𝑨 𝒕𝒓𝒂𝒗𝒆́𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒂𝒔 𝒆𝒔𝒕𝒓𝒆𝒍𝒍𝒂𝒔

"La De aquí y la del mas allá II"

- ¡Será burro!

- Ginny…

- ¡No le defiendas!- Ginny se paseaba de un extremo al otro de la habitación, con los ojos echando chispas.- ¿Cómo pudo…? ¿Cómo?

- Es más complicado de lo que parece, créeme.

- ¡Pues yo no veo la complejidad!- Se paró en seco y lo miró, sentado en el sofá observándola cómo iba de aquí a allá.- En serio, ¿es que no tenía dos dedos de frente? Liarse con Lavender Brown… ¡Mi hermano no tiene remedio!

- Me estoy empezando a arrepentir de haberte enseñado nada…

- No, no.- Se apresuró a decir sentándose a su lado y hablando con una voz mucho más calmada.- El recuerdo me ha encantado, de verdad…- Ginny acercó su cara a la suya lentamente.- ¡Pero es que Ron es un idiota!

Harry suspiró al ver cómo Ginny se separaba de él y, poniéndose de pie, volvía a comenzar a recorrer el cuarto mientras maldecía a su hermano.

- Pasaron cosas que… bueno, provocaron que se diera esa situación.

- ¡Ja! Cosas… ¿Se puede saber qué cosa pasó para que Ron decidiera hacer el estúpido de esa manera con Lavender?

- ¿La verdad?- Ginny le miraba expectante.- Pues… tú.

- ¿Yo? ¿Qué culpa tengo yo de las decisiones que toma mi hermano?

- Si te sientas y te calmas quizá pueda contártelo.

- Lo siento…

Ginny se desplomó en el sofá y se puso cómoda, esperando a que Harry, una vez más, le contase lo que iba a pasar en el futuro. Desde luego tenía que decirle una muy buena excusa por la cual Ron decidiera liarse con la estúpida de Lavender Brown. Si su madre escuchara su vocabulario… ¡Pero era verdad! Nunca les había visto hablando y ahora se tenía que enterar que su querido hermanito había decidido darse el lote con ella por todos los rincones de Hogwarts. Y ni siquiera quería ponerse a pensar en cómo debió sentirse Hermione en ese momento…

Harry se acomodó también al lado de ella y le sonrió. Tenía la sonrisa más maravillosa que había visto nunca y se la estaba dedicando sólo a ella. Todavía cruzaban por su cabeza la imagen de ellos dos besándose en la cama de Harry dentro del recuerdo del chico. Era tan extraño y a la vez maravilloso ver aquellas imágenes… "¡Céntrate, Ginny! Ahora es momento de pensar en Ron…"

- Con lo que voy a contarte no quiero decir que lo que pasó fue culpa tuya, pero… sí que tuviste algo que ver en cierto modo.

- ¿Qué hice?

- ¿Te acuerdas que antes te he dicho que me empecé a dar cuenta de lo que sentía por ti porque te vi besándote con Dean?

- Sí…- Salió de su boca una risita nerviosa. ¿Cómo se suponía que iba a mirar ahora a Dean sabiendo lo que sabía?

- Pues… no sólo te vi yo, Ron también y ya sabes cómo es tu hermano, le sentó mal veros en esa situación.

- Sigo sin entender qué tiene que ver eso con que Ron y Lavender se coman los morros dentro de dos años.

- Empezasteis a discutir por lo que debías o no debías hacer con los chicos y tu le gritaste que lo que a él le molestaba era que tenía menos experiencia que un crío de trece año… ¿o era de doce?- Harry se rascó la cabeza intentando recordar.- Ya no me acuerdo. El caso es que le dijiste cosas como esa o como que yo ya me había besado con Cho o que Hermione ya se había besado con… Viktor Krum.

- ¡¿Hermione va a besar a Vicktor Krum!?

Ginny estaba emocionada y feliz. Deseaba que Ron se fijase en Hermione, pero si eso no pasaba… No tenía nada de malo que su amiga buscase nuevas posibilidades. Y Viktor Krum era algo más que una posibilidad. Era famoso, atractivo y, por las cosas que le había contado Hermione, muy dulce. El primer beso de su amiga… ¡no podía creérselo!