Capítulo 2.

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-¡Con en el nombre del Padre empiezan sus reuniones! Eso a lo que llaman misas… ¡Si supieran de verdad lo que es un padre, no empezarían con su nombre! Hoy en día un padre es un hombre duro, fuerte, que mata por su familia y la protege; no un ente imaginario a lo que llaman Dios, que está en cielo y que se supone que quiere el bien para nosotros… ¡Ja! Eso es lo que digo yo ante tanta palabrería barata. ¿Qué quiere el bien para nosotros? Claro, por eso nos deja en este mundo de mierda, lleno de enfermedades, radiación por todos lados y deja que sus “grandes creaciones” como lo son la raza humana y la raza animal se pudran y muten en horribles monstruos. Pues eso amigos y amigas es lo que no saben nuestros “compañeros” de ahí dentro, ellos viven sometidos bajo el poder de Urbano. - siguió con una gran carcajada- Ese necio malnacido nos hace trabajar día y noche para proteger su “bonita” y “perfecta” ciudad. ¿Pues sabéis lo que os digo? Que este viejo hombre que se está dirigiendo hacia vosotros, ¡se rinde! Yo ya no puedo más. Me retiro del cargo y dejó ante el Consejo la elección del nuevo líder.

A continuación todo el mundo empezó a murmurar entre sí, se oían perfectamente frases como “¿Pero cómo va a dejar el cargo? Es la única persona sensata y fuerte capaz de dirigirnos.” “Pues mejor, es un viejo despechado que quiere acabar con la Santa Sede, y yo me quiero seguir ganando el pan, aunque sea trabajando para esos necios”.

-¡Orden!-gritó el rector del Consejo golpeando la mesa con un martillo.

-Pero Maclencio, ¿cómo va a dejar usted el cargo? Encima en estos momentos, donde el hambre y las “fieras” cada día que pasa, nos superan. –preguntó el vicerrector.

En eso coincidía con el Consejo, aunque  no suelo estar de acuerdo, porque al fin y al cabo son todos unos lameculos de la Santa Sede que intentan convencernos de que proteger Sant Andyety es la única opción que tenemos si queremos sobrevivir. Por lo menos Maclencio siempre ha mostrado que está totalmente en contra de limpiar los alrededores de su “preciosa” muralla de “fieras” y merodeadores, ya que piensa que deberíamos darles su merecido y que afronten la realidad. Pero el poder de la Santa Sede es mucho más que todo eso, tienen minas de recursos y contactos fuera de la muralla, a parte de nosotros los Furtivos y el Consejo, negocian con mercenarios y mafias que son los que manejan el “cotarro” ahí fuera. Vivimos sometidos y controlados a partida doble, por parte de la Santa Sede y por parte de las mafias que controlan lo que queda de este horrible mundo. Si Maclencio deja el cargo, supongo que el Consejo pondría a Cyrano como nuevo líder y eso sería lo peor que podemos hacer. Un falso no creyente, que siempre ha demostrado ser igual que su padre aunque le haya querido matar. Cyrano es uno de los cinco hijos de Urbano, sí, en cuanto eligieron a Urbano como Papa, lo primero que hizo fue permitir que todos los cargos eclesiásticos pudieran tener descendencia, eso sí lo ha cambiado el muy… pero él es el hijo desterrado, intentó matarle, de noche, con una espada. Qué anticuados son estos creyentes… ¿no? Yo le habría metido un buen tiro en la cabeza y hubiera acabado antes, pero se despertó antes de que le clavara la espada y aquí está, condenado a vivir como un Furtivo para siempre, para Urbano es el peor castigo que se puede tener…

-No se habla más, si Maclencio ha querido dejar el cargo no vamos a discutir. Cyrano, por decisión de la Santa Sede será nuestro nuevo líder. No hay discusión posible. Se cierra la sesión- y así acabo el juicio de hoy, golpeando tres veces en la mesa del rector.

Nos levantamos todos de nuestros asientos y nos dirigimos hacia la salida. La sala de Juicio la verdad es que es bastante grande, es un antiguo teatro, en los palcos  y el patio de butacas nos sentamos los Furtivos y en el escenario hay una gran mesa en la que se sientan los miembros del Consejo y un atril donde la persona que tiene que comunicar algo o ser sometida a juicio se sitúa.

Ya por fin vi la poca luz del día, el otoño aquí es horrible, nieblas, lluvias y muchas nubes y nuestra ciudad, que es una antigua ciudad en ruinas, hemos ido reconstruyendo lo que hemos podido, aunque el estado de la mayoría de cosas sea pésimo, al final te acostumbras. Me siento afortunada de por lo menos, no vivir dentro de ese lugar de mentira y gente horrible.

-¡María!, espérame.- no había visto a Nyx desde ayer. Nyx es mi mejor amigo, es grande y fuerte, todos nos sometemos a un duro entrenamiento durante nuestra infancia y parte de nuestra adolescencia, con diecisiete años ya podemos asistir a los Juicios y tener un oficio dentro de la comunidad Furtiva. Hasta entonces, estamos preparándonos, tiene el pelo muy corto y uno de sus musculosos brazos está repleto de tatuajes.

-La verdad, no me esperaba para nada que Maclencio fuera a tomar esta decisión, bajo el liderazgo de Cyrano estamos perdidos y no estoy dispuesta a tolerarlo.

-No sabía que te había sentado tan mal –se rio-, los asuntos políticos nunca han sido lo tuyo. Y de todas formas, vamos a seguir haciendo lo mismo, salir ahí afuera a matar “fieras” para salvarles el “culo” a los religiosos estos que se creen por encima de nosotros. Eso nadie lo va a cambiar.

-Y por eso cada día me intereso más por “la política” como tú dices, porque no quiero pasarme el resto de mi vida pegando tiros a lobos con deformaciones que tienen la rabia o serpientes de diez metros de largo capaces de tragarte entero de un solo bocado. No quiero que mi vida sea esa.

-¿Y cuál quieres que sea tu vida? –se volvió a reír.

-Una vida sin injusticias, en la que luchemos por salvar lo que queda de este apestoso mundo. Y no que cada día la radiación aumente y el grado de especies mutadas siga en aumento. Una vida en la que pueda ser normal, tener mi familia, mi casa y mis hijos sin necesidad de preocuparme si un buitre se los va a comer o les va a  contagiar la peste. Aunque bueno, eso es imposible. Me conformaré con seguir pegando tiros a todo lo que me encuentre por delante, ir a la Cantina por la noche, beber, tatuarme y hacerlo con algún que otro pringado como yo, que lo único que aspira en esta vida es a salvar el “culo” a una sociedad de tontos que se creen que fuera no hay nada y que “Dios –ahora me rio para que Nyx note lo ridículo que me parece-, les ha creado una muralla y una ciudad de hace treinta siglos para salvarles de los peligros que hay “afuera”. El verdadero  peligro de la humanidad siempre ha sido ese tipo de pensamiento, creer que todo va ir mejor porque algo o alguien nos lo va a dar milagrosamente…

-Veo que tienes las cosas claras Mari –odio profundamente que me llame así, por eso lo hace.

-No me llames así Nyx, sabes que lo odio.

-Perdóname Mari, ¡ups lo he vuelto a hacer!

Entre risas y tonterías seguimos caminando hacia la Cantina… Aunque no estaba el día para risas.

 

Dios te salve, María.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora