Estudiante de intercambio-- Kooktae

DOCE

No sabía si era su imaginación o en realidad había una tensión y espesor en el aire. Jeon Jungkook había llegado a casa hace un rato, después de darse una ducha se echó en su cama a mirar el techo un rato, pensando un poco en sus fugaces recuerdos de la noche acontecida, y mientras Taehyung estaba al otro lado de la habitación mensajeándose  con su amigo y mirando al pelinegro de reojo.

Le daba vergüenza lo que había hecho hacía unas horas, estar en la cama del chico y dormir en ella como un atrevido. Sus mejillas se tornaron rojas al ver como los falanges de Jeon se deslizaban por su pantaloneta color negro, acariciaba algo allí y Kim intentaba disimular la penetrante mirada que tenía.

Jeon había olvidado por un momento su intruso y quitó la mano rápidamente para ir al baño. Tae sacudió la cabeza tomando en cuenta que no era su problema, siguió revisando los mensajes de su amigo. Le resultaba extraña la conducta de Jeon, normalmente le hacía comentarios burlescos o lo molestaba, pero ese día sólo se lo encontró de buen humor no queriendo decir ni palabra. Algo que él deduciría como un libido elevado.

Se preguntarán, ¿en que pensaba Jungkook? Y era en su sueño de anoche, no recordaba el rostro del chico con el que soñó, pero estaba bien dotado y sus suspiros lo dejaban en el cielo, lo tomaba del cuellito y lo besaba hasta dejarlo sin aire.
Subía y bajaba sobre él, tal como su mano en su falo, intentaba ahogar sus jadeos, sin embargo era tan buena la fantasía y hace tiempo que no se autocomplacía que le era difícil.

Y Tae lo escuchó, solo bastó un "uuh~" para dejarlo con el rostro completamente rojo y hacerlo salir de la habitación a toda prisa, le hubiera fascinado huir de sus pensamientos como lo había hecho de la escena pero le era imposible.

Sin embargo, el llamado de Hyunjin a su móvil lo distrajo.

— ¡Hola Taetae! — Saludó totalmente animado, Hyunjin, se podría decir que único amigo de Kim, era extrovertido y se la pasaba molestando a su amigo, Tae lo quería pero no era muy expresivo.

— Hola, Hyunjin — Su voz algo perdida

— ¿Cómo estás? ¿Cómo te ha ido? ¿Qué tal te trata seoul? Por acá te extrañamos muuuucho — vociferó corrido y de una buena gana

— Excelente, conocí a una chica, además del hijo emo de la señora Jeon — No daba muchos detalles

— ¿chica?

— Si, tuvimos una cita y todo. Ese chico Jungkook me saca de quicio, es muy fastidioso, lo odio — Terminó diciendo apretando el puño

— Taetae, ¡como te cambió la voz hablando del chico! Hasta hablaste un poco más — Y a Tae ya le estaba molestando sonrojarse tan seguido

— N-no, estás equivocado — Maldijo el haberse entrecortado

— Ignoraré como te trabaste de lo nervioso porque tengo noticias — Hizo una pausa dramática en la que Taehyung rodó los ojos — Iré a Seoul a visitarte por las vacaciones del colegio aquí — Tae asintió pensando en cómo serían los detalles técnicos de aquella visita
— Me quedaré con una tía, pensé que sería divertido, ¿qué te parece?

— Me agrada la idea, también quería visitarte — Musitó bajando las escaleras.

— Pensaba llevar a Tannie también — Tae de frenó en medio de las gradas

— ¡Mi precioso tannie! Gracias Hyunjin, lo extrañaba muchísimo — Hasta dió brinquitos de la emoción, veía al gato negro de la casa cruzar por el barandal a un lado de él.

...

Y en medio de su fantasía el rostro de aquel muchacho se tornó en el de Taehyung, en ese momento no se lo cuestionó ni le molestó, su cara haciendo esas expresiones debía verse muy bien.

Y terminó, con una respiración cansada y manchando la pared de la ducha, un suave 'ahh~' se le llegó a salir.

— No puedo tener sentimientos por ese ñoño — farfulló limpiando algo su desastre y acomodándose la ropa.

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