Capítulo 4

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Caminaba por los pasillos de aquella disquera, sus pasos eran apresurados y solo había una razón: estaba furioso con Miya Chinen. 

Quizá esa no era la palabra correcta, no estaba furioso, estaba enojado, ofendido, confundido, se sentía expuesto. Sí, esa era la palabra, se sentía expuesto. Tal vez la canción no era sobre lo que sucedió en el pasado, una coincidencia, las coincidencias ocurrían bastante, pero no lo creía.

Ya sería mucha coincidencia que Miya, persona con la que trabajó en esos momentos específicos, escribiera una canción que describiera ese tiempo y que además haya pedido que él y Langa interpretaran el papel principal en su video.

Entró a una oficina y ahí estaba, lucía diferente y era obvio que sería así, lo conoció cuando apenas era un niño. Su cabello era más largo y tenía las puntas verdes, se notaba más alto y usaba lentes. Aunque lo único que no había cambiado al parecer era su terrible postura al sentarse.

—Mi manager me dijo que vendrías para hablar del contrato, esas cosas no se arreglan conmigo así que viniste por otra cosa.

—Escuché la canción.

—Ajá, como la mayoría de las personas. Está en los primeros puestos desde su lanzamiento.

—Presumido, no me refiero a eso.

—Dilo claramente entonces. 

—La letra de la canción.. ¿tiene algo que ver conmigo?

—El mundo no gira al rededor de ti, Reki. —se burlo de él mientras bebía su café.— es normal que la gente se identifique con las canciones y no por eso están escritas basándose en ellos. Siento que te identifiques con algo muy triste pero no es sobre ti..

 Dejó de estar tenso, no podía creerle tan fácilmente pero escuchar eso lo tranquilizaba, al parecer si podía ser una coincidencia.

—Es sobre alguien más que conocemos. Eso creo. —sonrió con malicia, le gustaba confundirlo.— cuando trabajamos juntos, encontré algo y eso me inspiró a escribir la letra, pero ese proceso creativo es privado. Si te gusta la canción y aceptas trabajar conmigo adelante, sino, puedo conseguir a alguien más.

—Sabes lo que pasó en Okinawa, ¿verdad?

—Sí.

—Eso nos metió en problemas a Langa y a mí, ¿por qué revivir esa polémica? porque sabes que si salimos juntos en un papel así  todos recordarán lo que sucedió. Puede volver a afectar a Langa.

—Pero el acepto. No dudó en ningún momento. ¿No serás tú el que teme ser perjudicado?

—No lo entiendes, no estuviste ahí y no conoces a Langa.

—Y tú tampoco, no se han visto en siete años, no te hagas el importante. 

Eso hirió al pelirrojo, pero tenía razón, siete años era mucho tiempo, y eran siete años importantes, Langa se lo dijo, cambió y él también, ya no lo conocía, ya no era su confidente ni su mejor amigo, ya no era la única persona que sabía todo de él. Apretó lo puños, su cabeza dolía por todo ese estrés.

—Si te dejaras de preocupar por el bienestar de Langa.. las cosas hubieran ido mejor. Es algo que no quieres ver y que hasta yo entendí. 

—¿Cómo sabes tanto?

—Era un niño, los adultos ignoran que escuchamos y entendemos todo. Además, indagué. Quizá reviva esa polémica, ¿pero y qué? ya lo desmintieron y solo están interpretando un papel, además, lo que brillará aquí es mi canción y la historia del video. Entonces, ¿aceptarás o seguirás siendo un cobarde? esta puede ser una buena oportunidad.

—Me va bien, esto no es tanto.

—No me refiero a oportunidad laboral, me refiero a una oportunidad con Langa.

—¡Nosotros nunca fuimos algo! —protestó con un sonrojo en el rostro. Miya estallo a carcajadas, casi atragantándose con su café, lo que dejó bastante confundido al mayor de edad.

—No lo dije en ese sentido, pero solito te delataste. —le mostró un pin que tenía en su chaqueta de cuero, era una bandera.— soy el menos interesado en juzgarte, Reki. Solo me gusta molestarte.. es bueno volver a verte

—Ahh.. no te recordaba tan molesto. —sonrió de lado, Miya había ganado, pero solo sería esa vez.




Estaba en su casa leyendo el guion del video, Miya se lo había dado durante su visita como adelanto. Todo estaba escrito por él, lo único que no haría era dirigir ya que no tenía experiencia. Le sorprendía lo mucho que había avanzado y crecido, incluso siendo menor que él le había dado una lección. 

La historia es triste y va acorde a la canción.

Dos chicos que viven juntos en un orfanato desde que eran niños tienen el sueño de ir a conocer el mundo que descubrieron a través de una biblioteca secreta en las instalaciones. Sin embargo debido a la guerra y como tienen la edad para entrar al ejercito serán reclutados junto con otros chicos del lugar. Ellos deciden escapar cuando se declaran su amor pero son vistos por una de las hermanas, quien los acusa con el pastor y el ejército. Entonces mientras están abordando un tren de forma ilegal, ya que el personaje de Langa, Nanase, aborda, su personaje, Haru, decide quedarse para que Nanase pueda escapar y lo matan ahí en frente de él  mientras se va.

Según Miya, la canción era el punto de vista de Nanase, quien sufría con la decisión que tomó su amado. «Es una carta de suicidio. » le dijo Miya cuando le terminó de contarla historia.

Seguía pensando en su conversación con él, sobre todo en lo que dijo.

«Si te dejaras de preocupar por el bienestar de Langa.. las cosas hubieran ido mejor. » Quizá. Puede que si no hubiera priorizado la seguridad de Langa las cosas estarían mejor, no se habría alejado, no habría dejado a Sato aprobar ese contrato y él no lo hubiera firmado. Pero ya era tarde para esos arrepentimientos, todos eso ya había ocurrido y no existía una maquina de tiempo para retroceder y tomar una decisión.

E incluso si la tuviera no la cambiaría. Porque protegió a Langa y cumplió la promesa que se hizo a si mismo la noche en la que Langa salió del closet con él. Daría lo que fuera por él, incluso su felicidad. Era extremo, pero así funcionaba su corazón joven y locamente enamorado del chico que temía ser odiado y no poder cumplir su sueño.






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