"Enamorando a un mafioso" {Trilogía: Corazones malheridos} Libro I

Emborrachando a un mafioso

Capítulo XXVIII

- ¿Por que eres tan guapo? –Logan rueda los ojos cansado de mi pregunta repetida por decimosexta vez. Se siente tan libre estar ebria, es como si no te importara nada. Se que mañana voy a desear meterme en una bolsita y lanzarme al mar pero por ahora voy a disfrutar el momento de torturar a mi espina en el trasero.

- No soy guapo pequeña, soy peligroso y lo verás muy pronto –sonrío a pesar de que mi cuerpo por alguna razón se tensa ante mis palabras

Miro por la ventanilla, siento mis ojos comenzar a cerrarse, pero no quiero dormirme, no quiero despertar a altas horas de la mañana y morir de vergüenza porque Logan no estará a mi lado. Así que me entretengo jugando con mis pies. Comienzo a sentir una profunda calor, inconscientemente me quito el suéter que llevaba y lo dejo sobre mis piernas, aparto mi cabello dejando mis chichis con sujetador a la vista del lobo que clava sus ojos en mí.

- Podías haberme pedido que bajara la calefacción –comenta nervioso regresando su vista a la carretera

- Menos palabras y más acción –sonrío- De todos modos no es nada que te sorprenda, no son como las de la morena –lanzo la indirecta

- Para ya con eso, ¿por qué estás celosa después de tus miraditas con Ethan? –abro la boca en forma de O

- ¿Disculpa? –hablo indignada- Ethan y yo somos amigos, pero al parecer piensas que cada hombre que se me acerca solo busca meterse entre mis piernas

- Es exactamente lo que pienso, ¿es necesario siempre discutir cuando no te estoy follando? –me pongo como tomate apachurrado ante sus palabras y golpeo su hombro

- Cretino –suelto rendida

Mientras aún vamos por la carretera oscura, comienzo a sentirme un poco mareada, unas enormes nauseas me invaden y llevo la mano a mi estómago, al darse cuenta Logan detiene el auto a borde de la carretera y me mira un poco preocupado mientras un malestar u jamás había sentido antes me hace recostarme más en el asiento.

- Te ves pálida, te encuentras bien? –pone un mechón de mi cabello detrás de mi oreja

- No, me siento horrible, tengo nauseas –“Porque no quiero que me veas vomitar”- Necesito un poco de aire –salimos del auto

Como si ya no fuera suficiente mi patética apariencia, camino hasta el centro de la carretera y me acuesto ahí con la vista fija en el cielo estrellado.

- ¿Ángela qué demonios haces?, puede venir un auto –se acerca y me mira desde arriba

- ¡Ho vamos, como si jamás hubieras mirado lo hermoso que se ve el cielo cuando no estás en la ciudad! –levanto una ceja

- En realidad hay cosas más importantes que hacer –se sienta a mi lado

- Ven –palpo el suelo y después de analizar esa opción repetidas veces con la mirada se rinde ante  mis deseos

- Dos polos opuestos mirando las estrellas, se siente bien –ya no sé ni lo que digo

- Cuando creo que ya estás lo bastante loca para amarme, haces cosas como estas y…se siente bien estar ahí cuando cometes locuras –sonrío y miro su hermoso perfil, sus tatuajes, su pecho subiendo y bajando con calma, suelto un suspiro para mí.

- Estoy constantemente cayendo hacia cualquier oscuridd infernal, cuando no quieres ser bueno es difícil no dañar a los que sí lo son –sus ojos brillantes se encuentran con los míos

- Entonces déjame caer a tu lado y quemarnos juntos en el mismo infierno –el sonríe

- Saldrás corriendo algún día, lo único que me mortifica es que cuando eso pase, estarás tan enamorada de mí que te costará superarlo y…no quiero que sufras –frunzo el seño ante su arrogancia desmedida

- Mejor ni te respondo –me levanto y regreso al auto.

El resto del camino fue en total silencio, al llegar al edificio no dudé en entrar disparada sin siquiera esperarlo mientras hablaba con los guardias. Al entrar lo primero que hice fue beber mucha agua, ¡Diooos esto se siente tan bien, estaba muriendo de sed!

Al reponer todas mis fuerzas y rellenar mi vejiga de líquido, decido ir al baño y me libero sintiendo un gran alivio. El alcohol me hace describir con demasiados detalles. Hago pequeños pasos de bailes relajada dirigiéndome al salón. Pero una pared de músculos me detiene, miro hacia arriba y sonrío juguetona.

- ¿Quieres beber conmigo? –pregunto y levanta una ceja

- ¿Qué quieres conseguir con eso? –pregunta con sonrisa juguetona y veo el brillo en sus ojos

- Tal vez solo quiero más tiempo antes de que mañana me despierte sin dignidad y no me mires en una semana –me sincero

- De acuerdo –me da la espalda y veo que trae consigo una botella de vodka- ¿Quieres beber no? –pregunta y asiento- Entonces deberás ganarme en una partida cartas –sonrío

- ¿Quieres perder? –pregunto

- Cada tanto que ganes yo bebo un trago

- Me gusta esa idea

Cómo era de esperarse, tras tensiones, gritos y saltos le gano dos partidas. Se que soy ben, pero también se que Logan es inteligente y me da la ligera impresión de que le ha gustado que yo gane. Sus ojos están un poco rojos pero aún sigue manteniéndose en pié

- Se necesita más que eso para embriagarme angelito –habla con la voz un poco extraña- Muero de hambre –habla de momento

- No está nana aquí ahora –me lanzo al sofá suspirando

- Vallamos a comer fuera –se levanta y me jala por la mano

- Salimos sin importar la frialdad de la noche y corremos como si fuéramos niños pequeños. Y ahí, disfrutando de mi primer y único amor me di cuenta de que amaría todos los días de mi vida a su lado aún si él fuera una patada en el trasero o un grano en el…el punto es que lo amo.

Llegamos a un puesto de hamburguesas abierto en medio de la madrugada, pedimos y la espera no parece demasiado entre las estupideces que digo y sus carcajadas. Cuando nos entregan el pedido, el fuerte sonido de las ruedas de un auto arrastrarse contra el asfalto llama nuestra atención. Una camioneta negra de la cual se asoma un ttipo por una ventanilla y nos apunta...

- ¡Agachate! -grita Logan sacando su arma y moviéndome para que corramos. Los disparos sonoros hacen que se escuchen algunos gritos provenientes de las casas.

- ¡Aaaa! -grito al sentir un ardor en mi piel justo en mi brazo, me cubro con las manos y logramos escabullirnos por un callejón. Nos detenemos agitados, miro mi brazo retirando mis manos y al ver la sangre salir de él, junto con el efecto de los tragos miro a Logan y veo como se oscurece todo para no saber nada más de mí.

No se ustedes pero yo amé escribir este capítulo, ¿Que les pareció?¿Amerita o no comentarios?
🥺🥰🥺