─ ¿Lo amas? ─ es la pregunta que le hace un cachorro al hombre que pretende enamorar a su papi.
Beomgyu es un Omega muy bonito, delicado y un excelente padre, quien ha criado a su hijo, Jae-sang de cinco años de edad, fueron abandonados por su Alfa...
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Jaesang ya no era aquel pequeño alfa, cuerpo delgado, ahora su cuerpo estaba firmemente tonificado, con su piel pálida pintada por una amplia colección de tatuajes, desde sus manos hasta su pecho y espalda, Aquellos labios carnosos con un pircing en el labio inferior, una pequeña nariz, sus ojos azules grisáceos que hacían derretir a cualquier omega, sus cabellos eran ondulados y negros hasta la altura siempre sujetados por bandanas, con dos apreciados hoyuelos cuando sonreia.
Y Jihyun ya no era aquel pequeño bebé omega, de cabellos castaños y lacios, que siempre caían por su frente tapando sus ojos tan verdes, su piel era tan blanca, haciendo juego con su delineado cuerpo, pequeño y delgado, sus labios eran ni muy delgados y gruesos siempre pintados con brillitos, su pequeña nariz era de botón que se ponía rojita cuando sus padres y su hermanito lo mimaban.
Los dos precioso hijos de los Kang, los cuales crecieron con todo el amor del mundo, lo mejor que ambos padres pudieron darles en cada momento de sus vidas.
Desde besar la más pequeña raspadura en una rodilla, hasta las lágrimas de algunos corazones rotos.
Beomgyu aprendió a comprender a sus dos hijos, enseñándoles lo bueno y lo malo de la vida, diciendo que siempre tendrían su apoyo, pues ellos siempre serian sus bebés.
Taehyun dio todo el amor posible, enseñándoles como jamás darse por vencidos, ser siempre justos y vanidosos, demostrando valor ante cualquier situación que comprometiera la felicidad de su familia.
Porque ambos crecieron, maduraron y demostraron que el amor más puro, no se mide con el tamaño de los obsequios más caros.
Si no con los afectos, como sus almas siempre estarán destinadas amarse, a encontrarse, pues no sabían cuántas cosas pasarían, pero ellos siempre estarían juntos.
Porque su amor era eterno.
Porque la brújula siempre guiará el camino del navío.
Porque siempre serían Taehyun y Beomgyu. Siendo sus dos corazones, un solo hogar.
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