❝OO1┊el inicio de la travesía❠

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ANTES DE EMPEZAR

Quiero aclarar que los HALATEEZ harán aparición en esta historia (obviamente), pero quizás la mayoría sabemos que ellos son buenos en el universo de ATEEZ realmente así que tuve que volverlos malvados aquí para que la historia pudiese tener congruencia.

Disfruten su lectura^^

Los detalles de las suelas se marcaban en la arena, tres lámparas de gas iluminaban su camino y la luna era testigo de lo que aquellos ocho piratas estaban tratando de buscar en su travesía hacía algo desconocido; hacía un lugar donde nadie nunca ...

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Los detalles de las suelas se marcaban en la arena, tres lámparas de gas iluminaban su camino y la luna era testigo de lo que aquellos ocho piratas estaban tratando de buscar en su travesía hacía algo desconocido; hacía un lugar donde nadie nunca se ha atrevido a llegar, donde ni un solo pie ha sido puesto en aquellas tierras o manos capaces para enfrentarse a lo abrumadoramente desconocido que aquel lugar escondía.

¿Existía alguien capaz de atreverse a navegar en mar hacia rumbos desconocidos? ¿Sin mapa? ¿Sin coordenadas? Ellos eran capaces de enfrentarse a ello, tenían la fuerza de voluntad y la inteligencia que era requerida para cada una de sus misiones, siendo ésta, la más difícil de todas puesto que no es igual a las demás aventuras que han atravesado a lo largo de sus vidas.

Eran ocho almas unidas por un objetivo en común: desprenderse de la oscuridad que les acechaba.

En una noche cualquiera, cada uno recibió una visita inusual que los dejaría totalmente confundidos y a la espera de ayuda ante las palabras que sus álter egos les habían dado antes de desaparecer frente a sus ojos: «Nunca sabrás como desprenderte de mí». Justamente eso querían encontrar, pero ¿cómo hacían para lograrlo? ¿qué método existía? o ¿de verdad existe un método, una forma para que dejaran de perseguirlos a donde quiera que fueran?

Sus velas apuntaban a una dirección y ellos se dirigían consigo. Nunca les dejaban en paz, parecían querer atormentarles sin cansancio, queriéndoles recordar sus errores que ahora miran como pecados ante la insistencia de torturar sus recuerdos para activarlos y mantenerlos presente en ellos como si fuera un bucle sin salida.

Tenían tantas preguntas, tantos tormentos, solo querían deshacerse de ellos, querían estar en paz y su lucha no era la única que se ceñía sobre la tierra. Ninguno de ellos pensó que, detrás de aquellas puertas, habría otras almas iguales que también, desesperadas por encontrar una respuesta, se embarcaban a misteriosas y extravagantes travesías que, al final, no quedaba nada más que en una pura ilusión inalcanzable.

No esperaban que fuera su turno. Realmente, esperaban que jamás la oscuridad les acechara, pero a veces los designios del ser humano no son iguales a los designios que la vida ya tiene preparados para ti y solo espera el momento preciso para aparecerlos frente a ti.

Movidos por el mismo objetivo es que lograron reunirse; el viento le guio a cada uno a los remotos lugares de aquel cañón permitiéndoles lograr el encuentro de sus vidas, las siguientes siete razones por las cuales decidirían unirse y navegar a lo desconocido mientras las pistas y acertijos se hacían más duras de resolver.

―Estamos aquí reunidos, los ocho, sin saber a dónde iremos, sin saber nada del otro, pero estamos unidos por el mismo objetivo: deshacernos de la oscuridad, romperla, desaparecer a nuestros álter egos que están unidos a nosotros hasta que no tengamos el ímpetu de enfrentarlos hasta que podamos clamar el cántico de victoria. ―pronuncio un joven de estatura baja y de cabellos avellana claro, mirando con esperanza a sus siete colegas para transmitirles la confianza en sí mismos y en esta travesía que están superando juntos.

Un joven de cabellos verdosos hablo después de que su mayor les emitió el mensaje de esperanza que quería plantar en ellos.

―Nosotros hemos hablado mientras tu permanecías atento al cielo y llegamos a la decisión unánime de elegirte como aquel que nos guiará en nuestro camino; te elegimos como nuestro capitán.

Los ojos oscuros de Kim se abrieron poco a poco mientras su cabeza iba procesando la información dicha por parte de San.

¿Ser su capitán? No estaba seguro, implicaba muchas responsabilidades y un fuerte liderazgo que aun dudaba mucho tener. ¿Estaba realmente preparado para comandar un barco y a siete jóvenes que han puesto todas sus esperanzas, así como también él lo hizo?

Por un momento dudo, pero las palabras de su madre dichas a él cuando tenía siete años le hicieron detener su lado negativo al recordar: «Esfuérzate, se humilde y de corazón bondadoso, impide que la maldad del mundo invada tu corazón y cubra tu visión. Hay un líder dentro de ti y cuando llegue la hora saldrá, pero, por ahora, tu reloj seguirá corriendo»

Jamás entendió, hasta el día de hoy, la última frase dicha por su madre antes de que muriera cuando recién cumplía los doce. ¿A qué exactamente se refería con "el reloj"? Como deseaba tener a su madre a un lado suyo preguntándole sobre el mundo y ella alegremente se las respondía mientras acariciaba sus cabellos.

Como extrañaba aquellos momentos donde no tenía que preocuparse por su futuro.

―Lo haré. ―les miro nuevamente―. Asumiré el mando y seré el líder que esperan que sea, superare sus expectativas, tengan confianza en mí. Ganaremos esta pelea.

Bajo de la roca donde estaba montado, camino con confianza al frente con los demás siguiéndole confundidos sin saber a dónde se dirigían ya que no conocían aquel cañón al que, extrañamente, una fuerza sobrenatural los había guiado a través del viento para reunirlos, pero parecía que su capitán conocía bien aquel lugar.

― ¡Por la luna, es impresionante! ―exclamo otro chico de cabellera azulada, se llevó ambas manos a su boca para cubrirla y sus ojos se abrieron como círculos al igual que el resto.

―Es realmente hermoso, majestuoso. ―comento uno de cabellera pelinegra, el menor de todo el octeto.

―Destiny es su nombre, era de mi padre. ―explico Hongjoong mientras subía por la tarima inclinada que estaba bien sujeta en la arena―. Será nuestro medio y nuestra compañera hasta el final del viaje. ―continúo hablando cuando tuvo a los demás arriba del barco―. Solo tenemos una oportunidad y no la vamos a desperdiciar.

Sonrió mirando hacia el horizonte profundo y después, fijo su mirada hacia el ocaso que el cielo dibujaba en forma de despedida.

Minutos después, con mucho trabajo, con Hongjoong detrás del timón, el barco zarpó; zarpó el barco llevando consigo ocho esperanzas, ocho almas y ocho corazones que estaban dispuestos a entregar todo en aquella lucha entre el bien y el mal.

ᴀɴꜱᴡᴇʀ | ᴀᴛᴇᴇᴢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora