26. No te quiero perder

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Un rato después, Liam había llevado a Alexander a su habitación para darle de comer y acostarlo. Riley salió de la cocina, medio sonriendo para sí misma mientras tomaba un sorbo de su bebida. Liam salió de la habitación de Alexander y el olor le llamó la atención de inmediato. Miró mientras él entraba en la sala de estar y se sentó a su lado mirando la taza en su mano con curiosidad. Ella se lo entregó sin decir una palabra. Liam se llevó la taza caliente a los labios y ese sabor familiar lo recorrió.

Miró a Riley durante un largo momento.

|| Tú... ¿Tú hiciste el chocolate caliente de mi madre? ||

Ella asintió.

|| Yo... estaba en la tienda el otro día... después de encontrar la receta que dejaste aquí... así que agarré los ingredientes y la hice... No lo arruiné, ¿verdad? ||

Liam sonrió suavemente mientras la miraba.

|| No... || Susurró mientras ella negaba con la cabeza || Es perfecto || Le devolvió la taza.

|| Hay más... si quieres un poco || Ella misma tomó un sorbo y bajó la taza dejándola sobre la mesa, Liam la miro y se rio entre dientes por el bigote crema batida que ahora cubría su labio superior || ¿Qué? ||

|| Tienes... || Guardo silencio mientras se reía suavemente y se inclinaba más cerca de ella. Ella lo miró sin romper el contacto visual, su corazón se aceleró cuando su pulgar pasó suavemente por su labio, limpiando los restos de la crema batida.

Ella tragó saliva mientras él continuaba mirándola.

|| Este... Iré a buscarte un poco || Ella se levantó abruptamente del sofá y Liam cerró los ojos por un momento. Se llevó el pulgar a los labios y limpio la crema batida que estaba en él. Riley regresó un momento después y le entregó a Liam su taza.

|| Gracias || Ella asintió con la cabeza antes de girarse y recoger la caja vacía y el envoltorio del regalo de Alexander.

Riley caminó detrás de la silla en la esquina de la sala de estar y sacó una caja de tamaño mediano que estaba llena de regalos envueltos, la deslizó hacia el árbol de Navidad y se arrodillo acomodando los regalos debajo del árbol. Liam bebió su chocolate caliente un par de veces antes de dejar la taza y levantarse del sofá, camino hacia una de las maletas que trajo y se acercó dónde Riley, arrodillándose a su lado abriéndola. Riley lo miró y lo vio sacar los regalos que estaban dentro y deslizarlos debajo del árbol. Miró hacia abajo mirando los regalos que ella deslizaba debajo del árbol, la mayoría de ellos etiquetados para Alexander, luego también para Leo, Celeste y Sebastián. Él le sonrió mientras él terminaba de poner los suyos debajo del árbol.

Riley sacó el último obsequio, era una caja rectangular pequeña del fondo de la caja. Miró a Liam mientras la sostenía en su mano.

|| Tengo... quiero decir, Alexander... tiene un regalo para ti... ||

Él la miró antes de tomar el regalo de ella.

|| ¿Quieres que lo abra ahora? ||

|| Puede ser... si quieres || Se encogió de hombros || Él no va a saber y no se lo voy a contar tampoco || Y se rio entre dientes.

Liam la miró con una pequeña sonrisa sacudiendo la cabeza. Desenvolvió la caja y levantó la pequeña tapa, dentro habían un par de boletos. Él los levantó, leyéndolos antes de mirarla con una sonrisa.

|| ¿Me compraste boletos para The Met? ||

|| Alexander pensó que te gustaría ir... y ver a Macbeth... || Miró hacia un lado y abajo por un momento.

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