¡Shinsou, los gatos y yo! (Shinkami Omegaverse)

Reencuentro

Capítulo XXXIII.
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Día tras día después de que finalizara el gran drama de su vida, había empezado una rutina inalcanzable de cuidados y limitaciones; cada mañana tomaba sus medicamentos, vitaminas y suplementos correspondientes para después empezar a trabajar con ánimo, pero sintiéndose algo sedado, a veces escuchaba a Shinsou tras suyo asegurándose de que estuviera bien, a veces solo se rendía en trabajar y mejor se relajaba en la cama con sus gatos para mantener activa su mente.

Sho como el gato mayor de la casa se la pasaba cuidándolo y al pendiente suyo aun cuando Izu trataba de llamar su atención, era algo reconfortante, ver a su mascota tan devota a él y su recuperación.

Fue temprano por la mañana, mientras Shinsou cepillaba su cabello, recostados en la cama que el mensaje más esperado por todos llegó.

Mineta había mandado emocionado muchas fotos de la invitación que había recibido para la boda de Kirishima y Bakugo, una boda que parecía sería un evento a lo grande. Inmediatamente, se levantó de la cama sin importarle el frío chocando contra su piel desnuda.

Estaba feliz, muy feliz por la noticia aunque un poco envidioso de aún no haber recibido una invitación, le emocionaba la idea de asistir a la boda de sus amigos quienes habían luchado incansablemente contra todo para llegar a ese punto.

— ¿Vamos a conseguir trajes nuevos? — Shinsou se acercó por detrás hasta abrazarle y besarle los hombros sonriendo ante la euforia de su chico, Denki asintió efusivamente porque no planeaba usar los mismos que usaron en la boda de Mineta.

— Oh... Hay mucho que comprar, incluso un regalo, debemos tener todo lo más pronto posible — 

— ¿Vamos de una vez? Seguro que estarás ansioso si lo dejamos para después y no es bueno para ti ahora — Shinsou beso dulcemente su cabello abrazándolo con fuerza al decir aquello, los medicamentos me tenían preocupado y trataba de apoyarlo al máximo, lo cual era reconfortante.

— Efectivamente, si no salimos ahora mismo por eso me pondré muy mal — Aunque aparte de estar cansado y algo sedado no se sentía realmente mal por los medicamentos, había momentos en los que se aprovechaba de la preocupación ajena para salirse con la suya.

Tardaron como una hora en alistarse para salir, bien abrigados y con Shinsou firme en su resolución de cuidar a su Omega los únicos que se quedarían en casa eran los gatos, a los cuales después de darle un beso a cada uno dejaron encerrados en el departamento.

***

Aunque ya no era muy temprano, el aire congelaba horrores y Kirishima solo quería llegar rápido a calentarse las manos antes de perder algún dedo por congelamiento.

— Gran idea de venir en bus Katsuki —

Bakugo ni siquiera estaba a su lado, se había quedado unas paradas atrás interesado por una exposición de cuchillos, cuando su misión real en medio de ese ambiente era llegar al departamento de su amigo y entregar personalmente la invitación a su boda para los chicos.

Cuando entro al viejo edificio y escucho los rechinidos del piso contra sus pasos realmente se estaba arrepintiendo de llegar sin aviso, un par de vecinos que iban bajando las escaleras le miraron de arriba a abajo y siguieron su camino.