6. Úʟᴛɪᴍᴀꜱ ᴘᴀʟᴀʙʀᴀꜱ

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Las manos del menor jugaban con el cabello negro del contrario mientras ambos disfrutaban de estar bien de nuevo. Las peleas entre ellos no eran muy comunes, pero siempre que tenían una no tardaban mucho en reconciliarse.

Era un sábado por la mañana, digamos que con algo de resaca para el chico rubio. Al ser la primera vez que bebía, el fuerte dolor de cabeza no tardó en actuar.

—oix...me duele la cabeza— juyeon le miró bien y se dio cuenta de sus ojos hinchados, algo apenado le contestó.

—debe ser por todo lo que bebiste ayer, te darás un baño y luego te prepararé algo para comer. No puedes tener el estómago vacío.— el menor asintió mientras intentaba bajarse de los brazos del contrario. Juyeon no quería soltarle, no aún. Quiera estar con su calidez un ratito más. Cogió bien las pantorrillas del menor y fue dejando suaves y dulces besos por las mejillas de este. De mientras hacía esa acción, el mayor se sentó en la cama del contrario aflojando su agarre para que pudiera el menor acomodarse más libremente.

—Juju ¿qué pasa?— preguntó el inocente chico encima de las piernas contrarias. El mayor negó con su cabeza mientras pensaba en una buena respuesta.

—déjame disfrutar de tu calidez unos minutos más... por favor— fue lo único que necesitó decir para que el menor se sonrojará de forma notoria. Juyeon no se percató de ello, solo estaba apoyándose en el hombro del sonrojado cerrando sus ojos queriendo descansar un poco. Recordemos que juyeon no había podido pegar ojo en toda la noche.

Las grandes manos del mayor iban jugueteando con el borde de la camiseta del contrario hasta que después de unos segundos metió su mano por dentro de esta para acariciar su suave piel con la yema de sus dedos. Eric cerró sus ojos dejándose llevar por las suaves caricias del pelinegro.

Juyeon quería dormirse, estaba demasiado cómodo con su pequeño, pero, en cambio, este solo quería que el horrible dolor de cabeza se pasara. El rubio intentó desconectar un poco y seguir disfrutando de las caricias como pudiera, le estaba gustando el momento.

Después de un par de minutos el mayor se percató del sonido que hacía el estómago del rubio, un poco apenado miró al menor abriendo los ojos le dijo lo siguiente.

—voy a hacerte de comer ya, tu estómago ya no aguanta— dijo con una Dulce sonrisa haciendo derretir al menor, este solo asintió. Las manos grandes del más mayor soltaron el cuerpo ajeno pudiendo hacer que esté se levantara y fuera hacia el baño.

Juyeon bajó a la cocina y preparó un rápido desayuno, no muy elaborado. Un yogur con distintas frutas y cereales. Por si acaso también estaba preparando unas tostadas con mermelada de fresa.

De mientras, el chico rubio se iba preparando un cálido baño de buena mañana. El agua ni muy caliente ni muy fría, a una temperatura perfecta. Cogió una bomba de baño y algunas sales para poder relajarse más fácilmente. Una Dulce melodía salía a través del altavoz que tenía, claramente no podía faltar la música relajante en un momento como este. Y por último unas velas con aromas para tener esa aura perfecto de tranquilidad.

Eric se metió en la bañera notando como su piel se erizaba ante el contacto del agua. Se acomodó y poco a poco fue mojándose la nuca y el cabello. El chico también aprovechó para pensar sobre algunos temas.

—juju es un buen chico ¿por qué nunca le he visto tener novia? Ni tampoco alguna cita por el estilo...mm raro—

No era un tema que realmente tenía que pasar por la mente de Eric pero en cierta parte tenía razón. No había visto a Juyeon con una chica o cita anteriormente y para ser sinceros, juyeon era alguien bastante atractivo como para no fijarse en él. Y si trataba a los demás como a Eric, seguro que tendría un montón de pretendientes haciendo cola.

Just friends..?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora