STARCHILD | KTH&JJK

18

-Estuve con otra persona.- dijo de repente.

-¿Con la misma que has estado mencionando?

-Sí.

Jiwoo asintió, y como siempre anotó cosas en su libreta que utilizaría para corregir su informe y sacar nuevas conclusiones.

-¿Me podrías decir como te sentiste? Me refiero a tus emociones.

-Él no estuvo allí.

-¿A qué te refieres con que "él" no estuvo allí? ¿Hablas de la persona con la cual estuviste?

-No.- se relamio los labios con nerviosismo. No sabía cómo decir aquello. Pero quería hacerlo, las palabras de Jimin se le habían quedado clavadas en la mente-. Yo...yo me refiero a Seokjin.

-Jungkook-ssi, necesito que seas más específico para poder entenderte ¿de acuerdo? Puedes tomarte todo el tiempo que quieras para poder explicarme.

Jungkook se pasó las manos sudadas por el pantalón. Sentía el pecho oprimirsele y su corazón latía cada vez más rápido. ¿Cómo lo decía sin sentirse inseguro? ¿Cómo lo decía sin que le afectara demasiado? Quería irse y correr sin rumbo, perderse hasta que sus problemas y preocupaciones también lo hicieran.

-Tómalo con calma.

-Seokjin y yo no éramos solo amigos.- soltó sin más-. M-mantuvimos una relación por bastante tiempo, mi madre no sabe.- bajó la cabeza no queriendo mirarla a los ojos-. Por favor, no le diga nada.

Jiwoo sonrió amable.

-Tranquilo, no lo haré. Y no solo porque no me lo es permitido, sino porque no tengo derecho de decirle algo que solo tú puedes hacer.

-G-gracias.

-¿Quieres continuar? Podemos parar cuando quieras.

-Está bien.- asintió varias veces-. C-cuando estuve con Taehyung, Seokjin no estuvo aquí.- se señaló la cabeza-. Él no estuvo, solo podía pensar en Taehyung.

Seo Jiwoo supo que el sujeto "Kim" que Jungkook había mencionado antes se llamaba Taehyung. Y si no fuera porque ella es una amante de la lectura, y gran fan de las obras de Kim Taehyung, no sabría que se trataba del mismo que estaba casado. Porque vamos ¿Cuántos Kim Taehyung habían en Corea del Sur? Más sin embargo, no mencionó nada sobre ello, dejando que Jungkook continuara.

-Pero eso es bueno ¿no?

-N-no, me siento culpable, señorita Jiwoo. He roto todas las promesas que le hice a Seokjin, falté a mi palabra. Era lo único que tenía que hacer y no pude cumplir.- dijo con rabia. Sus ojos empezaron a llenarse de lágrimas que no quería dejar salir.

La mujer suspiró y cerró su libreta dejándola sobre el escritorio. Se levantó de la silla y caminó hasta el sillón donde estaba Jungkook para sentarse a su lado. Jiwoo le agarró ambas manos apretandolas en las suyas.

-Jungkook, entiendo que aún quieras cumplir con alguna de las promesas, pero debes aceptar que Seokjin ya no está aquí.- su voz y mirada derrochaban comprensión-. Mira, hagamos algo. No vendrás la semana que viene, tómate un descanso, eso sí.- se levantó de nuevo y fue hacía su escritorio para agarrar una libreta que tenía un lapicero incluido-. Aquí quiero que plasmes lo que sientes, lo que pasaste con Seokjin, lo que él te dijo. Sé que se te hace difícil expresarte de forma verbal, así que lo harás en papel ¿mmh? ¿Qué te parece?

-Muchas gracias.

-Nada de eso, nos vemos luego Jungkook-ssi.

El mencionado hizo una reverencia y salió de la oficina apretando la libreta en sus manos.