El pasado duele, es un lastre que nunca dejamos de llevar. Yo le creí que me amaba, nunca abrigué la más mínima duda sobre ello. Pero la vida es maestra en dar giros inesperados, y aquí nos encontramos.
Así que es cierto -dije con un suspiro, hundié...
La realidad del hospital se mezclaba con la ficción del set de grabación. Entre líneas de guion y la presencia encantadora de Luz Noceda como enfermera, el contraste entre la realidad y la fantasía se volvía borroso. Los calambres en mi cuerpo no ayudaban, pero al menos, detrás de cámaras, encontraba una distracción tentadora.
Staff: Amity, necesito que te concentres en tus líneas.
Amity: no te preocupes, mi querido amigo, no se me va a olvidar nada. Los tengo aquí en mi cabeza.
Staff: Ajá... Y Luz, no quiero verte besos y besos con Amity detrás del camerino.
Luz: No, no, no lo haré, mi querido staff. (Oh, claro que lo haré)
Producción: Escena de la enfermera, por favor.
Staff: Amity se encontraba en la cama de aquel triste hospital cuando de repente un dinosaurio se la come... ¿Qué... quién cambió el guión?
Risitas
Staff: Viney, deja de cambiar guión.
Viney: ¿Ahora qué hice?
Staff: ¿Cambiaste el guión?
Viney: ¿Por quién me tomas, viejo?
Staff: Perdón, Viney, yo... ¡Dejen de besarse detrás del camerino, Luz y Amity!
Ambas: Está bien.
Staff: No puede ser, son peores que los niños pequeños de la guardería. ¡Hey, tú! Sí, tú. Ya sé que estás pensando, esto es un desastre, y sí, lo es. Pero después de todo, nos divertimos, aunque muchas veces pasa...
Dejen de hacer caras a la cámara, por un demonio.
Amity: No hicimos nada, idiota.
Staff: Hija de...
-Problemas técnicos-
Lo siento chicos, los de producción y el staff estamos teniendo problemas técnicos...
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Los problemas técnicos dejaron a todos en el set en un caos momentáneo. Luz y yo, atrapadas entre líneas de guion y la realidad del hospital, compartíamos miradas cómplices. Mientras el staff intentaba resolver las dificultades técnicas, aprovechamos el breve respiro para relajarnos.
Luz: ¿Estás bien, Amity?
Amity: Sí, solo unos calambres. Nada importante. Pero, ¿y tú? ¿Cómo te sientes?
Luz: Preocupada, pero contigo aquí, al menos estoy un poco más tranquila.
Amity: Gracias, Luz. Aprecio que estés aquí.
La producción logró resolver los problemas técnicos, y el set volvió a la actividad. Las cámaras se encendieron, y retomamos nuestras escenas en el hospital.
Staff: ¡Acción!
La escena continuó, pero la conexión entre Luz y yo se sentía diferente, como si la pausa nos hubiera dado un espacio para reflexionar. La ficción y la realidad se entrelazaban, y a veces, las líneas entre ellas se desdibujaban.
Staff: Corte. Muy bien, chicos. Sigamos con la siguiente escena.
En ese momento, Viney aprovechó para lanzar otra de sus bromas.
Viney: ¿Quién necesita dinosaurios en la trama cuando ya tenemos suficiente drama detrás de cámaras?
Risas compartidas se mezclaron con la confusión y el caos habitual en el set. Luz y yo intercambiamos sonrisas, reconociendo la ironía de la situación. La vida tras bambalinas siempre traía sorpresas inesperadas.
El rodaje continuó, y mientras representábamos nuestros papeles en la historia ficticia, la realidad nos recordaba que cada momento compartido, ya sea en el hospital o en el set, creaba lazos que trascendían la pantalla y dejaban huellas imborrables. Entre bastidores y revelaciones inesperadas, la trama de nuestras vidas seguía escribiéndose en cada escena.
