¿Quién soy?

Capitulo 4

Existe una fina linea que separa la realidad de la ficción, esa linea es lo que mundanamente llamamos cordura. Ciertamente aunque la línea es muy fina existe mucha diferencia entre una y otra, tanto que no son ni meramente parecidas.

Los humanos nos empeñamos en buscar maneras de distraernos para escapar de la realidad que son nuestros problemas, preferimos huir antes que enfrentarlos, sin reparar en el hecho que escapar de la realidad no te hace olvidar ni arreglar nada.

"La vida… ¿Que es la vida? ¿Es tan solo la mera existencia de los seres vivos? o ¿hay algo más? ¿La vida es una simple serie de sucesos? ¿Qué es?

La vida no tiene una definición y sinceramente no creo que nadie este cerca de darle una.

Te haz preguntado alguna vez ¿quien eres en realidad? Esa, es una pregunta que nadie se a llegado a responder.
Reflexionar hace bien, mas cuando se trata de reflexionar sobre ti mismo, porque te hace conseguir respuestas a cosas que antes no tenías idea que podías responder, descubrir dentro de tí todo lo que aún no sabes, cosas escondidas que quieren salir a la luz, descubrir tu verdadero yo.

Las personas suelen creer y hacerse una idea errónea de la felicidad, pero no saben lo que esta realmente significa. En algún punto de tu vida te detienes a pensar y te das cuenta de que algo como la completa felicidad no existe, si, hay pequeños momentos felices, pero eso no garantiza felicidad absoluta para toda la vida. Ser feliz es un tesoro, uno muy valioso. Ser feliz no dura para siempre, porque nada lo hace, es algo efímero, pero aunque lo sea, tener al menos un gramo de felicidad hace que te sientas... vivo."

Había pasado todo lo que restaba del día leyendo este libro, al principio no me había parecido muy interesante, siendo sincera, solo la fuerza de voluntad me hizo seguirlo, pero es muy real el dicho que reza “No juzgues un libro por su portada" y fue muy divertido pensar eso, ya que casualmente Cassie tomó ese libro porque tenía una portada bonita.

En cuanto al contenido del libro, puedo resumir que la historia habla sobre la búsqueda, buscar lo que en realidad eres y no lo que piensas que eres.

Leer allí sentada en mi ventana, y disfrutar la hermosa vista del otoño me llenaba de una enorme paz. Tan solo había leído dos capítulos, porque este libro era extremadamente largo, era muy pesado, pero esos simples dos capítulo habían llenado mi sed de lectura. Recordé entonces aquel pequeño párrafo que me había encantado y no salía de mi mente.

“Somos humanos, ninguno de nosotros nacimos con la capacidad de ser perfectos, todos cometemos errores. Nadie es ni será completamente superior, siempre habrá un pequeño defecto en nosotros, al menos eso dicen. Pero yo pensaba diferente, porque siempre hay una pequeña perfección en la imperfección"

Y eso era, totalmente cierto, a pesar de que nadie es perfecto, nuestras imperfecciones y errores crean su propia perfección. Eso lo sabía, pero a pesar de eso no me sentía bien conmigo misma.

Estaba ahí, acostada en mi cama, en el silencio que produce mi habitación al estar sola. Solo yo, allí, pasando cada página de ese libro, leyendo todas esas letras impresas en papel, esas hermosas frases que llegan al alma.

Solo yo y ese libro.

Estos últimos días me había sentido un poco mejor a comparación de días anteriores, estar aqui leyendo este libro, pequeño físicamente pero muy grande en contenido, me hacía reflexionar y meditar mucho, pero no de una manera caótica como lo hacía antes, ya saben, pensando horribles maneras de morir; este libro me hacía darme cuenta que la vida que pensé era perfecta, no lo era para nada. Y de cierta manera que parecería retorcida, eso me daba alegría, porque esa vida que yo creía maravillosa y mía, era de todo menos eso.