VEINTIUNO

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Después de una extensa jornada de clases con muchas participaciones en clase, Taehyung salió de las aulas en busca de Jungkook, realmente quería comprobar su presencia en el entorno estudiantil. Y se llevó una sorpresa al verlo muy interesado en el salón de artes, pintando sobre un lienzo con una mirar Pacífico y muy pasional.

Pocos lo sabían, pero Jungkook era un artista, tenía una vehemencia artística característica de su personalidad, le gustaba expresarse allí y por el momento su obra se basaba en "él", jugando a auto entrevistarse contestó a las siguientes dudas.

"Oh, aclamado artista Jk, ¿Cuál es la inspiración de su arte... o más bien, quién?"
Jungkook cerró los ojos analizando la pregunta de su imaginario entrevistador.
Puso un dedo en su bigote de pintura y contestó: "Pues si, mi querido Jimmy Fallon, el dueño de esta obra no soy yo, le pertenece a un "él" sin embargo su nombre no puede ser dicho, porque expondría mi profundo amor por este ser"

"¿Es un amor prohibido, Jungkook?"
Se atrevió a preguntar Jimmy Fallon invisible con un gesto pícaro y curioso.

"Más bien es un amor no correspondido" el público se desanimó, ¿¡Quién podría no amar a ese hombre!? 

Su entrevista imaginaria se interrumpió al sentir a un chico sentarse a su lado a admirar  su arte.

— ¿No se parece a...? — Alargó Taehyung mirando con severo interés el cuadro.

— Ni lo menciones, tonto — Quiso cubrir su arte pero no podía tocarlo al estar fresco, forcejearon un poco, entre risas y bromas.

— Señor, Kim, no interrumpa el arte — Le llamó la atención el Maestro de artes, el señor Kang. Quién después de recibir al alumno Jungkook se mantuvo con él desde el principio de las jornadas, si, Jeon escapó de clases y se escabulló en el salón de Artes manuales.

— Lo siento, Profesor — Soltó mirando de reojo a Jungkook.
— Bueno, al parecer estás ocupado, me imagino que irás a casa por tu cuenta — Hizo un puchero mirando hacia otro lado.

— Kim Taehyung, tú y tus disimuladas maneras de decir que quieres caminar conmigo a casa — Jungkook rodó los ojos tentado a irse, pero no iba a ser un chico fácil.
Taehyung abrió los ojos en demasía, muy ofendido. — Puedes seguir, yo te alcanzo más tarde — Hizo una seña con su mano para despacharlo. Y este lo hizo luego de darle un manotazo en la cabeza.

Taehyung salió de la institución silbando alegremente y al instante sorprendiéndose del parecido que tenía un perro callejero con su querido Yeontan, canino el cual fue directo hacia él borrando toda duda.

— ¡YEONTAN! ¡Mi precioso! — Después de acariciarlo y dejarse lamerse por el perrito Taehyung lo cargo en sus brazos mirando al dueño de aquel suceso: Hyunjin, el cual sonreía ladino con sus brazos cruzados. Se acercó a Taehyung y lo saludó con un abrazo cálido.

— Hola, terroncito — Le frotó el cabello juguetón.

— No me digas así — Le miró hacia arriba — ¿Cuándo llegaron? ¿Y por qué tan repentinamente? — El castaño se mantenía abrazando a su cachorro

— Queríamos darte una sorpresita — Se balanceó en sus pies con una sonrisa.

Unos metros tras de ellos se escuchó el arrastrar de unas ruedas, ninguno de ambos se inmutó hasta que el dueño de aquel vehículo le dio un sape a Taehyung seguido de una sonrisa al pasar en su skate.

— uuuh, ¿Whos that fine babe? — Hyunjin estaba mirando a Jungkook hasta que giró en él estacionamiento y se perdió de vista.

— Aish, Hyunjin, es el emo irritante con el que vivo — Respondió ignorando el interés preocupante que le puso su amigo al pelinegro.

— ¿Ese chico es el que vive contigo? — Se encontraba incrédulo.

— Que si — Abarrajó.

Ambos caminaron juntos hacia la casa temporal de Taehyung, Hyunjin estaba muy curioso por Jungkook, que tenía prácticamente HARTO a su amigo castaño.

Pero también hablaron de cómo es que vino tan pronto a la ciudad y donde se hospedaba, resulta ser que se mantenía en la casa de unos familiares por unos días.

El precioso Tannie estaba muy a gusto durmiendo en los brazos de su dueño mientras este caminaba.

Llegaron a la casa y les sorprendió el ver al pelinegro sentado en el suelo del patio y con su teléfono al oído.

— ¡Jiimiiiiiiin! — Alargó suplicando — Por favor vuelvan pronto, no tienes idea la estupidez que hice la última vez por algo de hierva — Hizo un puchero recordando ligeramente aquello

— ¿De dónde consegusiste? — preguntó al otro lado de la línea

— Yeonjun — Susurró, porque de por si Yoongi también se fue con el.

— Mierda, Jungkook. Que tonto — Le respondió.

— si, si, ¿Cuándo vuelven de su luna de miel?

— Cállate, tonto — Quiso golpearlo — Cuando vaya serás el primero en enterarte.

Después de despedirse, el pelinegro notó al castaño entrando a la casa y a un rubio que le saludaba con interés.




















Holis, como están?

Estudiante de intercambio-- Kooktae Donde viven las historias. Descúbrelo ahora