yo tengo mis manos en su cabello que apunta hacia todas las direcciones.

M.I.E.R.D.A

- ¿Que hice? - susurro quitándome su brazo con cuidado de no despertarlo.

Me siento al filo de la cama tratando de localizar mi ropa mientras me ordeno calmarme, respiro hondo llevando ambas manos a mi cabeza.

- Soy una tonta que lo disfrutó - digo para mi misma mientras me pongo de pie para recoger mis bragas y sujetador.

Me visto en tiempo récord y luego paso a observar al chico dormido con expresión tranquila, sus labios están entreabiertos mientras respira pausadamente.

¿Por que se ve bien hasta durmiendo?

Sacudo mi cabeza enfocandome en lo importante, busco mi celular y lo encuentro debajo de la cama. No lo cuide muy bien que digamos, tengo suerte de que siga intacto.

Lo enciendo y la pantalla se llena de cientos de notificaciones que no pude oír llegar porque estaba en silencio. No soy una persona activa en las redes sociales, por eso me sorprendo al ver la enorme cantidad de menciones que tengo desde Instagram.

Entro en una de las menciones y la sangre abandona mi cuerpo cuando veo de que se trata todo este alboroto en mi celular, primero miro la foto antes de pasar a leer el enunciado de la publicación.

Esta es Isabella Madisson, una chica que tiene cara de inocente pero que puede bajarte el novio. Después de todo es una ofrecida y por eso abusaron de ella.

Trago grueso y vuelvo a observar la fotografía de mi rostro donde si tocas te manda directo a mi perfil que aunque no este lleno de fotografías mías se alcanza a ver que soy esa misma persona.

Lágrimas inundan mis ojos y sabiendo que esta mal hacerlo entro a los comentarios, deslizo mis dedos temblorosos por la pantalla y no puedo evitar comenzar a sollozar.

Es un horror lo que escriben de mi personas desconocidas.

- ¿Isabella? - murmura el chico frente a mi, levanto mi vista borrosa y suspiro aliviada cuando noto que sigue dormido.

Me limpio las lágrimas y camino apresurada hasta la puerta, la abro y esto no puede ser peor cuando tropiezo con el cuerpo del papá de Jack.