MI PERSONA FAVORITA {Willyrex y tu}

-Capítulo diecisiete-

-_____: Hermanito, prometeme que siempre me protegerás.
-Luzu: Siempre lo haré
-_____: Aun que sabes que no debiste hacer eso
-Luzu: ¿Hacer que?
-_____: Cogiste a Vegetta del cuello de la camiseta y lo amenazaste.
-Luzu: Nadie va a jugar contigo, como se meta en tu relacion con Willy lo...
-_____: Respecto a eso... Bueno, no se si hay relación
-Luzu: ¿Cómo que no sabes si hay relación?
Lanita también se preocupó de lo que acababa de decir y se fue acercando poco a poco con los brazos cruzados sin saber muy bien a que me refería.
-_____: Bueno, ya sabes que no es fácil y que yo quiero a Willy pero no estoy segura de que el me quiera a mi
-Luzu: Si tu vieses como yo vi cuando el lloraba... Se te quitaban todas las dudas, Willy te quiere mucho. Si estás así por dudas de Vegetta no merece la pena.
-_____: Tengo que hablar con el
-Lanita: ¿Y si vienen a cenar?
-Luzu: No creo que sea buena idea. Bueno, como ______ desee...
-_____: No, yo prefiero irme a dormir ya, estoy cansada, ya saben por todo y... bueno, si, adiós.
Lanita me dio un abrazo casi eterno y Luzu simplemente besó mi frente y acarició mis mejillas con sus pulgares como hacía siempre.
Cogí a Leia y la llevé hasta mi habitación, me puse el pijama y me metí en a cama con Leia.
Mientras la acariciaba recordaba todo lo que había vivido con Willy y todo lo que viví con Vegetta. ¿Me merecía la pena olvidarme del todo de Vegetta?
Sin pensarlo volví a llorar, noté unos pasos tras la puerta asi que decidí secarme las lágrimas y hacerme la dormida.
La puerta se abrió.
-Luzu: ______, te conozco como no te conoce nadie, no te hagas la dormida
Me volví a levantar y llorando salí de la cama para abrazarle de nuevo.
-Luzu: Creo que ya se lo que quieres... -Dedujo-
-_____: Por favor... -Le supliqué-
-Luzu: Está bien...
Mi hermano salió de la habitación y yo ya estaba un poco más feliz de que aceptase. Se le oía hablar con Lanita y de pronto apareció con su pijama.
-Luzu: Anda, vamos a mi habitación que hoy Lanita duerme aquí.
Acompañe a mi hermano hasta su habitación y por el pasillo aproveché para agradecerle a Lanita que me dejase dormir hoy en su cama.
Me metí bajo las sábanas con mi hermano y nos abrazamos más fuerte que nunca, como si no quisiesemos separarnos en la vida. Como si quisiesemos estar juntos para siempre. ¿No es así como se abraza a las personas que quieres de verdad?