N° 25

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el martes llego justo a tiempo para sus clases, se escondió en los baños en el almuerzo, de todas formas, no tenía hambre y apenas acabaron las clases salió al club de atletismo.

(su actuar era ridículo, pero fue lo que consiguió hacer luego de entrar en pánico)

en el club de atletismo entrenaban casi todos los días, de lunes a sábado sin contar los jueves, pero ella solo participaba los martes, pues tenía obligaciones en los otros clubs y los otros días practicaban natación y ella no sabía nadar

correrían, practicarían resistencia y velocidad.

usualmente t/n utilizaba la sudadera del uniforme sin importar si hacia frio o calor

pero ese día en medio de su desorden (mental y también el de su habitación) no la encontró así que decidió usar los shorts cortos y pegados que usaban la mayoría de las chicas.

Eran algo incomodos y sentía un poco de vergüenza

sus caderas y muslos bien formados salieron a relucir, la mayoría de los chicos se quedaron como bobos viéndola

Uzui aprovecho un momento de descuido de la chica y le dio una nalgada.

t/n soltó un chillido y se sonrojo pues algunos habían alcanzado a ver lo que el otro había hecho

- ¡idiota! ¿y si deja marca? - se sobo el glúteo con dolor

-eres un animal- le había dolido como el infierno

-así todos sabrán que tienes dueño- dijo con una sonrisa brillante

-no tengo dueño imbécil- intento mirar si tenía una marca, pero no pudo hacerlo

las otras chicas también se sonrojaron y empezaron a cuchichear sobre lo que había hecho el capitán del equipo.

eso sería malo si quería volver a tener una relación con Hinatsuru, además alimentaria los rumores sobre un posible romance entre ambos

ella decidió ignorarlo el resto del entrenamiento como venganza, la ley del hielo se le daba muy bien.

estaba recogiendo sus cosas, ya lista para irse cuando la jalaron por el brazo haciendo que soltara todo

cuando iba a reclamar vio al rubio con su uniforme de basquetbol

-Rengoku...- él tenía el ceño fruncido

- ¿qué diablos estas usando? - algunos de sus acompañantes del club de básquet habían estado hablando de un buen show en el club de atletismo y se habían ido a verlo, el decidió hacer lo mismo.

no se imaginó que su novia fuera ese show

-el uniforme de educación física... ¿por? - tal parece que t/n no se salvaría de una charla con el rubio, no quería dar un espectáculo enfrente de tanta gente, pero aprovecharía la situación a su favor

- ¿enserio? Pues parece ropa interior- se enojó ante el insulto del otro

- ¿disculpe? ¿desde cuándo debo rendirle cuentas de la ropa que uso? - se cruzó de brazos

-desde que eres mi novia- dijo el otro asegurándose de que todos lo escucharan

-señor Rengoku, usted y yo ya no somos novios, no lo olvide, ya terminamos- lo grito

el la jalo del brazo y la acerco a el

-no digas estupideces t/n- (momento "no digas mamadas mery jean" ajjajajaja)

la acerco a su cara, ella paso saliva de forma pesada.

Kyojuro se veía muy lindo en su uniforme de basquetbol y ella seguía siendo débil ante él, pero el enojo y su orgullo podían mas

-vino hasta aquí, ¿solo para armar un show? terminemos por las buenas, lo mejor es tratarnos como extraños-

se apartó de él y acomodo su cabello, lo tenía recogido en una trenza baja

-vine porque ayer huiste de mí, tenemos que hablar- se atoro con su propia saliva al recordar lo que había hecho el día anterior

-usted y yo no tenemos nada de lo que hablar- se incorporó luego de casi ahogarse con su propia saliva

-claro que si vamos a hablar ahora- él la seguía viendo con una cara seria.

disimuladamente t/n vio atrás de ella y ahí estaba Uzui. coloco una mano en su espalda y con dos dedos hizo el movimiento de unas tijeras

-ya dije que no- el negó con la cabeza y empezó a jalarla del brazo.

Uzui llego justo a tiempo y lo detuvo

-le advertí que no se acercara a t/n- el rubio soltó a la chica y vio al más alto

- ¿acaso eres su papa? - el más alto rio

-pues... a veces me dice Daddy, pero eso no le debe importar a usted- sonrió altivo y abrazo a la chica de forma posesiva, t/n sintió que casi la espichaba y pudo notar como el calor subía a sus mejillas

-así que ¿eso es lo que sucede t/n? - apretó sus manos con enfado

La chica estaba avergonzada y no quería hablar ni explicar nada

-Rengoku-sempai, mejor hablemos mañana en el club de concejo- le propuso la joven, aunque de lo único que pensaba hablar ese día era sobre su idea de dejar el club.

el rubio puso una sonrisa brillante que seguramente era falsa

-claro t/n, de hecho, es importante que vallas porque hablaremos del presupuesto de los clubs, entre esos, está el club de atletismo- las caras de los otros dos se pusieron serias.

lo que Kyojuro acaba de decir era algo como una amenaza

-estaré ahí de forma puntual, no debe preocuparse- ella reconocía que el chico era astuto, ahora debería pensar en una estrategia para que no se quedaran a solas

-entonces los dejo, tienen que llegar pronto a casa- seguía con esa brillante sonrisa encantadora, t/n se sentía desfallecer, maldito niño lindo, hipócrita y poco hombre

se agacho a recoger las cosas que había tirado por culpa del rubio, por suerte su celular estaba completamente bien, suspiro aliviada y lo limpio con su brazo

- ¿qué es... lo que tienes ahí? - pregunto el rubio de nuevo serio

ella se levantó ya con sus cosas en su maletín y volteo a ver, la marca de la nalgada de Uzui aún estaba roja.

se sonrojo por completo y con una de sus manos tapo la marca de la mano del albino.

el de ojos rojos rio -valla, deje una buena marca- t/n se sonrojo aún más

-eres un idiota-

se fue caminando de forma rápida y el más alto la siguió. el rubio se quedó ahí de pie observando de forma expectante.

¿cómo se atrevía t/n a hacerle eso?

a lo lejos sonó otra palmada fuerte

- ¡U Uzui te voy a matar! - ahora se estaban persiguiendo de forma animada

frunció el ceño. no le gustaba la cercanía entre esos dos.

tendría que hablar con t/n respecto a eso y respecto a su actitud reciente. empezaba a pensar que no podría recuperar a la chica

últimamente pensaba mucho en la de cabellos castaños

su teléfono empezó a sonar y cuando vio la pantalla se dio cuenta de que era Yae, suspiro cansado y pago el celular, realmente ya estaba cansado de esa chica, por culpa de ella ahora t/n estaba enojada con el

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