NORTH || Joshua Bassett [#4]

Capítulo 1

2021

Joshua

Las gotas de lluvia en el verano siempre me habían causado gracia. Era la época en la que más llovía y lo adoraba; siempre me consideré un fanático de la lluvia y los climas fríos en lugar de los cálidos como a muchas personas en el mundo, es por eso que tener lluvia en un caluroso día de verano no me deprimía por nada del estilo, en realidad me hacía sentir mejor conmigo mismo. 

Algo bueno en mi vida que la Tierra me estaba dando para tratar de olvidar lo ocurrido hace algunos días en casa de ____. Parece como si hubiera sido ayer que la estaba besando en medio del campo de football en su graduación, conociendo a sus padres, pasando el mejor verano que pude haber vivido. 

Sin embargo, ahora todo eso parece como si hubiera sido parte de un recuerdo enterrado en la tierra de su casa, en donde pasamos la mayor parte del verano aquella vez, y todo es guardado en una de las miles de cajas que tenía a mi alrededor, que viajaron desde la costa Oeste, hasta la costa Este. 

Toda mi vida estaba dentro de unas cajas, cajas llenas de cosas que pensaba compartir con ella, cajas que ahora contienen vida que ella le daba y cajas que me recordaban a ella. Si hubiera sabido que esto pasaría, hubiera comprado todo nuevo para este momento, hubiera sido lo correcto. 

—Es la última caja— hablaron detrás de mí —¿Quieres que te ayude a desempacar?—. 

—Estoy bien— respondí sin ánimos —, no quiero robar tu tiempo, gracias por ayudarme—. 

—No estás robando mi tiempo, Joshua— mi amiga Ciara caminó hasta a mí y me arrebató la caja que tenía en las manos —, estoy ayudándote porque eres mi amigo... y porque parece que necesitas la compañía—. 

Ciara era una amiga que hice gracias a Disney, no tengo mucho de conocerla, pero sí lo suficiente para confiar en ella. Ella conoció a ____ gracias a mí por fotos cuando estaba solo en Los Ángeles, creo que no había día en el que no la mencionara y ella me escuchó sin juzgar ni en un sólo momento. 

Una muy buena amiga que hice, que me ahora me acompañaba en la mudanza y obviamente en mi duelo. 

Reí divertido —¿Tan mal me veo?—. 

Ciara suspiró —Te ves devastado, no te voy a mentir—. 

—Me siento devastado— admití. 

—Yo sé que la querías mucho, y por eso se entiende que estés así—. 

Relamí mis labios y bajé la mirada, tratando de apaciguar el dolor que me causaba solo pensar en ella, bastaba con una simple mención o que mi cabeza no pudiera sacarla de ahí. Dolía, dolía mucho. 

Suspiré —La amo...— aclaré mi garganta al ver lo que acababa de decir —, quiero decir... sí, la amo, a quién engaño, ella es lo mejor que me había pasado en toda mi vida. Y lo arruiné—. 

—Fueron tus hormonas que quisieron entrar en descontrol, tranquilo, y parte de esa chica que quiero golpear—.

—Yo me quiero golpear a mí mismo—. 

Solté un suspiro pesado, para después llevar las manos a mi cara y frotarla lentamente tratando de quitar la ansiedad que tenía, miré a través de le ventana que tenía en mi departamento, sintiendo todas las luces de la gran ciudad iluminar mi rostro y el sonido de Nueva York que de cierta manera me tranquilizaba, combinado con el ruido de las gotas cayendo lentamente por el vidrio. 

Tragué saliva pasándome ese nudo en la garganta que me estaba matando y causando mis ganas de llorar. Sabía que todo era mi culpa, que estemos en esta situación lo era, y no podía hacer nada para remendarlo, no tenía más opción que... seguir con mi vida... aunque me partiera el alma.