Speechless / Love & Nine

Chapter 18 🌼

—Oye amigo, qué tienes...— Preguntó SungHo un poco fuera sí.

Sequé un poco mis lágrimas y aún en el suelo, tomé mi libreta del sofá para escribir.

-- Esta es mi casa... Y este es mi perro, pensé que lo había perdido el día que nos íbamos de casa. Quisiera saber por qué mamá la vendió sin consultarme --

—Wuao... Que coincidencia del destino— Se acercó a mí y me sonrió con la cabeza gacha— Te lo puedes llevar, es tuyo.

A lo dicho, negué un poco triste pues saben que no puedo llevar perros a casa.

-- Mamá no me deja tenerlo en casa... --

—Entonces ven a visitarlo cuando quieras, eres bienvenido, aunque no te conozca bien, me agradas— Dijo un poco sonrojado. Alcé mi mirada muy emocionado para luego escribir:

-- ¡¿En serio?! ¡Gracias! No sabes lo mucho que yo quiero a Galbi, espero volver pronto, es que estoy trabajando... --

—¿En dónde?

-- En la Cafetería Dream ¿Sabes cuál es? --

—¡Claro! Un amigo me había invitado ayer, pero es un poco lejos y me dio flojera ir Jeje pero algún día iré a visitarte con Galbi a tu trabajo— Acarició su cabeza y luego me miró— Si es que quieres claro.

Lo abracé sonriente como si lo conociera de toda la vida, dando a mostrar que sí quería que fuera.

—Bien bien, entonces allí estaré— Sonrió. Saqué mi teléfono del bolsillo para ver la hora.

¡Rayos! Ahora sí iban a regañarme, eran las 4:30, sé que para algunos es temprano, pero en mi caso no, mi madre llega a las 5 a casa y no le gusta que esté a estas horas en la calle.

Me levanté de golpe y escribí rápido.

-- Debo irme, en serio gracias SungHo nos vemos ^^ --

La arranqué y se la entregué agitando la mano en señal de despedida, y salí no sin antes darle un beso a Galbi en la cabeza.

🌼 🌼 🌼

Mientras caminaba sigiloso por la sala para no ser escuchado; subí las escaleras y pasé por la habitación de mamá casi que sin respirar para llegar a la mía.

—Hey— Escuché su voz junto a la puerta de su habitación abrirse. ¡Hijoles! ¡Casi!. Me voltee como si nada con una tonta sonrisa para no ser reprendido. Sonrisa que desapareció al instante al verla tan seria— Muévete a sacar tu libreta y respóndeme por qué tú llegas a estas horas y dónde estabas— Se cruzó de brazos. Obedecí con la cabeza baja pensando en que escusa poner.

--Pues yo... Estaba con Kyubin y se me pasó la hora--

Con mala cara, arrugó el papel y bruscamente me lo tiró en la cara, el cual no llegó a tocarme porque lo detuve cubriendo mi rostro con mis manos.

—¿Por qué eres tan mentiroso? Llegué hace 2 horas y Kyubin estaba con Jisung y otro chico ahí. Te voy a dar una última oportunidad y si no me dices dónde diablos estabas, de aquí no sales más por un largo tiempo Jung Wookjin— Demandó. La miré intimidado para luego escribir otra excusa.

Jamás le diría que fui a casa de un completo extraño. Me regañaría muy feo.

-- Fui al parque --

—¿Y por qué tenías que mentirme si solo fuiste al parque? — Se acercó más a mí— Qué me estas ocultando Wookjin— Negué con la cabeza y manos repetidas veces— ¡¿Me quieres ver cara de estúpida?!— Dicho esto, me alzó la mano y automáticamente miré a otro lado cerrando fuertemente mis ojos esperando el golpe. Ella se detuvo y dio un gran suspiro— Vete de aquí, ¡Ya! No te quiero ver.

Con la cabeza gacha, me metí a mi habitación lo más rápido que mis piernas alcanzaron y cerré la puerta detrás de mí para abalanzarme en mi cama.

¡Ya no soy un bebé! No entiendo por qué no puedo llegar a la hora que quiera... ¡Ya estoy grande!

Lancé mis peluches de animales que tenía sobre mi cama al suelo en un berrinche, y luego los recogí todos abriendo las puertas del pequeño balcón aventándolos abajo.

—Y-ya no los necesito...— Susurré para mí mismo, dándome media la vuelta. Una voz proveniente de abajo me hizo devolver para apoyarme del barandal y ver de quién se trataba.

—¿Qué diablos...? — Tomó uno de los muñecos del suelo— ¿Qué estás haciendo?

No me había dado cuenta que estaba pasando alguien por allí y pues... Le cayeron a Jisung en la cabeza

Sólo lo miré molesto y luego me volví a encerrar en mi habitación.

Sólo quería gritar y desahogarme, yo sólo quería que todo vuelva a ser como antes...

En estos momentos, estoy volviendo a desear vivir solo, ¡No importa que me quede toda mi vida con un perro! ¡Ya no quiero estar aquí!

Escuché que tocaron la estúpida puerta y sinceramente no quería levantarme abrirla así que me acurruqué más entre las sábanas.

—Wookjin, soy yo, Jisung— Hizo una pausa— Quiero hablar contigo.

Pero yo no... Tú me lastimas.

Es lo que quería decirle. Me levanté malhumorado y le abrí sin verle a la cara volviéndome a recostar de la misma posición; acurrucado, pero tapando mi rostro con una almohada de corazón.

También debí lanzarla...

Éste se sentó a mi lado.

—Por qué estás así ¿Te pasa algo?

Me senté en la cama con un puchero y extendí mi brazo hacia la mesita, pero sin moverme para que él me pasara la libreta.

Se levantó y me la trajo con una expresión un poco preocupada.

-- Tú no me caes bien... Eres muy bipolar, haces que mis amigos discutan y no debería importarte lo que me pase --

—¿No te caigo bien? — Negué aún con la cabeza baja— Bien, pero responde esto: Si tú estuvieras en mi lugar y tus dos amigos te dijeran que gustan de ti ¿Cómo reaccionarias? — Mi mente se quedó en blanco... Bueno, lo admito, él tiene un poco de razón.

Aunque ustedes saben que ese no es el motivo por el cual estoy molesto.

-- ¿Podrías contarme que paso después que me fui? --

—Sólo si tú me cuentas por qué estabas llorando cuando te fuiste de la discusión.

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Nos leemos luego

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