Fragmentos

🌿Odisea - 8

–¡NO NO NO, ME REHÚSO A QUEDARME QUIETO!

La nación soviética repartía gritos a cada persona que intentaba detener su paso hasta aquel edificio derrumbado.

Al final los countrys que miraban con lastima al ruso optaron por ayudarlo. Mientras recorrían el edificio terminaron encontrando una fisura lo suficientemente grande para que una persona delgada entrara.

Ni Alemania o Rusia tenían esas características, así que Japón sería la encargada de recuperar los restos de su querido amigo.

El eslavo detuvo la misión segundos antes de que la mujer se aventurara en el derrumbe que podía cobrar su vida. Él era el responsable de que México no hubiese salido... Él debía estar con Bielorrusia y la dejó sola.

Firmaron un trozo de servilleta simulando el tratado para el cambio de género. Unos minutos después contábamos con un Japón llevando ropa ajustada y con una rusa igual de alta, pero con menos musculatura.

Ya adentro del recinto su amigo alemán comenzó a darle indicaciones de los lugares que debía seguir para llegar a donde debió haber caído Ana. Varios sitios estaban bloqueados, inestables o llenos de objetos afilados.

Había llegado a un punto muerto, y era imposible que el comunicador funcionara gracias a la falta de señal.

Justo cuando estaba a punto de romper un pilar que mantenía lo poco estable en pie la mujer pudo ver qué debajo de algunos escombros irradiaba una tenue luz.

Se acercó con seguridad e intentó ver al otro lado por un pequeño agujero. Lágrimas de felicidad comenzaron a rodar hasta sus mejillas, ahí estaba México, inconsciente y herido, pero vivo.

Si no ponía manos a la obra la suerte de Ana desaparecería, había encontrado un hueco más grande y pudo detectar que el pulso del country era débil.

–Ana, escúchame -silencio- por favor, no quiero verte morir otra vez

La mejor forma de sacarlo era empujando las piedras  más grandes, aunque eso provocaría vibraciones y terminarían aplastados. Se pasó un buen rato pensando hasta que mandó a la chingada todo, si el edificio se venía abajo al menos morirían juntos.

Gracias a su formidable esfuerzo logró bajar la pesada roca que bloqueaba esa cueva. Inmediatamente intentó jalar a México hacia ella, cosa que fue imposible, pues el ala que no había sido mutilada tenía encima una roca, y si intentaba moverla todos los escombros cercanos al mexicano le darían el golpe de gracia.

Desesperada porque su única opción era la más lógica y atroz se sentó para poder tomar de la mano a Ana. Su intención era compartirle algo de su vitalidad y tener más tiempo para pensar en otra cosa.

–Estaré contigo en las buenas y en las malas -deja salir una débil risa- te aseguro que no estoy loca, oh Ana... Si supieras cuánto te extrañé

La presión de Canadá hizo que los equipos de rescate arribarán rápido al lugar, su hermano estaba demasiado ocupado peleando con Kazajistán por haber permitido que el número de personas en peligro aumentase.

Mientras ellos peleaban los expertos ya se encontraban evaluando la zona y determinaron que debían evitar más vibraciones cerca de las tres áreas más sensibles.
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Correr, es lo único que puedo hacer. Desconozco este extraño lugar aunque presiento que ya he estado aquí.

Parte de las imágenes borrosas que ví mientras estaba consciente comenzaron a transformarse en dos cintas de película pegada a las paredes.

En cuanto llegué a lo que parecía ser la foto de un juicio unos extraños animales emergieron del suelo para intentar alcanzarme. No quiero averiguar que planean hacer cuando me tengan en sus manos, así que aquí estoy, corriendo por mi vida.

¿Por qué no vuelo? La respuesta es simple, mis alas... Ahora todo tiene sentido, seguramente estoy tan herido que he llegado hasta un plano espiritual.

Mis tíos se van a preocupar por mi, necesito regresar a casa. Debe haber una salida entre alguna de las imágenes.

Tal vez no es la mejor opción, pero debo hacerlo por mi familia.

Me lancé con fuerza hacía el vacío de una imagen aleatoria y avancé cautelosamente por el lugar.

Parece que mis plegarias habían sido escuchadas, poco a poco voy entendiendo el porque de las actitudes renuentes de mi familia y de Rusia.

Yo soy ese hombre vacío que escribió el diario. Aún me falta descubrir porque regresé a la vida, pero creo que será para otra ocasión,  ya que aquellos animales reanudaron su persecución.

Imaginaba que este lugar era infinito, pero luego de unos minutos corriendo me di cuenta que era un callejón sin salida. Las bestias me tenían acorralado y para colmo mis piernas ya no podían.

En cuanto mis enemigos iban a lanzar el primer ataque el piso del lugar desapareció dejándonos caer al vacío.

Todo el lugar se estaba rompiendo. Pude ver cómo los fragmentos que descendían sin destino alguno fueron obligados a brillar en cuanto tomaron un nuevo y extraño rumbo.

Ahora esos pedazos que eran reclamados por la gravedad venían con velocidad hacía mi.
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La mujer se sentía mal por haber tomado la salida fácil. Terminó cortando el ala atrapada de Ana para poder llegar con los rescatistas antes de que desistieran.

Cuando salieron del lugar fueron directamente a una ambulancia, en la que le dieron un chequeo general a ambos.

Al bajar OMS ya los esperaba con el área médica vacía para poder poner toda su atención en la nación latina.

Luego de tres espantosas horas de espera trasladaron a México a un cuarto. Rusia insistió, incluso le suplicó a la organización para que le permitiera estar ahí con él.

OMS temía que ese joven ya no fuese México. Recuerda que cuando Edo la contactó en Japón sus análisis arrojaron varios datos extraños... En especial las tomografías y aquellas muestras de sus alas.

–Por favor OMS, no me hagas esto

–Esta bien -deja salir un pesado suspiro- pero avísame si presenta cambios
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–Descuida Rusia, sé que fue una decisión difícil y no te culpo de nada -la mencionada aprieta su mano con más fuerza- ¿Cómo está tu hermana?

–Bielorrusia está bien, Ana, si puedo hacer algo para ayudarte a recu

–No me llames así, ya no sé si soy Ana José o México -silencio- puedo recordarlo todo

El tiempo se detuvo abruptamente en la sala, no hay palabras para lo que acaba de suceder. ¿Cómo te sentirías si de la noche a la mañana te das cuenta que de alguna manera tienes una doble vida? Al ver que su compañera soviética no reaccionaba el latino volvió a tomar la palabra.

–¿Qué piensas?

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Siento que está weada va a quedar más corta, ni pedo, es para que vean que si estarán juntos después de tanto drama (?) Upps, spoiler... Bueh, no hay problema, mañana o en un rato les subo el siguiente capítulo

Tareas, tareas y más tareas son las culpables de no poder escribir, nos vemos corazones