★‡Extra 2‡★

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Ya después de unos meses de adopción, Rasazy se acostumbró al afecto de Sarvente, aún que amaba más a Ruv como padre. A Selever le costaba un poquito hacerlo, aún que el sueño que tuvo con aquella pareja no lo dejaba descansar bien últimamente.

Ruv siempre le decía que solo era un sueño y que no tenía porque darle tanta importancia a eso, lentamente empezó a créer en eso, era cierto. Solo era un sueño después de todo.

Cada cierto tiempo, cada uno de ellos le tocaba hacer las compras semanales del supermercado. Ahorita le tocaba a Selever hacerlo, caminó tranquilamente por la calle, conocía muy bien el sitio, hubo un tiempo en que las personas empezaron a regalarle comida y dinero para que no se robará la mercancía de las tiendas.

Hasta una vez cuando un vendedor lo iba a llevar a la cárcel por robar unos billetes, unos clientes lo defendieron ya que solo era un joven que buscaba comida y refugio.

— Que recuerdos... — Se dijo a sí mismo.

Pero no todo era así, había una chica que lo buscaba con un grupo engañado por haber dicho mentiras sobre él, hubo un día en que metieron a propósito un celular en su mochila, cuando esa chica dijo que lo robó, un ciudadano lo defendió por qué lo había visto todo.

— Creó que no debí recordar éso — Se dijo al ver que había llegado al mercado, antes lo había robado pero nadie dijo nada cuando entró allí adentró.

Hasta los gerentes lo saludaron como si nada a pasado. "Creó que no debí  venir demasiado" se dijo mentalmente, para irse buscando un par de cosas, miró la lista que tenía a mano afortunadamente había todo lo que estaba buscando, lo recogió en una cesta de compras ya que eran compras muy seguidas y no tan grandes.

— Tomates... Huevos... Lechuga... — Revisaba en voz baja la lista mientras caminaba.

En un pasillo por el que pasó, apareció la chica que siempre lo molestaba por ser callejero y huérfano, esa creyó que podría molestarlo por querer robar mercancía del mercado.

— Creó que tengo todo — Dijo Selever para mirar el pasillo donde la chica estabá anteriormente.

Selever al ver unos dulces de goma, cálculo cuánto podría costar, tomó unos dos empaques y después se fue a pagar pendiente de que no se saliera de lo que tenía planeado.

— Serian 2.457$ — Dijo el empleado para recibir el pago de las compras, le metió las cosas en una bolsa para que pudiera irse.

Ya nuevamente en la calle, sacó el paquete de gomitas para comerlas en el caminó, no era tonto, sabía que la chica lo estabá siguiendo, pasó unas 3 cuadras para llegar a la casa, tocó la puerta y fue recibido por Sarvente quién tomó las cosas.

— Dale las gomitas a Rasazy, voy a dar un paseó — Dijo Selever.

— Okey Selever, recuerda venir temprano — Le dijo Sarvente para entrar a la casa.

Una vez hecho lo de las compras, se fue al parque terminando de comer sus gomitas y botar el empaque a la basura, se puso en centro de está y miró el suelo viendo unos desperdicios viejos y llenos de Mo, esos desperdicios fueron una lección que tuvo hace vários meses atrás, como olvidarlo nunca se atrevió en regresar hasta ahora.

Se quedó recordando, era un día de lluvia y tormentas, ese día muchas personas lo empezaron a tratar mal por las mentiras que la chica le había dicho, causando que fuera más difícil conseguir comida, ese día tenía poca comida robada, llegó la chica a molestarlo con un grupo que trajo por las mentiras sobre él, ella sin medir nada de lo que decía sobre él, lo empezaron a golpear, tirando la comida que le costó conseguir y aplastándola para que no pudiera llevarse nada.

★Una noche inolvidable★ (Rasazy y Selever)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora