𝑴𝒚 𝑶𝒎𝒆𝒈𝒂 𝑲𝒐𝒐𝒌𝒗

"Capítulo 6"

Pasaron unos meses luego de esa plática que tuve con Jimin y Jisso. Jungkook me había tratado muy bien en mi estadía en el castillo aún que extraño a mis padres y hermano.

Mi hermano me a estado llegando demasiadas cartas diciendo que me extraña, quisiera verlo pero me da verguenza decirlo.

Jungkook a estado muy ocupado estos días con asuntos del reino, no lo e mucho tiempo a veces cuando estoy en el jardín viendo las rosas el llega a verme unos minutos luego regresa al trabajo, no me quejo es parte de ser el rey.

Pero mi Omega lo extraña mucho.

Bueno también yo quizá un poco.

Ahora estaba me estaba dirigiendo a la cocina del palacio estaba pensando en que hacerle de comer a Jungkook quería darle esto me eh dado cuenta que no a estado comiendo y me preocupo.

Jimin y Jisso iban atrás mío charlando como siempre, estaba por entrar a la cocina cuando alguien me detuvo.

-  ¿Que pasa? - pregunté al ver cómo me detuvo, me hice a un lado para poder pasar pero ella se movió, me estaba irritado estos días estado más enojado y caprichoso.

Es por qué mi celo está cerca y mi Omega está inquieto quiere pasar el celo con su alfa.

Yo aún no lo se.

No sé si el querrá.

- Déjame pasar - pedí irritado.

- Tu no puedes estar aquí campesino - me dijo Lisa.

En serio está chica me estaba artando.

Si por mi Omega fuera ella ya estuviera en la horca.

- No me llames un campesino - dije molesto.

- Es lo que eres campesino - dijo lentamente en mi cara casi escupiendome.

Ví como Jimin y Jisso quisieron hablar pero les hice una seña que se fueran, al principio no quisieron pero insisto ellos por fin aceptaron y se retiraron.

Esto era entre ella y yo.

- Ahora sí déjame pasar - dije con un tono desafiante.

- Ya te dije que no campesino, no deberías de estar aquí - me dijo empujándome.

- ¡Que no me llames campesino! - le grité.

Ella ni se imuto, solo río.

- Es lo que eres - me dijo.

- Y tú le abres las piernas al primero que pase - le dije enojado.

- También el vino a mis piernas - me dijo.

Y me quedé pasmado, sabía de quién hablaba, lo sabía muy bien.

Era mi punto débil.

Era las palabras que mi Omega y yo pensábamos siempre.

Pensar que el estuvo con alguien más hace que mi Omega se sienta lastimado.

Me di la vuelta lentamente determinado a qué hablaría esto con mi alfa. El me ayudaría.

¿Verdad?

Caminaba hacia la oficina de mi alfa cuando entro veo a Yuna hablando con el.

Cómo odio a cada Omega que se le insinúa.

Estaba dejando sus fermonas para que Jungkook oliera a el.

Me enfureció.

- Vete de aquí - le dije acercándome.

Jungkook me miraba curioso del por qué mi actitud, pero veo que no hará nada para impedirlo así que sigo.

- Te dije que te fueras - le dije.

- Yo estoy con el mi señor ayudándole - me dijo con una sonrisa.

- y yo dije que te fueras - le dije irritado.

- Estoy ayudando a mi señor Jeon - dijo ahora con aires de grandeza.

Me acerque lentamente, estaba muy enojado.

- Te largas ahora o será a mi manera - dije.

- Dije que... - iba a seguir hablando pero alguien le interrumpió.

- Lo que el diga es como si yo fuera un orden, ¿Entendido? - dijo Jungkook.

Ella no contesto pero bajo la cabeza.

- ¿Entendido? - pregunto está vez alzando un poco la voz.

- Si mi señor, lo siento por el atrevimiento - dió una reverencia y se fue.

- ¿Que pasa por qué estás enojado? - me preguntó haciendo un ademan que me sentara en sus piernas.

Me senté en sus piernas, sentí ese asqueroso olor y me removi incómodo.

- ¿Algo te incómoda? - me preguntó está vez preocupado.

- Si, hueles a ella - dije molesto.

- Oh lo siento no me di cuenta, te pido mis sinceras disculpas - me dijo dandome un beso.

- Eso no arregla el hecho que hueles a ella - dije molesto.

- ¿Por qué este pequeño está molesto? - pregunto sobándome la cara.

- Una de las concubinas me a molestado y mi celo está cerca estoy las territorial - dije bajando mi cabeza - lo siento.

- No te disculpes cariño, ¿Me dices quien te molesto? - me dijo Jungkook sobando mi espalda.

- Lisa

Suspiré ante eso.

- ¿Que te dijo?

Cuestionó preocupadamente.

- No me dejó pasar a la cocina, me dijo cosas que hirieron a mí Omega y a mi pero era verdad.

- ¿Que cosas te dijo?

Baje la cabeza pero tenía que decirlo.

- Me ofendió, yo le dije que le abría las piernas al primero que se le pase, ella me dijo que tú también fuiste a sus piernas.

Suspiro tratando de no llorar frente a el.

- Oh cariño, tú eres mi Omega nada de eso volverá a pasar, mientras yo esté contigo.

Dijo sobándome mi espalda.

- No debes preocuparte sobre eso el único Omega al que quiero eres tú eres mío, ¿Está bien cariño?

Solamente asentí me gustaba está sensación sin saber que alguien estaba espiando.

No todo el felicidad

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© Kookvc