¨FIN¨

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Estaba profundamente dormido cuando siento a alguien moverme.

— ¿Dónde estamos? — interrogo a Jimin, bajándome del carruaje.

— Debemos comer, venga que ya esta todo preparado. — me guía hacia unas mantas donde había comida y un lugar donde poner a Soyeon.

Me siento y algunos criados se acercan a mi acomodando la comida y sirviéndome. Veo a Hoseok y Jimin parados a mi lado.

— Siéntense conmigo, por favor. — ofrezco señalando a mi lado, ellos se ven un poco renuentes, pero terminan aceptando y sentándose a mi lado.

Luego de un rato vemos a un grupo de caballos acercarse y veo como algunos guardias me rodean cubriéndome.

— Es su majestad — Grita uno de los guardias.

Me levanto rápidamente, mis piernas me tiemblan y empujo a los guardias y veo a mi alfa viniendo en un caballo. Acelera su galopeo cuando me ve y me sonríe.

Para al caballo cerca de los carruajes y corro hacia el con lagrimas en los ojos. El me abre los brazos, choco con su pecho y comienzo a llorar más fuerte.

— Todo esta bien mi vida, estoy bien — Me afirma mientras me soba la espalda y me besa la cabeza.

— Yo te extra-ñe mu-cho — Comencé a hipar y balbucear. — Pen-se que te había pa-sado algo.

— Shh, estoy bien yo también los extrañe mucho. — Me besa y limpia mis lágrimas. — ¿Están bien ustedes?

Asiento tomándole la mano y guiándolo a donde me encontraba antes.

— ¿Cómo esta la princesa más linda? — alaga, abrazando a Soyeon quien ríe en sus brazos.

— Debes estar hambriento, come algo. — le ofrezco un poco de lo que estaba comiendo y me niega con la cabeza.

— Debo volver al castillo cuanto antes. — Me comenta.

Asiento parándome y tomando a Soyeon.

— ¿Qué haces? — pregunta levantándose conmigo.

— Ir contigo — Le comento mientras acomodo a Soyeon en el carruaje.

— Cariño debes comer — Niego.

— Puedo comer luego — le afirmo adentrándome en el carruaje, esperando que él lo haga pero en vez de eso da la vuelta.

Confundido espero, cuando entra al carruaje se sienta y me da comida la comida. Se acomoda a mi lado y pasa su brazo por mi cintura.

— Vamos. — Indica a todos, se comienza a mover el carruaje — Come mi omega.

Asiento y lo hago. Durante el transcurso no hablamos hasta que termine de comer.

— ¿Por qué vamos tan deprisa al castillo? — cuestiono viendo sus ojos un poco idos.

— Jonhyung fue herido. — Dijo eso y cerro sus ojos.

Entendí eso como una señal que no quería hablar y no lo presionaría. Tomo su mano y la sobo.

El abre los ojos y me ve.

— Te amo. — me susurra, me sonrojo y me acerco para besarlo.

El beso fue lento.

Sus labios estaban un poco resecos, lo había extrañado demasiado, sentí como mi omega movía la cola y se sentía feliz.

La angustia que sentía se había ido, podía respirar.

Cuando nos separamos respire profundo y sentía que por fin podía respirar.

Todo había acabado.








En el castillo

— Estas condenado a muerte — Sentencio Jungkook viéndolo con desprecio.

No hubo tiempo que el señor Han pudiera apelar, se lo llevaron arrastras los guardias. Yo veía todo desde mi asiento tomando la mano de mi alfa.

— Vámonos. — Se paro Jungkook tomándome de la cintura.

Caminamos tomados de la mano sonriendo.

— Todo acabo. — Respire fondo y reí cuando vi a Soyeon jugar en el piso.

Por fin Mi alfa, Soyeon y yo por fin tendríamos una vida feliz y en paz.

O eso creíamos.




Me encontraba recostado en su espalda mientras jugaba con sus manos, Soyeon se encontraba durmiendo a unos metros de nosotros se podían escuchar sus leves ronquidos haciendo que los dos riéramos.

— Taehyung —. Llamo Jungkook, volteo a verlo y él me sonríe — Ven.

Me toma de los brazos, me da la vuelta, me acomoda en su regazo, quedando, viéndonos los dos.

— En algún momento dejaremos nuestro cuerpo humano, pero nuestras almas siempre vivirán junto a nuestros lobos —. Lo vi con una expresión confundida y el beso mi ceño fruncido — No me malentiendas cariño, lo que trato de decir es que siempre tratare de encontrarte en nuestra siguiente vida. Recuérdalo te amare hasta la eternidad y prometo siempre buscarte.

Me dio un beso lento, pero demostró tantos sentimientos que nuestros lobos no paraban de aullar de la felicidad.

— Te amo, mi alfa recuerda que siempre te perteneceré y te amare para siempre.

Dos alamas destinadas estando juntas, amándose con toda su existencia y una promesa que en el futuro podría cumplirse.












Señor, ella esta embarazada.

Se escucha como el vaso se quiebra y un silencio.

Tráela aquí es tiempo de terminar lo que Han empezó.






Fin 






¡Ahhhh! Se acabo este viaje estoy tan feliz con los resultados espero que les gustara la historia gracias a todas esas personitas que me han apoyado desde el inicio de esta historia y agradecerles a las que se unieron durante el proceso.

Las amo.

Si quieren seguirme son recibidas con los brazos abiertos estaré ahí avisando nuevos fic y actualizaciones de otros. 

¿Quisieran epilogo?

y si quieren ¿De que les gustaría?

Adiós.

©LaChicaDeGafas












𝑴𝒚 𝑶𝒎𝒆𝒈𝒂 𝑲𝒐𝒐𝒌𝒗 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora