Cap 3

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En la escuela, justo a la hora del receso, se encontraba Kagami en la biblioteca, en su  lugar favorito: a un lado de la ventana.

Los lados de las ventanas tenían dos vistas, la primera; una vista hermosa a la ciudad, y la segunda: Daba adentro de la escuela, justo en la cancha.

Y su lado favorito era obviamente el segundo, porque así si se cansaba de tanto estudiar podía ver a la ventana y observar lo único que le daba energía, Marinette, que en ese momento almorzaba en la cancha con Alya.

Pues su amiga, Alya, le decía constantemente a Marinette que extrañaba pasar el rato juntas ya que estaba todo el tiempo con Kagami y tubo que pasar al menos el receso con ella para que no se sintiera mal y Kagami aprovechó eso para ir a estudiar.

Levantó la vista de un libro que estaba leyendo y la posó sobre Marinette que estaba hablando con Alya, nunca se hubiera imaginado que ver a alguien se sintiera tan bien.

La sonrisa que se había formado en su rostro al ver a Marinette se esfumó cuando vio cómo Adrien se le hacercaba y le hablaba, después de todo eran amigos, sin embargo una pequeña punzada en su pecho se hizo presente pues sabía que a Marinette le gustaba aquel chico rubio y sus constantes nervios y movimientos raros la delataban constantemente.

Al principio Kagami se sintió un poco confundida por sus sentimientos hacia una chica, pero su determinación y orgullo característicos de una Tsurugi le hicieron aceptar sus sentimientos y querer declararse lo más pronto posible, ya que se había tardado demasiado para su gusto debido a su miedo y confusión.

Al ver a Adrien alejarse y entrar al salón ella decidió seguirlo, después de todo ya casi se acababa el receso, entró al salón para dirigirse a su asiento el cual era a un lado de Marinette, pues ella misma se lo había pedido y Marinette había accedido gustosa, además Alya se podría sentar con su novio, pero a medio camino fue detenida por Adrien.

- Kagami espera! - Dijo Adrien levantándose de su asiento, para caminar hacia ella - Necesito un consejo...

- Te escucho... - Respondió Kagami sin ganas.

Había llegado a un punto en el que los celos y la molestia del contante rechazo del chico hacia Marinette le hacian odiar todo de él, incluso su presencia.

- Hay una chica que me gusta - Dijo Adrien nervioso - me gusta mucho..

- Una chica? Quién es? - Preguntó Kagami con la molestia de que pudiera ser Marinette.

- Ella es hermosa, su cabello es... - Decía Adrien emocionado.

- No pregunté cómo es, pregunté quién es, Adrien - Habló Kagami interrumpiendolo.

- Si, lo siento, la verdad es que no la conoces, pero me encantaría invitarla a salir y aunque no sé cómo hacerlo la verdad es que no tengo a nadie a quien preguntarle... - Decía Adrien tímido.

- No has intentado solo ir y preguntarle? Ser directo? - Preguntó Kagami.

- Mmm... Bueno... Si... Intenté invitarla a salir y confesarme pero me rechazó muchas veces... Y yo en serio quiero invitarla, demostrarle que en serio me gusta y... - Respondía nervioso hasta que fue interrumpido.

- Entonces asepta un "No" por respuesta Adrien, tratar de insistir está bien, pero hasta cierto punto ya es obsesión - Dijo Kagami molesta de que pudiera ser Marinette esa chica, para después irse a su asiento.

Adrien se quedó parado ahí donde lo dejó completamente indignado, pensando "obviamente lo que siento no es una obsesión, mi amor hacia Ladybug es completamente puro, no podría ser obsesión el confesarme constantemente al punto de molestarla, invitarla a salir tantas veces hasta hacerla enojar y mucho menos coquetear de manera innecesaria al punto de impedir salvar a París, no, no podría..." pero entre más se lo repetía peor se oía, quería decirle algo a Kagami para dejarle en claro que no era obsesión lo que sentía pero las palabras no le salieron y solo se quedó ahí parado hasta que la clase empezó y tuvo que regresar a su asiento.

Eventualmente Marinette tuvo que regresar al salón y se sentó a un lado de Kagami como era costumbre últimamente.

- Oye Marinette - Habló Kagami en voz baja - de que hablaron Adrien y tu?

- Oh, nos viste... - Dijo Marinette nerviosa - El solo fue a saludar...

- Ya veo - Dijo Kagami.

Le daba felicidad que no fuera nada importante y al mismo tiempo le molestaba sentirse feliz porque Marinette no tuviera avances, era su amiga y se supone que tenía que apoyarla, pero le resultaba sumamente difícil.

- Y le pedí que nos viéramos a la salida - Dijo de forma rápida y nerviosa.

- Pará qué? - Preguntó Kagami sorprendida.

- Quiero confesarme... - Respondió Marinette.

Kagami no dijo nada, estaba preocupada de lo que podía pasar y para cuando la clase acabó vio a Marinette hablando a solas con Adrien, quería oír la conversación pero prefirió irse, después de todo ella se lo contaría después con sumo detalle.

Puede que Adrien sea el único amigo de Kagami, pero el era el chico que le gustaba a Marinette y si el llegaba a sentir algo por más mínimo que fuera hacía Marinette entonces sería su rival, pues aunque el tuviera toda la ventaja, no renunciaría a sus sentimientos.

Incluso si ellos comenzaran a salir, ella no quería darse por vencida, no hasta declararse al menos.

Pero eso no quería decir que no le doliera herir a Adrien, era su amigo, su primer amigo y aunque tratara de ocultarlo le carcomia por dentro estar enamorada de la misma chica que el, sentía que sólo era una piedra en el zapato para ellos dos y que sin ella ellos ya estarían juntos y eso la quebraba por dentro.

"Tal vez esto es lo que es en realidad es el amor" pensó.

"El amor es amargo

Y sin embargo es el plato fuerte

Es el sabor de la derrota

Con tu llanto en una copa"

Su declaración se asercaba ya lo veía venir, pero también veía venir el rechazo de Marinette.

En este punto sólo podía pensar "Podré quitarme éste mal sabor de boca?"

Mi definición de amor (Kaganett) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora