Los niños buenos van al infierno.

17

Sintió un leve empujón en su cuerpo y una vocecita cada vez más clara a medida que abría los ojos. Al principio su vista se tornó borrosa pero después diviso a Shotaro enfrente de su cama en un intento por despertarlo. Sungchan se incorporó de manera correcta.

─Hay reunión, hay reunión. ─aviso moviendo sus brazos esta vez─. Joy nos esta llamando a todos.

─ ¿Reunión? ─pregunto Sungchan mientras soltaba un bostezo y se tallaba los ojos. Su amigo asintió frenéticamente.

Lo ayudo a salirse de la cama sin siquiera poder arreglarse para después irse corriendo hasta el salón de reuniones. Había unas pequeñas sillas para los niños y como llegaron tarde tuvieron que estar en la parte trasera.

Al aparecer eran los últimos que faltaban ya que una vez que Joy contó a todos dio por inicio.

─Se que estos días han estado un poco apagados. Estuve revisando los puntos que cada uno de ustedes han obtenido y lamento informarles que aun nadie de ustedes tiene los suficientes. En otras noticias, he escuchado que están tristes por no ser adoptados, no se presionen, todo toma su tiempo. Solo tengan paciencia y sean optimistas. ─mostró los puños en forma de apoyo y una sonrisa radiante apareció en su rostro. Los niños asintieron y ella prosiguió─. El padre Baekho me propuso algo, siento que a todos ustedes les gustara. Los sábados algunos de ustedes podrán acompañarme a la misa, después el domingo irán los que no fueron y asi sucesivamente. Es una buena oportunidad para que todos ustedes se acerquen con Dios.

Sungchan intercambio miradas con su amigo, no se esperaban eso. Una niña levanto la mano y Joy la apuntó para que opinara.

─Usted nos había dicho que respetarian nuestras creencias...

─Se que todos aquí tenemos nuestros pensamientos diferentes, pero veámonoslo de esta manera. Dios ha ayudado a miles de personas a salir adelante y a sentirse mejor en sus peores momentos. Si están teniendo un momento difícil pueden acercarse a nuestro señor y él los aceptara de brazos abiertos, sus vidas mejoraran. Los padres hoy en día quieren unos hijos que estén tomados de la mano de Dios.

─Una mierda. ─susurro Hendery con toda honestidad, se encontraba cerca. Sungchan lo miro y recordó el incidente del baño. Observo la parte de su nuca y noto un moretón, mientras que alrededor de su cuello estaba un poco rojo. Al final se lo guardo para si mismo, no le gustaba recordarlo y menos contar algo tan traumático para Hendery.

─Como dije, este sábado comenzaremos con un pequeño grupo y el siguiente otro. ¿Quién se apunta a este sábado?

La mitad de los que se encontraban ahí levantaron la mano y comenzaron a hablar al mismo tiempo, creando un desorden. Joy soltó una risa nerviosa y les pidió que se mantuvieran en silencio mientras elegía.

─Antes no nos hacían esto. ─le susurro Shotaro a su amigo. Este asintió─. ¿En verdad se trata por la adopción?

─No se...

─La verdad nunca presto atención a eso. ─admitió pero recordó las clases pasados con el profesor Kai─. Ahora que lo pienso, el profesor Kai solo nos ha hablado de los sucesos de Dios. Antes él no era así...

─Sungchan, ¿puedo hablar contigo un momento? ─pregunto Joy de la nada y sintió la mirada de todos encima, en especial la de Hendery.

Sungchan asintió desconcertado y Joy se lo llevo hasta el otro salón vacío que se encontraba al lado. Una vez que entro cerró la puerta para estar en privacidad. El menor noto una rara mirada en la mujer, una mas desesperada.

─Me he dado cuenta que Jaehyun ha venido seguido, solo para verte.

─ ¿En serio?

─ ¿Y qué te parece? ¿Te agrada?

Sungchan asintió sin entender a donde iría todo esto. Por un instante, creyó que se trataría de otra cosa. ¿Ella se habrá enterado que vio lo que Taeyong le hizo a Hendery?

─Como te llevas tan bien con él, ¿te gustaría ser uno de los que van los sábados a la iglesia? Jaehyun ayuda también.

─ ¿Puedo? ─pregunto dudoso. Pero al menos veia el lado bueno de eso, saldría del orfananto y veria a Jaehyun.

─Por supuesto, el padre Baekho estará tan orgulloso de ti al igual que Jaehyun. Debes estar tan agradecido con nuestro Dios por poner a Jaehyun en tu camino.

─Si, supongo que estoy agradecido. ─susurro un tanto inseguro y Joy solo aumento su sonrisa, viéndose un poco aterradora.