Boda

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Capítulo XLII

Logan

Unas horas antes...

- ¡Quiero saber qué loco se atrevió esta vez a tomar mi mercancía! -entro gritando a mi despacho, a sólo unas horas de unirme a la mujer que amo y heme aquí recogiendo la mierda que dejan estos buenos para nada.a

- No lo sabemos señor, estaban enmascarados, pero algunos de los hombres heridos han mencionado haber escuchado la voz de una mujer -baja la cabeza aterrado y mi entrecejo se arruga por la maldita duda de quién se ha declarado mi nueva enemiga.

Doy varias vueltas con un trago en la mano, mi amigo entra sin tocar y lo miro mal. Pero ambos sabemos que no es momento para discutir su mala educación.

- ¿Qué ha pasado? -pregunta despistado

- Una loca ha robado parte de la mercancía -peino mi cabello con mis manos y cierro los ojos mientras respiro para tranquilizar la rabia que me cargó por dentro.

- Te prometo que yo mismo me encargaré de encontrarla amigo, pero en este momento lo que necesitas es calmarte -Carlos pone una mano en mi hombro- Te casas en una horas y Ángela no puede verte así -da palmadas y asiento.

Tiene razón, necesito tranquilizarme.

- Señor, acaba de llegar el detective -anuncia uno de mis guardias

- Hazlo pasar -ordeno- Ustedes, ¡Fuera de aquí! -reprendo a los incompetentes que daban explicaciones

El hombre mayor trajeado de negro que siempre me ayuda con mis investigaciones a personas, atraviesa el umbral de la puerta con un sobre amarillo en una de sus manos y un maletín en la otra.

- Señor -extiende su mano en saludo a mi amigo y luego a mi, correspondo el salido para luego pedirle que tome asiento.

Una vez en el lugar pone frente a mí el sobre amarillo. Me mira un poco nervioso y lo agarro, abro con rapidez teniendo la sensación de que no va a gustarme lo que hay dentro. Unas fotos que al verlas me doy cuenta que son las chicas en un bar exclusivo de strippers. Mi mujer está ahí. La sangre de mis venas se calienta al ver más fotos de ellas bebiendo y bailando con esos imbéciles, incluso uno de ellos baila con mi chica con una de sus asquerosas manos en el cuerpo que solo me pertenece a mi. Me levanto de golpe y lanzó todo lo que encuentro.

- ¡Le dije que no fuera a la maldita despedida de soltera! -heist y me pegó directamente de la botella

- Amigo cálmate -intenta acercarse a mí y retrocedo, no quiero hacerle daño

- No hubieron actos prohibidos senor -dice el detective levantándose

- ¡Uno de ellos tocaba a mi mujer! -le grito- ¡Eso está jodidamente prohibido!¡Quiero sus datos, voy a cortarle las manos! -lanzo la botella

- ¡Logan tienes que calmarte! -Carlos se para delante de mí y trata de hacer que entre en razón.

Realmente estoy muy enojado, necesito descargar esto o será un día realmente largo. No puedo destruir el mejor día en la vida de mi pequeña traviesa, pero voy a buscar a ese imbécil y a darle su merecido en cuanto regrese de mi luna de miel.

...

Parado frente al altar, esperando a que mi hermosa futura esposa llegue, solo puedo pensar en todas las veces que la haré mía durante el resto de nuestras vidas. Quiero hacer tantas cosas con ella, no permitiré que viva una aburrida vida de casada, viajaremos por todo el jodido mundo y gritaré en cada esquina cuanto la amo.

Comienza una melodía de Wonderwall a sonar lentamente en el piano, es la canción que mi pequeña eligió. Le recuerda a su libro favorito. Y mi corazón comienza a latir de manera desenfrenada cuando la veo caminar hacia mí de la mano de su padre mientras dos hermosas pequeñas se adelantan dejando pétalos de rosas blancas por todo el césped. Decidí que nuestra boda fuera en la casa de la playa, en ese hermoso jardín que a ella le gusta.
Ángela viste un vestido diferente al que me mostró, este parece tener encajes en sus mangas y la espalda descubierta, cuando por fin llega a mi lado y su padre toma mi mano, acaricio su piel desnuda y la noto tensarse. Sonrío, sabe que no lo hubiera aprobado pero aún así, está hermosa. El vestido se pega a su cuerpo dándole forma y terminando en una larga cola que sus amigas dejan con delicadeza en el suelo.

El padre comienza a decir todas esas cosas que a nadie le interesan y me deleitó mirando a mi chica hasta el momento en que debo poner el anillo en su dedo. Sus manos tiemblan un poco, está nerviosa y una sonrisa fina delinea sus labios.

- Hace unos meses me pediste que me enamorara de ti, y creí que estabas loca -algunos se rien bajo incluso mi pequeña que se avergüenza y sus mejillas se tornan rosas- Pero...la desición más sabía que he tomado en mi vida ha sido enamorarme de ti, y quiero que tu voz sea esa melodía que necesito escuchar todos los días por el resto de mis días -dejo lentamente el anillo en sus dedos y veo sus ojos llenarse de lágrimas.

- Definitivamente no estaba loca -rie bajo- siempre te he amado y quiero estar ahí siempre que me necesites, jamás soltaré tu mano, y es una promesa -deja el anillo en mi dedo.

- Muy bien, por el poder que me concede nuestro señor, los declaró Marido y Mujer. Puede besarla...

En medio de los aplausos tomo su rostro entre mis manos y la beso, con delicadeza. Un beso suave, uno cargado de amor.

...

- Señora Roselli, ¿Me permite un baile? -le pregunto a mi mujer alejándola de esas personas

- Por supuesto, esposo -sonríe y deja un delicado beso en mis labios.

La tarde transcurre con normalidad, todos nos divertíamos y principalmente ella, yo solo esperaba impaciente a nuestra noche de bodas. Hasta que noté a ese imbécil mirando a mi chica que aún llevaba su vestido de novia. La toma de la mano y yo sin más espera camino a paso veloz hacia él.




Hola amores, en verdad lamento la espera, actualizaré hoy otro capítulo denme chance. Los amo. ¿Qué les parece la boda?
😏😏😏
S

i alcanzamos los 20 votos antes de las 2 publico el próximo más temprano de lo planeado.

"Enamorando a un mafioso" {Trilogía: Corazones malheridos} Libro IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora