Decadence

121 17 3
                                    

—Al parecer fue demasiado...—Murmuró Hongjoong sin un ápice de remordimiento.


Sentado en la cama observaba a Jung profundamente dormido; sonriendo con gracia al recordar su confesión amorosa.


—Realmente me gustas, Hongjoong.


Ahogó una risa y sus dedos inquietos fueron a parar a los labios del chico, acariciando toda su extensión; húmeda, suave. Realmente comenzaba a tener una fijación por esa boca.


—Ya veremos si te sigo gustando, niño.— Susurró cada vez más cerca de su rostro, con la tentación de seguir devorando su esencia hasta que un sonido deslizante y la brisa fría de la madrugada llenaron la habitación. Ahí, sentado en el marco de la ventana, ahora abierta, estaba Mingi.


Hongjoong se incorporó lentamente con una sonrisa de oreja a oreja.



—¿Los sentiste?— Preguntó el pelirrojo



—Ni siquiera se tomaron la molestia de ocultarse.— Musitó.



—¿Dónde están los demás?



—Abajo.




—¡Perfecto! Parece que algunos amigos se animaron a salir de la cloaca.— Enunció Hongjoong con entusiasmo, Mingi imitó su gesto y ambos dejaron el departamento en total oscuridad y silencio.




...




Wooyoung abrió sus ojos pesadamente observando el tono cenizo del techo, con la sensación inmediata de la fatiga estremeciendo cada centímetro de su cuerpo.



Tienes anemia.— Dijo la voz del doctor en su memoria.



Con gran esfuerzo se incorporó sentándose aún adormilado, pero entonces, la cabeza comenzó a darle vueltas trayendo consigo una ráfaga de imágenes desordenadas.



La iglesia, el sacerdote, esos jóvenes, la lluvia...


Hongjoong.


¿Dónde está Hongjoong?


Abrió los ojos de par y se puso de pie tan rápido que tambaleó. Dió un vistazo alrededor pero no había ni rastro del mayor.



¿Qué tanto de lo que recordaba era un sueño?

Vendaval [Woojoong/Hongwoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora