×3×

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Un fuerte ruido despertó a Tom. No sabía muy bien de donde venía, pero sabía que no era de dentro de su apartamento. Más adelante escuchó unos pasos hacia la planta baja de la casa así que simplemente pasó del tema. Se levantó del sofá y subió las escaleras hacia su habitación. Antes de entrar, echo una ojeada en la otra habitación donde pudo divisar 2 bultos en la cama, suponiendo que eran Edd y Matt. Volviendo a su habitación y cerrando la puerta de su habitación subió las escaleras al altillo y se tiró encima de la cama, sin cambiarse de ropa ni arroparse con las sábanas; simplemente se quedó bocabajo y cerró los ojos.

Cuando volvió a abrir los ojos, pudo ver el cielo azul por la ventanilla del tejado dando a entender que ya amaneció. Paso su mano por la cara y la miro, estaba mojada.

—Que asco de calor— se dijo a sí mismo.

La camiseta que llevaba estaba empapada de sudor y se le pegaba en la piel. Disgustado por esa sensación, se quitó la prenda y la echó a un lado junto con los pantalones. Acto seguido, bajó y fue al baño a darse una ducha.
No tardó más de 20 minutos y bajó a la cocina donde se encontró con Edd y Matt quienes estaban desayunando.

—Buenos días dormilón— le saludó Edd mientras masticaba un trozo de tostada.

—¿A que hora llegasteis ayer?

—No recuerdo pero cuando llegamos tu estabas sopado en el sofá así que te dejamos dormir— le respondió Matt.

Tom se acercó a la cocina. Se preparó un café y unas tostadas para luego sentarse con los otros dos.

—Primer día... ¿Que queréis hacer?— preguntó el de sudadera verde.

—Me da igual— respondieron los otros en unísono.

—No ayudáis chicos.

—¿Encontrasteis algo más en el pueblo?

—No mucho más de lo que vimos nada más llegar— comentó el pelinaranja.— Hablamos con algunos del pueblo y nos enteramos de que hay otros pueblos por la zona pero no mucho más.

—También nos dijeron que a unos 30 minutos está la ciudad— añadió Edd.

—¿Que os parece si vamos a un centro comercial?— propuso el castaño.— Si hay ciudad, hay centro comercial.

Los otros dos chicos les pareció buena idea, así que terminaron de desayunar y se prepararon para salir. Cerraron su apartamento con llave. Mientras caminaban hacía la salida, escucharon la voz del propietario. Estaba hablando con otra persona.

—Serán los inquilinos que venían hoy— dijo Edd, recordando lo que les dijo ayer.

Los chicos salieron y fueron a por su coche. No vieron con quien hablaba el propietario, pero si vieron el todoterreno aparcado a un lado de la calle con otras dos personas metidas dentro.

No tardaron en llegar a su destino. Frente a ellos se alzaba un gran edificio, muy moderno.

—¿Por donde empezamos?— preguntó Edd.

—¡Vayamos a mirar tiendas!— exclamó Matt mientras corría hacía la entrada, seguido de Edd.

—Ojalá no fuera la tercera rueda— se dijo Tom a si mismo mientras seguía a los otros dos tortolitos.

Miraron tiendas, picaron algunos tentempiés, jugaron un rato en el arcade e incluso echaron una carrera en los carts (obviamente Tom siendo el ganador).

—¿Porque tengo que conducir yo si tu eres mejor?—le preguntó el de sudadera verde mientras se quitaba el casco.

—Porque siempre me dejas atrás con todos los tratos— le respondió el de cuencas vacías.

—Pues de vuelta al apartamento conduces tú.

—Pero-

—Nah, nah. No hay peros. Conduces tú— obligó Edd mientras corría hacía Matt para darle un abrazo.

Tom no pudo decir nada en contra.
De vuelta al auto, los dos tortolitos se sentaron en la parte trasera mientras que Tom se sentaba en el asiento del conductor.

—¿Porqué no te sientas conmigo en el asiento de copiloto Matt?

—Porque quiero estar con Edd— respondió este mientras se acurrucaba con el mencionado.

—Traición— dijo Tom por lo bajo.

—Si fuera Tord hubie-

Edd le metió un codazo al otro antes de que pudiera terminar la frase.—Vámonos.

Cuando llegaron vieron el todoterreno aún aparcado en el lado de la calle. Justo en el momento oportuno, el propietario mandó un mensaje a Edd avisandoles que los otros inquilinos ya estaban en la casa también.
Nada más entraron y escucharon unas risas provenientes del comedor común en la planta baja.

—Vayamos a saludar— sugirió Edd.

—Id vosotros— dijo Tom.— Yo voy a tumbarme un rato. Llamadme cuando vayáis a cenar.

Acto seguido Tom se adentro en el apartamento mientras que los otros dos bajaron al comedor.
Tom se tiró en el sofá y encendió la televisión. Las palabras de Matt aún seguían en su cabeza.
"Si fuera Tord hubieras hecho lo mismo". No se lo negaba, le echaba de menos. Queria verlo, abrazarlo, besarlo... tocarlo. Suspiró. Después de meses y aún pensaba en eso.
Un ruido en la puerta le sacó de su trance.

—¡TOM!— era Edd.— Vamos a cenar anda. Baja.

—¡Voy!

Apagó la televisión, se levantó y abrió la puerta. Escucho como la puerta de en frente se abrió a la vez. Miro solo por puro sentido y se quedó perplejo. ¿Acaso alguien escuchó sus pensamientos de hace un momento? En frente de el se encontraba Tord; con su mítico peinado, una camiseta blanca y pantalones cortos. Estaba bostezando mientras abría la puerta, pero su cara cambio nada más ver a Tom.
Sin pensarlo dos veces, el de cuernos se volvió a meter en el apartamento y agarró la puerta para cerrarla. Tom no se quedó quieto y por impulso metió su pie de por medio, intentando evitar que la puerta se cerrara; aunque no lo consiguió.

—¡MI PIE IMBECIL!—gritó Tom mientras lo quitaba de la puerta y lo agarraba.

—¡TU CULPA POR PONERLO ALLÍ!—respondió el otro.

Por un momento Tom pensó que era un sueño el echo de que el otro estuviera allí, pero al escuchar su voz sabía que no era así. Eso era real.

—¡PORQUE SABÍA QUE SI NO PONÍA MI PIE ACABARIAS CERRANDOLA Y NO ABRIENDOLA HASTA VETE TU A SABER CUANDO!—respondió el otro.

—¡PERO ES TU CULPA. YO NO PEDÍ QUE METIERAS TU PIE ALLÍ!

—SIGUES IGUAL DE IMBÉCIL QUE SIEMPRE

—Y TÚ IGUAL DE METICHE. ¡LURE!¡BOKMÅL!

—¿Que esta pasando aquí?— preguntó Edd subiendo las escaleras junto con Patrick.

La escena era puro show. Un Tom tirado en el suelo, gritando, mientras se agarraba el pie; y Tord devolviendo los gritos pero en noruego desde el otro lado de la puerta.

—Creo que deberíamos haber pensado en llamarlos por separado— dijo Patrick mientras se llevaba la mano a la cara.

—Toda la razón...—afirmó Edd.

Vaaaleeee
Porfin subí el cap. Soy un desastre perdónenme. Tenía el capítulo terminado desde hace ya un més y antes de entrar en periodo de exámenes "lo publiqué"... o eso es lo q pensé :(
Fui despistada y en vez de publicar le dí a guardar. Pero weno.... Ya hay cap :D
Perdonen x la demora :'(
Ya estoy en marcha con el siguiente cap

「Nos vemos de nuevo」 -   Tomtord - 2° temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora