Do KyungSoo es un omega normal con un trabajo normal. Pero él no es cómo todos creen. Detrás de su buena apariencia y fachada de empleado ejemplar, KyungSoo esconde muchas mentiras. Entre ellas, el motivo por el que cada mes tiene días libres durant...
Recibí una de las cajas, la dejé en el suelo y le sonreí al trabajador. ChanYeol también estaba recibiendo cajas. Mis cajas. Cajas con mis cosas.
Ante su insistencia, no tuve más opción que ceder a su capricho de mudarme con él. Me demoré una semana en aceptar. Ahora lo pienso y me encuentro fácil. Pero ChanYeol realmente es insistente y bueno, es difícil negarse cuando me hace ojitos de cachorro. Además, y aún más importante, tengo que mantener mi farsa hasta que se me ocurra como salir de esto.
La mudanza duró un día. Mi antiguo departamento era pequeño después de todo y no tenía muchas cosas. Los empleados dejaron la alfombra que me regaló JongDae sobre el piso y se despidieron. Yo les agradecí por su arduo trabajo.
ChanYeol lleva un pantalón deportivo y una sudadera. Nada que ver a sus trajes lujosos. Creo que este estilo casual y domestico le queda bastante bien. Su cabello rubio le da un toque atractivo. Podría perfectamente ser un modelo famoso. Se está esforzando por esta vida juntos. Lo observo con algo de tristeza y culpa. No quiero mentirle.
—Arreglemos el cuarto, KyungSoo—. Me dice mientras abre una de las cajas y se limpia el sudor.
Yo le obedezco sin responder y me arrodillo a tomar una de las cajas que sé que tiene parte de mi ropa. Me siento deprimido. Adiós a mi vida solitaria...
—Oh, por cierto—. Él vuelve a romper el silencio. —KyungSoo, ¿tienes planes para el domingo de la siguiente semana? —. Me pregunta casual.
—No—. Le respondo pensando en que de seguro quiere invitarme a una cita. —¿Por qué?
—Por favor, deja ese día libre—. Me pide nervioso. —Quiero presentarte a mis padres.
—No, espera...—. Al escucharlo, no puedo evitar sentirme nervioso y entrar en pánico. —Creo que tenía algo importante que hacer... —. Intento excusarme.
—¿No acabas de decir que no tenías planes para ese día? —. Me acusa irritado.
—¡Los tengo! ¡De verdad creo que si tenía algo que hacer! —. Le grito desesperado. —A... además ¿No crees que es un poco precipitado ir a saludar a tus padres? —. Intento entrar en papel de omega tierno, haciendo mi mejor intento de aegyo. —Acabamos de emparejarnos—. «Provisoriamente». —Se sorprenderán, ¿no lo crees?
—Está bien—. Suspira y me da la espalda. —De cualquier forma estaba pensando que tengo que ir a visitarlos tarde o temprano.
ChanYeol siguió ordenando las cosas y desempacando por mí. Sin hacerme caso todas las veces que le dije que no estaba listo para ver a sus padres tan pronto. Esto no está ni un poco bien, idiota.
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El ambiente está tenso. Demasiado tenso para mis nervios. Estamos en un restaurante tan lujoso, que creo que solo un refresco vale la mitad de mi sueldo.
