This is my Kingdom come (en español)

~ Capítulo 2 ~

Va vestido enteramente de negro para sorpresa de nadie. Aunque no lleva su habitual sudadera negra, sino una chaqueta negra tipo oversize con una capucha cubriendo su cabeza, y unos pantalones que más bien le verías llevándolos en actuaciones o entrevistas y no para ir en plan cómodo.

- Entonces... ¿puedo...? - pregunta ya que aún no lo has invitado formalmente

- Claro Señor, por aquí - parece que disfruta de que seas así, porque puedes incluso escuchar su sonrisa mientras se quita las botas antes de pasar adelante.

- ¿Y dónde podría poner esto? -

Vuelves la cabeza y le ves quitándose su chaqueta, a lo que aguantas la respiración ante la nueva vista que tienes de él con un jersey precioso en franjas blancas y negras con un amplio cuello en V.

Si no fuese suficiente para tu pobre corazón, después de quitarse la mascarilla y guardarla  en uno de los bolsillos de su chaqueta, no puedes apartar la mirada cuando se coloca bien el jersey, haciendo sus clavículas y el escote de sus pectorales más visible.

- ...dámelo - te acercas a coger sus cosas casi como si se las fueses a arrancar, con la mirada hacia abajo tratando de una manera horrible el disimular tu incandescente cara colorada, aún sabiendo que estás siendo muy obvia igualmente

- Gracias señorita - responde él riéndose mientras ve cómo colocas su chaqueta en un pequeño perchero que tienes cerca de la entrada

Tras colocar sus cosas, te vas directa al salón porque necesitas urgentemente sentarte en el sofá y calmarte un poco, cuando al seguirte te pregunta:

- Puedo oler café desde aquí

- Sí, iba a tomarme una taza antes...

- "¿Ibas?" Ve por ello y no te quedes con las ganas por favor... - al decirlo, pone cara de preocupación mientras se sienta en el sofá

- No te preocupes. De todas formas se que no te gusta

Lo dices mientras lo imitas sentándote en el sofá, y de repente, se hace el silencio.

Te acabas de dar cuenta de lo que realmente significa lo que acabas de soltar y te giras a ver a Chris, al que sus orejas se le han puesto visiblemente rojas.

- Ay no, no puede ser lo que acabo de decir. Soy tan...  - le escuchas reirse de ti una vez más mientras que tú lo único que puedes hacer es taparte la cara con ambas manos

- Jajajajaja, ¡no te preocupes! Además es un comentario positivo... ¿supongo?

- Pero soy idiota - intentas recomponerte

- ¡No lo eres! Ha sido gracioso, y  eso me gusta - eso no está mejorando absolutamente nada, porque ahora necesitas volver a tapar tus mejillas

Desde el mismo instante en el que ha entrado en tu casa no ha dejado de mirarte de una manera que ni siquiera puedes describir.

- Así que... de verdad supiste cómo venir aquí

- Como te dije, eso no iba a ser problema. Sabía a quién preguntar por tu número

- Y... ¿cómo conseguiste mi dirección? - estás especialmente interesada en este punto

- Bueno... vamos a decir que tanto tú como los miembros de staff más nuevos van a recibir un ramo de flores y una tarjeta escrita por mi como agradecimiento por el duro trabajo en estas semanas... - sus orejas están literalmente ardiendo

- JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA no te puedo creer Cristopher...

- Por favor no... Se que es la excusa más terrible que jamás hayas oído pero no se me ocurría nada mejor en tan poco tiempo - ahora es él quien se cubre la cara

- Entonces vas a estar muy ocupado mañana JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA

- Por favor cambiemos el tema, no lo soporto más uggghhhhh - eres tú quien no puede soportar lo mono que es ahora mismo...

Los dos estáis sentados a cada extremo del sofá, y esta es la primera vez que piensas que tu sofá puede ser algo grande...

Chan está sentado normal, echado un poco hacia adelante. En estos últimos minutos ha dejado de mirarte de la manera en que lo hacía para empezar a extender y jugar con sus manos en una clara señal de nerviosismo.

Por el contrario, ahora eres tú quien lo mira a él, sentada sobre tu pierna izquierda que está doblada sobre el sofá mientras que la derecha cuelga normal.

Tu mirada indica descaradamente que tienes preguntas que hacer. Muchas preguntas, que están listas para salir de tu boca cuando:

- Yo... quería disculparme - arqueas una ceja como respuesta a su repentino semblante serio - esta tarde en el backstage estuve demasiado acelerado por la final y el show y quizá no debí...

- Oops vaya aquí viene la fase de arrepentimiento... - intentas ocultar tu decepción bajo una fachada de madurez - Está bien no te preocupes, somos adultos y -

- Oh no no ¡no me refiero a eso! - esta es su reacción más rápida e improvista desde que llegó a tu casa, girando su cabeza para mirarte directamente y mover sus manos en señal de negación - Lo que quiero decir es, que no pretendía acercarme a ti de esa manera. Estaba tan fuera de mi que me salté unos cuántos pasos... -

Te quedas unos segundos en blanco antes de empezar a procesar el cómo pasar de la decepción a que Chan se te esté confesando... en cierta manera.

- Así que, ¿crees que estaba enfadada?

- ¿No lo estás?

- ¿Te pareció en esa habitación que lo estaba?

- Jaja - qué risa tan pequeñita y tímida - Me gustaría pensar que no - te mira con una sonrisa tan inocente que estás maldiciendo el espacio que ahora mismo os está separando.

- Y piensas bien, pero...

- ¿Pero...? - parece muy preocupado

- No se cómo exponer esto así que lo haré directamente - no ha parpadeado ni una sola vez desde que empezaste esta frase - ¿Por qué no? ¿...soy solo yo? ¿soy únicamente un entretenimiento para un rato? Sea lo que sea me gustaría saberlo, porque ya es demasiado embarazoso que estés aquí en mi casa mientras yo llevo puesto un saco de patatas... ugh - terminas tu discurso poniendo tus dos piernas sobre el sofá, abrazando tus rodillas para poder esconderte

- Mmmm... me gustan las patatas - su risa casi hace eco en toda la estancia después de haber estado aguantando la respiración mientras hablabas

- Aaahhhh venga ya... - no puede verte, pero sabe que estás haciendo pucheros tras tus rodillas