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Sungchan observo la puerta de la entrada, como si Jaehyun fuera a regresar y decirle que todo fue una broma. Pero no sucedió, espero unos cuarenta minutos que se sintieron eternos.

Se recargo en la pared y miro a su alrededor, buscando cualquier cosa para entretenerse. Hasta que llego su amigo.

─ ¿Sigues aquí? ─pregunto Shotaro sorprendido. Sungchan sintió vergüenza en responderle, probablemente porque ya llevaba un buen rato esperando al regreso de Jaehyun aunque pareciera que no iba a volver.

─Solo...mmhh...─se pensó una pequeña mentira pero no encontro una. Shotaro le mostró una sonrisa de lado.

─Ven, sigamos viendo a Dooly el pequeño dinosaurio. Ahorita esta en la televisión, aprovechemos que Hendery esta leyendo en nuestro cuarto, Yujin nos esta esperando. ─le indico apuntándole a la habitación pero Sungchan no se movió─. Se ve que Jaehyun no va a volver en un buen rato. Tal vez venga el sábado.

─ ¿El sábado? ─preguntó incrédulo─. Apenas es martes...

─También tiene una vida afuera, solo porque nosotros no la tengamos no significa que los demás tampoco.

─Pero se llevó a Junh...Kwan...

─Junghwan. ─le recordó.

─ ¿Para qué se lo llevo? Jaehyun no lo conoce.

─ ¿Y cómo estas tan seguro? ─preguntó.

─Bueno, se supone que solo me conoce a mi...

Shotaro lo tomo de la mano y esta vez Sungchan se dejó. Su amigo lo comenzó a guiar para que vieran la serie infantil.

─ ¿Para qué se lo habrá llevado? ─preguntó de nuevo Sungchan. El menor se encogió de hombros─. Hoy no hay misa. Además, si se lleva a uno también tendría que llevarse a mas, ¿no?

Shotaro se detuvo en seco.

─Es cierto...

─ ¿Verdad que si? ─se notó sospechoso─. ¿Estas pensado lo mismo que yo?

─Depende, ¿qué es?

─Ir con ellos. ─Shotaro levanto una ceja y Sungchan al ver que no entendió siguió─. Salir por el patio e ir...

─Espera, espera. ¿Estás loco? ─pregunto impactado, como si dijera la tonteria más grande del mundo─. No podemos hacer eso, nos arriesgaríamos mucho.

─Vale la pena.

─No, no la vale. Ahora que lo pienso es ridículo, ¿para qué seguirlos?

Sungchan se quedó callado, pero tenia esa curiosidad creciendo más y más.

─Iré yo entonces. ─sentencio yendo directo al patio pero Shotaro se atravesó en su camino para detenerlo. Se estaba comenzando a frustrar.

─No puedes ir tu solo, si se enteran que te saliste te quitaran varios puntos...ahora si no saldrá por años.

─ ¿Y qué? De todos modos Jaehyun podría llevarme de paseo.

─ ¿Como un perro? ─pregunto alzando una ceja, desconcertado.

─No importa como sea, la cosa es que él me sacara de aquí de vez en cuando. Se que convencerá a Joy y...

─Vaya suerte tienes. Unos aquí tenemos que aguantarnos.

Sungchan suavizo su rostro al ver que su amigo se mostró ofendido con sus palabras. Había olvidado que ellos no tenían ese pequeño privilegio.

─No quería decir eso, perdón. Es solo...

Los niños buenos van al infierno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora