17.-Ministro, piratas y té

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Descargo de responsabilidad: Avatar: The Last Airbender, pertenece a sus respectivos dueños.

XXX

El proyecto de Zhan, el pájaro de fuego , estaba progresando bastante bien desde que regresó. Se colocaron las alas y se completó el cuerpo, lo único que se requería era el motor y otros componentes importantes, pero pequeños.

Sin embargo, a pesar de todo su trabajo, podría ser en vano. El Drill había llegado a las afueras de Ba Sing Se y se estaba acercando. A lo largo de eso, Azula había tomado como objetivo personal llevar a cabo la invasión, según su última carta enviada. Supongo que podría usarse para fines civiles después de la guerra, o tal vez podría terminarlo antes de que la guerra llegue a su fin. El Dragón del Oeste había asediado la ciudad durante casi seiscientos días y no había podido conquistarla... y dudaba que el Reino Tierra se rindiera tan fácilmente. Eran conocidos por su terquedad.

"Nono... fácil... con esa pieza..." dijo Zhan, viendo a los dos ingenieros, colocando la pieza de control. "Fácil con el cable... si esto no está conectado correctamente, entonces todo no podría funcionar.

"Sí, señor", respondieron los ingenieros, poniéndose a trabajar en el otro.

'Muy bien, rasca hacia abajo: control, marco, alas y ruedas. Todo lo que queda es el motor y el mecanismo de frenado', pensó Zhan. Si todo salió bien, deberían poder completar el proyecto en un par de semanas.

"¿Hola?" preguntó una voz, desde detrás de su puerta.

"¿Sí?" preguntó Zhan. Abriendo la puerta, a la instalación subterránea, revelando un Mensajero Real.

"Sí, bueno... ¿me habías informado antes para estar atento a situaciones e informes, con respecto al frente de batalla central o relacionado con Ba Sing Se?" preguntó.

"Sí. ¿Qué noticias traes?" preguntó Zhan, un poco ansioso.

"No es bueno... tengo miedo", respondió, un poco triste. Luego sacó un pergamino y comenzó a leerlo. "Perdimos una buena compañía de soldados, en su mayoría capturados. Sin embargo, la noticia más importante fue la destrucción de la máquina de guerra del Ministro de Guerra".

"¡¿Qué?! ¡¿Estás seguro?!" preguntó Zhan, repentinamente sorprendido.

"Sí. Afortunadamente, cualquier alto personal logró escapar ileso, antes de ser capturado. Esta noticia le había llegado al Señor del Fuego recientemente".

'Maldita sea', pensó Zhan para sí mismo. "Muchas gracias. Puedes irte".

Tan pronto como el mensajero se fue, Zhan se derrumbó contra la puerta de metal, hirviendo de rabia.

"¡Maldición!" dijo, golpeando la puerta. Dándole un dolor desagradable y una pequeña abolladura en la puerta. "¡Maldito idiota!"

"¡Inútil! ¡Idiota egoísta!" él dijo. Luego se acercó a su escritorio, buscando en los planos el requerido. Pronto encontró lo que estaba buscando, pronto comenzó a garabatear en él. "¡Espero que no arruines esto!"

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Habían pasado dos días y Zhan pronto se encontró, volviendo a Zu Dhay. Cierto hombre debía llegar allí... y tenía que darle instrucciones especiales.

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