Tiempos Rotos

tormenta de emociones

Pov Amity

Estos días han sido algo estresantes pero divertidos, jugando con Alec y mi pequeña saltamontes y lidiando con la sombra que me atormenta día a día... Luz Noceda... No tengo nada en contra de ella. Si decidió terminar lo nuestro, es solo que son los estúpidos sentimientos que recuerdo haber enterrado en lo más profundo de mi corazón. Duele amarla otra vez.

¿Duele quererla tanto?

¿Duele amarla después de aquel engaño?

Era mejor olvidar lo que pasó. Decidí hacer la cena para los niños, ya que su madre se encontraba en el estudio. Después de una excelente experiencia en la cocina, pongo los platos en la mesa y sirvo la comida. Es una rica receta que preparaba mi abuela.

"Alec, Dany, a cenar", digo mientras sirvo un poco de zumo de naranja.

"¡Ya vamos!", gritan los dos al mismo tiempo.

Veo que preparaste la cena, dice una voz que conozco perfectamente bajando las escaleras.

Yo solo asiento en respuesta y me dirijo al cuarto de lavado, sacando la ropa de los niños de la secadora. Cuando esa voz se hace presente.

"¿Vas a seguir ignorando lo que pasa?" dice un poco molesta.

Caminé lejos para ver a los niños ya en la mesa discutiendo sobre qué caricatura es mejor, si "Hora de aventura" o "The Owl House". Interrumpí su conversación para decirles que...

"Niños, ustedes están mal, peleando por cosas pequeñas. Pero en mi opinión, 'Hora de aventura' es mejor", digo con orgullo.

"Ja, lo sabía", dice Alec.

"Oh, qué mal", dice mi hija.

"Pero los dos son muy buenas series después de todo", digo revolviendo sus cabellos.

Ella se fue porque la ignoré, soltó un bufido molesto y se fue con su plato de comida en la mano. No pude evitar sentir una punzada en el pecho.

¿No debería sentirme así?...

Me empezaba a sentir mal, después no supe qué pasó. Pasó tan rápido que no me di cuenta de que me caí.

Sentía algo líquido y cálido recorrer mi cabeza y cara. No podía ver nada, solo manchas borrosas.

Solo caras desconocidas...

Solo recuerdo estar con Alec y Dany en la mesa... Y un estruendo captó nuestra atención...

Están invadiendo la casa...

Gritos, golpes, sangre, policías y ambulancias fueron lo único que recuerdo. Recuerdo estar en una cama de hospital...

Lo demás era borroso...

Pov Amity

En medio de la confusión, los gritos y el caos, me encontré atrapada en un torbellino de emociones. La invasión en la casa desató una tormenta de violencia que cambió mi mundo en un parpadeo.

Las manchas borrosas en mi memoria se convirtieron en imágenes más claras. El líquido cálido en mi cabeza y cara era sangre, y las caras desconocidas eran paramédicos y personal de emergencia. Las manchas en mi visión eran lágrimas que no podía controlar.

"¿Amity Blight?", escuché una voz a lo lejos mientras era llevada a una ambulancia.

La frase resonaba en mi cabeza: "que sentencia tengo que pasar para que Tú me ames, que tengo que hacer.."

Ingresé al hospital, envuelta en un manto de incertidumbre. Las pruebas médicas y las luces brillantes mezclaban el dolor físico con el tormento emocional. Mis pensamientos se centraban en los niños, Alec y Dany, y en la mujer que alguna vez amé.

La noticia de que la invasión había sido obra de un grupo violento que buscaba venganza por asuntos pasados se convirtió en un eco lejano en mi mente aturdida. Mientras los médicos trataban mis heridas, mi corazón latía con la preocupación por los pequeños que ahora dependían de mí.

A lo lejos, pude escuchar a Alec y Dany, preocupados y confundidos, preguntando por su madre. Las lágrimas caían silenciosas, ocultas entre los vendajes y la penumbra de la habitación del hospital.

La noche se alargó, llevándose consigo susurros de tragedia. Mis pensamientos se mezclaban entre el pasado y el presente, entre la angustia y la esperanza. A pesar de todo, la promesa de proteger a aquellos a quienes amaba se mantenía firme en mi corazón dolorido.

La tormenta en mi interior reflejaba la oscuridad que acechaba en la realidad. En ese hospital, entre la fragilidad de mi cuerpo y la fuerza de mi determinación, me enfrentaba a un nuevo capítulo, donde el amor y la protección serían mi brújula en la oscuridad incierta que se extendía ante mí.