Just a Friend To You - TaeSana.

[012]

Se odiaba, estaba más que claro, ¿pero que podía hacer ya? Estaban a unos días de comenzar con los conciertos, no debía pensar en... Lo sucedido, sólo debe centrarse en que volverá a ver a once y que al fin se presentarán las nueve juntas después de mucho tiempo.

— Sana — Habló Jihyo, sacándola de sus pensamientos.

— ¿Umh? Disculpa, no te presté atención — Admitió Minatozaki, mirando a su líder con una ligera sonrisa.

— El esmalte, lo dejaste destapado, así se secara — Informó Park.

— Oh, lo siento — Balbuceo, y cerró el envase.

— ¿Todo en orden? — Inquirió la menor.

— Por supuesto, Hyo, de maravillas — Respondió la extranjera, dedicándole una sonrisa tan falsa que se veía sincera.

La coreana le dedicó una simple mirada a las demás miembros que se encontraban presentes allí en la sala, y éstas salieron de ahí, dejándolas solas.

— Anda, dime que sucede, ¿es por TaeHyung? — Consultó, acercándose a la castaña y abrazándola por la espalda.

— N-no, yo solo-...

— Sabes que puedes contar conmigo, dime aquello que te está obligando a fingir tu sonrisa — Pidió.

Sana levantó la mirada, y se vio a los ojos en el espejo que tenía enfrente, y sin poder contenerse, rompió en llanto, refugiándose en los brazos de su líder, y buscando consuelo desesperadamente.

Se sentía vacía por dentro, necesitaba de aquel abrazo que le reconfortó el alma, pues  ante sus ojos, ella era una basura de persona.

— Me doy asco, Jihyo — Titubeó la japonesa — No debí haberle hecho eso a TaeHyung, él no se lo merece.

— Yah, tranquila, cuentame lo que pasó — Pronunció la menor.

Esta tomó asiento al lado de la extranjera, y se dispuso a oírla atentamente, diciéndole alguna que otra palabra para calmarla de vez en cuando. Luego de unas horas, dieron por concluida la charla, y Jihyo hizo lo que pudo para conseguirle el resto del día libre a su amiga, en definitiva, lo necesitaba.

Mientras tanto, en alguna parte de Corea, TaeHyung se despedía amablemente de los empleados del lugar donde acababan de grabar un programa de variedades, y fue camino al baño.

— V, debes quitarte el maquillaje — Informó una encargada del staff.

— Iré en un instante — Respondió.

La mujer asintió con la cabeza, y él ingresó, cerró la puerta detrás suyo y se encerró en un cubículo.
Bajó la tapa del inodoro, se sentó allí y tomó su celular para empezar a buscar en sus redes sociales algo acerca de la japonesa.

Para su mala suerte, su búsqueda fue inútil, pues sólo halló cosas acerca de la gira del grupo femenino y nada más, no habían noticias algo así como "Sana de TWICE se ha visto decaída en estos últimos días", o no se, algo que le indique que ello lo extrañaba y de alguna u otra forma estaba tratando de hacérselo llegar. Pero no, todo lo contrario, incluso se veía más feliz de lo habitual.

Trató de hacer lo mejor que pudo, pero no logró evitar soltar una pequeña lágrima ante la impotencia de no saber absolutamente nada de ella.

Quería creer que lo suyo sí significó algo y que ambos sí sintieron cosas reales, pero si Sana había sido capaz de borrarlo de su vida de un día para el otro, no había más respuesta de que el único enamorado allí fue él.

Seguramente se habrá visto como un idiota.

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Nimin_36