my only angel (l.s)

uno

Louis nunca fue de aquellas personas que se enamoraban de alguien a la primera vista. Nunca había creído en ello y le parecía una total estupidez. Era más del tipo que podría enrollarse con alguien una noche, sin ningún tipo de compromiso, aunque solo lo haya hecho pocas veces. El sexo no era algo que realmente le urgiera o que necesitara para pasar sus fines de semana. No.

El joven castaño con ropa absolutamente negra solía pasear solo por los pasillos de la escuela, comiendo solo y haciendo cualquier actividad sin involucrar ningun acompañamiento. No era porque la gente no quisiera acercarse, sino era porque simplemente espantaba a todos los que se atrevieran. No toleraba la presencia de los demás, le parecía absurda puesto que muchas veces eran solo chicos y chicas que querían tener sexo con él, y que juraban que podrían convertirse en algo más en un futuro. Claramente no conocían de verdad a Louis y, la verdad, tampoco le importaba.

Louis se ganó su reputación a base de haberse peleado unas cuantas veces con unos idiotas que creían que por ser populares podrían pasar por encima de los menores. Louis podría ser asocial pero no insensible o inhumano, le reventaba la paciencia que hubiera gente que se sintiera superior cuando claramente no lo eran.

Así que sí. Louis peleó unas cuantas veces, muchas a decir verdad, y aquello, junto con que sus calificaciones habían bajado tras el abandono que sufrió por parte de su padre, dejando a su madre con tres hijos y una deuda que pagar, ocasionó que repitiera un año del instituto, mientras solo seguía su vida solitaria, llena de nubes grises y tormentas bajos sus ojos.

Sin embargo, así comose burlaba de las personas que juraban amor a primera vista, la vida decidió agarrarlo de la chaqueta y pegarle tremenda cachetada cuando vio a un lindo chico rizado en la biblioteca, donde tenia que cumplir un castigo ordenando los libros. Aquel chiquito leía pacíficamente, sentado en la gran mesa del lugar, con unos rizos cayendo por su frente. Louis vio su perfil y se sintió perdido por un momento. ¿Qué le estaba pasando? No podía apartar la mirada.

Fue ahí cuando el rizado, al sentirse observado, alzó el rostro del libro, mirando directamente hacia la persona que lo estuviera observando, dándose cuenta rápidamente que se trataba de, nada más y nada menos que Louis Tomlinson. El castaño casi rie cuando observó al chico bajar con rapidez su mirada, con sus mejillas de un tono carmesí clarito.

Con el tiempo descubrió que se llamaba Harry e iba un año más abajo que él. Harry siempre usaba aquellos sweaters muy holgados de tonos rositas o lilas y no le gustaba ser el centro de atención, por lo que solo mantenía la cabeza baja por todos lados, hasta con sus amigos. Louis descubrió en ese tiempo que el chico era realmente muy tímido, siempre jugaba con sus manitos, en las cuales traía sus uñas siempre pintadas de varios colores. Fueron incluso más las veces en que se le veía a Louis caminando al lado de aquel chico y todos se preguntaban cómo era que Louis no lo había mandado a la mierda ya. Lo que todos pensaban era que Harry estaba tras Louis... cuando en realidad todo el tiempo fue Louis quien estuvo tras Harry.

Por supuesto que toda la escuela se estremeció cuando los vieron besarse en la cafetería por primera vez, aunque estos ya hayan compartido muchos besos desde antes a solas. Nadie en la escuela podía entender cómo un chico como Harry podía estar con un chico como Louis. Harry lucía muy delicado siempre, hablando bajito y escondiéndose de todos, siempre con los ojos metidos en un libro nuevo mientras escuchaba su reproductor de música, era aquel cerebrito de la clase con un promedio excelente, que se notaba que tendría un muy buen futuro. Y Louis era... Louis.

Nadie lograba entender cómo un chico tan angelical como Harry podía estar con un chico malo.

🧁

-P-api, me voy a correr.

La habitación del conserje se encontraba cerrada con llave puesto que dos chicos controlados por las hormonas no pudieron contener sus ganas de liberar aquella tensión nuevamente.