Pro Memoria (Camren Gip)

CAPÍTULO 5

Lauren despertó por los ruidos que provenían de la cocina, se le ato rápido y fue a ver, cuando llegó a la cocina se encontró con Katia y su padre.

-Buenos días-

-¿Por qué no contestaron mis llamadas y mensajes?-

-Fue un caos, entre la policía y que no podías pasar en la carretera y el aeropuerto estaba cerrado, fue muy estresante-

-Que bueno que están bien-

-Perdón por no contestar. ¿Vas a salir?-

-No creo, Camila va estar en casa y yo quiero dormir un poco más-

-También tenemos sueño, vamos a descansar-

Lauren desayuno junto a su padre y Katia, después los tres se fueron a sus habitaciones, Lauren se la pasó todo el día jugando videojuegos en la pc.

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-Mantén tu guardia-

Lauren estaba entretenido con Katia, quien desde los 8 años le enseñó a pelear y defenderse, su padre no estaba de acuerdo con que le enseñarán a pelear, pero cuando noto la crueldad de los niños le dio el permiso hasta busco uno de mejores entrenadores para que le dieran clases a la ojiverde.

-Descansa Lolo-

Lauren se sentó en la orilla del ring.

-¿Como vas con Camila?-

-Bien, es muy linda y nada interesada-

-Me alegro que hayas encontrado una chica como ella-

-¿Cuando la traes?- dijo Katia.

-No quiero que se intimide-

-Invitala mañana, me salen muy bien las hamburguesa-

-¿Cual es su comida favorita?- pregunto Katia.

-La pizza con piña-

-Invitala, quiero conocerla-

-Si nunca tuviste novia o te rechazaban por ser un cerebrito- acaricio su cabeza.

-Esta bien le diré, pero no me hagan pasar una vergüenza-

-Como familia es lo que se tiene que hacer-

Lauren tomo su móvil y le mando un mensaje a la castaña diciéndole que si podía mañana para invitarla a comer en su casa, Camila le dijo que estaba nerviosa. Camila solo había visto a Katia y eso que solo unos minutos y de lejos, le parecía una chica bastante seria y bastante intimidante.

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Lauren esperaba a la castaña en el auto, estaba un poco nerviosa, nunca había presentado a una chica con su padre o Katia. Mientras Camila estaba más nerviosa por conocer al padre de la ojiverde.

Escucjo que tocaban la ventana y vio a la castaña, Lauren abrió la puerta.

-Hola-

-Hola-

Lauren no sabía como saludar a Camila, así que se atrevió a darle un beso en la mejilla.