CUANDO EL SOL Y LA LUNA SE UNEN - Akaza × Rengoku +18

Capítulo 71 - Hakuji

Los tres se quedaron allí en una habitación que Yushiro les preparó, Senjuro no dejaba de mirar a Hakuji, realmente parecía alguien distinto, no tenía esa presencia llena de ira y tristeza que siempre tenía.

Hakuji, ¿has recordado todo tu pasado? - le preguntó Senjuro.
Sí, Senjuro - le dijo tumbándose a un lado del futón donde estaban Senjuro y Kyojuro tumbados.
¿Quieres hablar sobre ello? - Senjuro buscaba distraerse, no dejaba de pensar en Kyojuro y tenía que hablar de algo para poder dormir.
No sé si te va a gustar mi historia, mi vida era muy triste - le dijo sonriéndole.
No importa, quiero escucharte - le insistió Senjuro.
A ver... - Hakuji cerró los ojos - recuerdo que era muy pobre, vivía con mi padre en una cabaña muy pequeña y él estaba enfermo, tenía un problema de espalda por el que no podía moverse, así que no trabajaba y no teníamos dinero - Senjuro lo miró apenado - cuando cumplí 11 años había ya robado muchas veces para conseguir dinero para comida y medicinas, pero me acabaron pillando - Hakuji miró su brazo - estas marcas eran los tatuajes que se les ponía a criminales como yo, estábamos marcados por la sociedad. Tenía la espalda llena de heridas y me dolían los brazos por las posiciones en las que ponían a los criminales. Cuando volví a casa después de que me capturasen por última vez mi padre se había suicidado, dijo que era una carga para mí y yo no lo entendí, las personas enfermas siempre se disculpan, cuando ellos mismos son los que más sufren de estar enfermos... yo solo quería una vida normal. Pasé años viviendo en las calles como podía, había gente que me quería pegar solo por llevar los tatuajes o por mirarlos, era horrible. Me llamaban niño demonio por tener los colmillos largos... el mundo podía irse a la mierda, podían joderse todos - dijo suspirando - pero entonces apareció él... Keizo era increíble, le gustó cómo luchaba, su técnica en la batalla consiguió herirme sin que yo lo tocase siquiera. Era maravilloso. Me dejó hecho una mierda con su técnica soryu y me desmayé. Entonces desperté en su dojo y me tomó como aprendiz, me confío la vida de su hija para que la cuidase, me dio una oportunidad de vivir honestamente - Hakuji sonrió al recordar a Koyuki - incluso su hermosa hija quiso casarse conmigo, un criminal. Después de años de cuidarla ella empezó a sanarse... pero la vida en realidad nunca me dio nada, solo quería quitarme todo - Senjuro miró atentamente a Hakuji - yo juré protegerla y hacerme más fuerte, pero el dojo de al lado quería quedarse con el nuestro... un día salí a visitar la tumba de mi padre y cuando regresé habían envenenado a Keizo y a Koyuki... ya no me quedaba nada que proteger, todo por lo que había luchado se desvaneció por gente débil que no podía simplemente luchar por lo que quería - los ojos de Hakuji se llenaron de lágrimas - estaba tan furioso que maté a las 67 personas del dojo vecino con las manos... y aún así no me sentí bien, la venganza nunca me devolvió a mi familia. Cuando salí después de haberlos matado Muzan me encontró y me dijo que quería que fuera una de sus poderosas 12 Lunas, intenté enfrentarme a él pero me convirtió de un fuerte golpe y perdí mis recuerdos - Hakuji se giró para mirar a Senjuro - he pasado 115 años matando a gente solo por el deseo de hacerme más fuerte, y no he cumplido ni una sola de mis promesas... es una historia patética, cómica y aburrida.

Senjuro no sabía qué decir, la vida había tratado como una mierda a Hakuji, ni siquiera pudo decidir si convertirse o no en demonio, igual que Kyojuro. Se giró y se acostó pensando en cómo debía sentirse, era horrible.